Cultura

Machismo y abuso sexual en la cinta de terror “Turno nocturno”

El director Rigoberto Castañeda acude en sus obras de este género a las leyendas mexicanas, por su riqueza. Ahora visita un hospital, donde se habla de un fantasma, La Planchada. Detrás de ello devela violencia. Él y la actriz Iazúa Larios explican el filme estrenado en este Festival de Morelia.
sábado, 26 de octubre de 2024 · 07:00

CIUDAD DE MÉXICO (Proceso).- Basada en una leyenda en los hospitales de México, el cineasta Rigoberto Castañeda (Km 31, año 2007, y Km 31-2) crea Turno nocturno (México, 2024), con Paulina Gaitán (como protagonista), Fernanda Echevarría del Rivero, Tony Dalton, Azul Guaita, Iazúa Larios, Enoc Leaño, Adriana Llabrés, Paty Maqueo y Patricia Reyes Spíndola.

La producción, distribuida por Sony Pictures, se estrenará en los cines en diciembre próximo. Ya se presentó en la 22 edición del Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM), efectuado del 18 al 27 de octubre. La historia se sitúa en un hospital de la Ciudad de México de 1979. Se trata de una joven enfermera que llega a trabajar al turno nocturno, donde le dan reglas sencillas: no te distraigas, no te relaciones con el personal y no te duermas nunca y, poco a poco, ella ve cómo cosas misteriosas empiezan a ocurrir en el hospital.

El filme, de 108 minutos y guion del mismo Castañeda, está basado en La Planchada, fantasma famoso entre trabajadores de la salud, ya que se aparece en hospitales para ayudar a pacientes.

Castañeda. De la leyenda a la realidad. Foto: Cortesía de Eurekandco.

Castañeda (Ciudad de México, 1973) cuenta en entrevista que siempre ha tenido interés de retomar leyendas mexicanas:

“Desde mi primera película me enfoco en este género del terror y suspenso, y espero seguir haciéndolo. Tenemos una cultura muy rica, llena de tradiciones, de magia, ideas y conceptos que están en el aire y que todos hemos recogido vía tradición oral, y por supuesto se reflejan muchas veces en la literatura, pero la mayoría de las veces se pierde. Incluso también en ensayos se puede analizar toda esta tradición oral, pero sin duda se diluye en el paso del audiovisual todavía más.

“Creo que hemos explorado una íntima parte de lo que somos, de las historias que tenemos, de la forma que tenemos también de ver el universo paranormal en nuestra existencia como mexicanos, y falta muchísimo por explorar. Por supuesto es difícil seleccionar cuál historia narrar y enamorarse. Hay más leyendas famosas que ésta, pero es muy conocida en la industria de la salud, de pronto llegas a un hospital en Baja California y les preguntas si han escuchado de La Planchada, y responden que sí. Lo mismo es en el Centro de la Ciudad de México, Cuernavaca, Yucatán, en fin. Todo el mundo se pelea los derechos de este fantasma”.

El realizador explica:

“Yo tomo esta historia muy particular porque es un fantasma que viene de una vertiente muy femenina, una enfermera. A pesar de que hoy existen muchos hombres enfermeros. Antes esta profesión se enfocaba más en las mujeres, con las cuales se puede abordar el abuso del machismo. Un tema social que tenemos muy arraigado en nuestra nación es el patriarcado, lo vivimos todos los días.

“Cuando era un niño, en los setenta, el problema era todavía más fuerte que ahora. Por lo mismo la película se sitúa en los setenta. Y de pronto al ejemplificar con cosas mucho más digeribles para el espectador, siento que aportamos mucho más al poner un granito de arena a este cambio tan necesario en nuestra seciedad. Estos tópicos llegan más a la gente con una película comercial como es ésta, una película de horror, a que si se hace en un documental. Un documental lo ve sólo un porcentaje”.

Castañeda exalta que siempre le han gustado más los protagónicos femeninos:

“Me parece mucho más interesante que el masculino. De hecho cuando empiezo mi carrera en Km 31 recuerdo haber tenido discusiones con algunos ejecutivos diciéndome: ‘Es que funcionan más las películas con un protagónico masculino’, y yo necio, de no me importan. Hoy por suerte ya no se piensa así, es al revés, pero siempre he sentido que la fuerza de la mujer se da en la forma de pensar y de ejecutar ciertas cosas que comulgan con el horror. Y no nada más centrarse en leyendas muy mexicanas para la pantalla, sino también de contar problemáticas muy mexicanas. Es lo que se hace en esta cinta”.

