Chiapas
“Muerte Impune”: acción pública de denuncia ante muertes prevenibles de adolescentes en Chiapas
Esta iniciativa busca visibilizar la violencia estructural, la negligencia institucional y la impunidad que arrebatan vidas jóvenes en el estado y en el país.SAN CRISTÓBAL DE LAS CASAS, Chis. (apro).- Desde hace una década, Melel Xojobal impulsa la acción pública “Muerte Impune”, un ejercicio de denuncia y memoria frente a las muertes prevenibles de niñas, niños y adolescentes en Chiapas. Esta iniciativa busca visibilizar la violencia estructural, la negligencia institucional y la impunidad que arrebatan vidas jóvenes en el estado y en el país.
Durante los primeros años, Muerte Impune se centró en denunciar las omisiones y complicidades del Estado en fallecimientos evitables. Sin embargo, en los últimos tiempos, la acción ha incorporado la creciente ola de violencia armada que afecta directamente a la niñez y adolescencia.
Según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en 2025, México registró 33 mil homicidios durante 2024, de los cuales 932 ocurrieron en Chiapas.
El panorama global refuerza esta desvalorización de la vida humana. Guerras y genocidios en Palestina, Sudán y República del Congo evidencian una impunidad generalizada, donde la niñez es víctima directa. Tan solo en Palestina, cada día 28 niñas, niños y adolescentes son asesinados por ataques del ejército israelí (Save the Children, 2025).
Esta normalización de la muerte revela una continuidad: la impunidad de los imperios genocidas se refleja en la impunidad local de los cacicazgos y gobiernos negligentes.
En Chiapas, la violencia hacia niñas, niños y adolescentes se expresa en múltiples formas. Las estadísticas del INEGI muestran que, en 2024, las principales causas de muerte entre jóvenes de 15 a 24 años fueron los homicidios, los siniestros viales y el suicidio.
Para los grupos de 10 a 15 años, destacan los accidentes como primera causa, seguidos por el suicidio y los homicidios. Incluso entre la niñez más pequeña (5 a 9 años), los homicidios figuran como la séptima causa de muerte.
En lo que va de 2025, Melel Xojobal ha documentado 79 muertes de niñas, niños y adolescentes en Chiapas: 49 en siniestros viales, 10 víctimas de homicidio, 6 víctimas de feminicidio, 14 por homicidios culposos.
Entre los casos más graves se encuentran los 7 homicidios de adolescentes varones de entre 13 y 17 años ocurridos en municipios como Chilón, Reforma, San Cristóbal, Sunuapa y Tuxtla. También, el asesinato de tres hermanas de 2, 4 y 6 años, envenenadas en El Bosque a inicios del año.
La violencia feminicida sigue cobrando vidas en Chiapas. En 2025, se han registrado 6 feminicidios de niñas y adolescentes, principalmente con arma de fuego, en Frontera Comalapa, Ixtapa, San Cristóbal, San Juan Chamula, Mapastepec y Tuxtla. Entre las víctimas se encuentra una adolescente embarazada y una niña de apenas siete años.
Detrás de cada feminicidio, además del dolor de la pérdida, quedan 21 niñas, niños y adolescentes en orfandad (Alerta de Violencia de Género, septiembre 2025).
Mientras la campaña oficial de “Cero Impunidad” del gobierno estatal avanza mediáticamente, en la práctica la justicia no llega. Los responsables —materiales y estructurales— suelen gozar de protección o impunidad, y las políticas públicas carecen de estrategias reales para prevenir muertes evitables, señala la Ongs.
Ante este contexto, Melel Xojobal se pregunta: ¿Qué acciones colectivas puede impulsar la sociedad civil para transformar esta realidad? ¿Cómo acompañar a niñas, niños y adolescentes en procesos que fortalezcan su seguridad, participación y ejercicio de derechos?
La organización hace un llamado a colectivos, comunidades y sociedad civil a sumarse en acciones de denuncia, memoria y prevención. Se busca fortalecer la organización comunitaria, realizar actividades públicas en escuelas, plazas y parques, y generar espacios donde niñas, niños y adolescentes sean protagonistas en la defensa de su vida y dignidad.
Cada muerte impune es un recordatorio de la deuda del Estado. Si guardáramos un minuto de silencio por cada una de las 79 muertes registradas este año, el silencio duraría una hora con diecinueve minutos. Pero Melel Xojobal insiste: no es tiempo de callar, sino de usar la voz y la rabia para exigir justicia.
“Encendemos una luz por quienes nos fueron arrebatados y nombramos a Said, Perla Allyson, Rosa Valeria, Deysi Guadalupe, Loisel, Axel, Fabiola Esmeralda, Marbeli Mabeli, Denis Misael, Eliud Antonio, Alfred Hazael, Elvín, y todas las niñas, niños y adolescentes que no debieron morir por la violencia, la negligencia y la impunidad en Chiapas”.
Justicia, memoria, verdad y no repetición para todas las niñas, niños y adolescentes que no debieron morir.