WASHINGTON (apro).-El juez Brian Cogan, de la Corte Federal del Distrito de Este en Brooklyn, Nueva York, aceptó con reservas las pruebas del Departamento de Justicia en contra del exsecertario de Seguridad, Genaro García Luna sobre manipulación de posibles testigos y amenazas contra periodistas.

En un documento de dos páginas Cogan les advierte a los fiscales del Departamento de Justicia, que en ambos asuntos, las evidencias que tienen pueden no ser aceptadas por el jurado calificador y sentar un precedente judicial para el futuro.

“El gobierno (estadunidense) pretende presentar testimonio de un testigo cooperante de quien García Luna cree que cuenta con los recursos para intimidar o asesinar a un testigo potencial por parte de los fiscales”, indica el juez federal de la Corte en Brooklyn.

“Junto con el testimonio del testigo, el gobierno pretende presentar una por lo menos una grabación de una conversación entre el testigo y García Luna”, matiza el juez Cogan en la notificación de admisión de pruebas del Departamento de Justicia.

La grabación a la que hace referencia Cogan, corresponde a una conversación ocurrida en noviembre de 2020, estando ya García Luna en una prisión en Nueva York, en la cual pretende contratar un supuesto integrantes de la mafia rusa para aniquilar a presuntos testigos.

El Departamento de Justicia ha presentado mociones a la Corte en Brooklyn, en las que sostiene que esos testigos que García Luna busca asesinar por medio de mafiosos son, Jesús, “Rey” Zambada García y Luis Cárdenas Palominos, quienes podrían testificar en su contra.

Rey Zambada García es el hermano de Ismael “El Mayo” Zambada García, líder del Cártel de Sinaloa, y Cárdenas Palomino quien se encuentra detenido y acusado en México por los delitos de secuestro y tortura, fue subalterno de García Luna en el gobierno de Felipe Calderón

Cogan le advierte a los fiscales que si los integrantes del jurado con la grabación podrían darle más a que el acusado amenace con asesinar a testigos que, a evidencias que podrían corroborar su participación en los delitos que se le imputan relacionados al trasiego de drogas.

“La admisión de esta evidencia puede ser contraproducente… tras haber escuchado la grabación la Corte no puede determinar que se dijo o no se dijo porque las voces están muy distorsionadas y necesitarían convencerme de que quien hizo la transcripción tiene un conocimiento fidedigno de lo que se dijo y que esta corte carece”, agrega Cogan.

Con respecto a la amenaza a periodista y manipulación de la prensa mexicana por parte de García Luna, el Departamento de Justicia sostiene que cuenta con hecho fehacientes de ello.

César de Castro, el abogado defensor de García Luna había pedido al juez rechazar la exigencia de los fiscales porque se trata de algo improbable; que su cliente amenazó de muerte a la reportera Anabel Hernández acusación que no se ha podido probar.

El defensor también argumento a la Corte que lo mismo ocurre con los supuestos de los fiscales de que García Luna soborno a un directivo de un medio de comunicación, para prevenir que se publicara información sobre sus supuestos nexos con el narcotráfico.

“El gobierno presento evidencia sustentada en la palabra de un testigo que estaba investigando a García Luna por corrupción, durante su investigación el testigo clama que recibió amenazas por parte del acusado y sus socios y que con estos planeo asesinar al testigo. Sin evidencias que demuestren que García Luna fue responsable de estas amenazas y de las acciones de sus supuestos socios, estas pruebas son substancialmente más perjudiciales que probativas del delito”, advirtió el juez Cogan a los fiscales.

Por último el magistrado le llamó la atención a De Castro, por haber revelado el nombre de Hernández como la periodista que sostiene fue amenazada de muerte por García Luna.

Hace unos días el juez Cogan determinó que el juicio contra García Luna inicie el 9 de enero de 2023, en base a los delitos de narcotráfico y mentir a un agente de inmigración federal que le imputa el Departamento de Justicia al ex colaborador y funcionario de Calderón.