Morelia
Dos sacerdotes de la Arquidiócesis de Morelia son atacados a balazos; uno resultó herido
El ataque en Zinapécuaro no es un hecho aislado, pues tanto en Michoacán como en otras entidades del país se han registrado en los últimos años múltiples agresiones contra sacerdotes y religiosos, varios de ellos asesinados en circunstancias ligadas a la violencia del crimen organizado.MORELIA, Mich. (apro).- Dos sacerdotes de la Arquidiócesis de Morelia fueron víctimas de un ataque armado la noche del martes, en las inmediaciones del municipio de Zinapécuaro, en un hecho en el que ambos religiosos sobrevivieron y se encuentran fuera de peligro.
Mediante un comunicado difundido por la oficina de prensa de la Arquidiócesis, el vehículo en el que se trasladaban los sacerdotes fue interceptado por varios sujetos armados de identidad desconocida, quienes abrieron fuego contra ellos y en la agresión resultó lesionado uno de los clérigos, quien viajaba en el asiento del acompañante, con impactos de bala en ambas piernas.
A pesar de la gravedad del ataque, los sacerdotes lograron conducir el vehículo varios kilómetros más, hasta ponerse a salvo y solicitar ayuda a la Fiscalía General del Estado, que envió agentes para auxiliarlos y coordinaron su traslado a un hospital en la ciudad de Morelia.
En su pronunciamiento, la arquidiócesis señaló que hasta ahora se desconoce la causa o el móvil del atentado y expresó una condena enérgica contra este tipo de hechos y pidió la intervención de las autoridades para garantizar condiciones mínimas de seguridad.
“Desaprobamos y condenamos este tipo de hechos que atentan contra la vida de cualquier persona. Hacemos un llamado a las autoridades pertinentes para que sigamos construyendo una sociedad segura donde reine la paz a la que estamos llamados por el mismo Dios, Nuestro Señor”, expuso.
Además de la condena, la institución religiosa manifestó su solidaridad con los sacerdotes atacados y con sus familias, e hizo un llamado a la conversión de quienes cometen este tipo de agresiones.
“Oramos siempre por las víctimas, por sus familiares y por la conversión de los responsables de éste y de los demás hechos violentos que ocurren en nuestra sociedad”, añadió.
El ataque en Zinapécuaro no es un hecho aislado, pues tanto en Michoacán como en otras entidades del país se han registrado en los últimos años múltiples agresiones contra sacerdotes y religiosos, varios de ellos asesinados en circunstancias ligadas a la violencia del crimen organizado.
De acuerdo con reportes de la Iglesia católica y de organizaciones civiles, México se ha convertido en uno de los países más peligrosos para ejercer el sacerdocio en América Latina, pues en los últimos diez años, más de una veintena de sacerdotes han sido asesinados, algunos de ellos en Michoacán, Guerrero, Veracruz y Chihuahua.