--¿Cómo insertar la problemática social o cultural mexicana en una historia de terror y suspenso?

--Es mucho a partir del análisis profundo de lo que es, primero que nada, esa profesión de la salud, de meterse verdaderamente en su entrañas, de cómo funciona y qué significa. Cómo la ven las misma enfermeras, los médicos y los pacientes. Ver los problemas ahí. E históricamente qué es lo que se ha resarcido y lo que sigue siendo exactamente igual.

“Curiosamente a mí me pasó una situación personal en el 2021 y fui internado en el hospital tres meses. Al principio en un hospital privado y después por temas de seguro y demás, acabé yéndome al ISSSTE. El guion lo escribir estando en el hospital. Ahí platiqué mucho con las enfermeras, leí incluso escenas con ellas”.

Larios. Foto: Cortesía de Eurekandco.

La enfermera que lo atendía y su doctor le dieron seguimiento a toda la película:

“Estuvieron en el set y vieron cortes de la edición. Me aconsejaron. Eran mis supervisores. Me narraban anécdotas. Me decían: ‘Lo que pusiste en el guion, ¿crees que sólo sucedía en los setentas? No, sigue sucediendo’. Entonces debe haber un estudio profundo. De platicar mucho con las personas que se dedican a eso. Estudiar qué significa para una enfermera estar en el turno nocturno y ser rodeada de un universo masculino, porque al final de cuentas era un universo masculino un hospital, y hoy día sigue siendo por cómo se manejan las situaciones de poder y de cómo se oprime a la mujer desde la opinión hasta una decisión fuerte de trabajo”.

Continúa:

“Si te das cuenta, el mismo fantasma sufre con el patriarcado, de todo este machismo, y por eso se convierte en fantasma. A final de cuentas es un espíritu que tiene asuntos sin resolver, que murió por una desgracia con un trauma de vida, y eso repercute en convertirse en un alma en pena, por toda esta problemática que se narra en la película”.

--Lo terrorifico no es el fantasma, más bien el terror es lo que sucede en el mundo de la mujer, ¿verdad?

--La gran resolución de la película es justamente el entender que el abuso es violencia y que la violencia genera un problema mental, un problema psicológico, y ese problema psicológico tiene repercusiones. Así como hablábamos de la caja de resonancia cultural de nuestro país, también hay una gran caja de resonancia psicológica, no nada más de ella (la enfermera), sino además perturba también a los que provocan violencia.

Termina:

“En la película quise dibujar varios tipos de machismo con diversos personajes. Un vigilante del hospital le dice chula de mala manera, y repercute no nada más en ella, porque le molesta que le digan así, sino repercute en ese hombre, y ni cuenta se está dando, porque no trata con respeto a un ser humano. Hay un elemento de psicología muy interesante para crear horror psicológico”.

Iazúa Larios

La actriz Iazúa Larios, quien recrea a otra enfermera en la trama, narra cómo llegó a Turno nocturno:

“El director Rigoberto Castañeda vio mi trabajo en algunos proyectos anteriores y me buscó en mi agencia. Es uno de estos casos extraños donde no hice un casting. Mi agencia me pasó el guion y después ya hicimos una reunión con Rigoberto a través del zoom y fue así como inició todo”.

Leaño en escena. Foto: Cortesía de Eurekandco.

Recuerda que se sorprendio al leer el guion porque no sabía lo que pasaba dentro de los hospitales:

“No estaba enterada, ni tampoco muy cercana, de cómo funciona por dentro un hospital, y no quiere decir que todos los hospitales funcionen así, pero sé que el director está informado y que no sale la historia de la nada. Es sobre la ética de los trabajadores, ese es el terror número uno, luego ya viene la leyenda, porque se ven ahí unos abusos de poder, machismo, en fin, que deja ver el terror interno de los sistemas, que no vemos ni como pacientes ni personas externas”.

Y destaca:

“Mi personaje concretamente fue planteado como contraparte de la protagonista, un poco como una rival, pero sin serlo tan obviamente. Es un caso que se da típicamente dentro de trabajos agotadores institucionales. La típica relación solidaria entre mujeres, pero también es contradictorio porque dentro de esa situación mi personaje también caracteriza un dejo revolucionario, digamos rebelde dentro de la institución, porque se salta un poco todas las reglas. Tiene tonos feministas y también representa la rebeldía ante la institución”.

Turno nocturno forma parte de la 17 edición de Mórbido Film Fest, que se llevará a cabo del 29 de octubre al 10 de noviembre del 2024 en la Ciudad de México.

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