PACHUCA, Hgo. (apro).- El enfrentamiento de este 11 de enero entre elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), civiles y un grupo de presuntos huachicoleros en la comunidad La Estación, en Cuautepec de Hinojosa, el municipio con mayor volumen de hidrocarburo robado y tomas clandestinas en el país, dejó cuatro personas fallecidas y nueve heridas, informó el gobierno de Hidalgo.

Inicialmente, el Ejecutivo dio a conocer que, tras dos tiroteos, 16 personas resultados lesionadas; no obstante, al actualizar los datos confirmó que cuatro de los que fueron alcanzados por las balas murieron en el transcurso de las últimas horas. 

Desde ayer, escuelas y comercios fueron desalojados, mientras que la población fue alertada de que se mantuviera a salvo en sus hogares, "para evitar una tragedia".

Con base en la versión del estado, trabajadores de Pemex reparaban un ducto cuando alrededor de 120 personas encapuchadas llegaron en vehículos pick up a agredirlos. En ese primer ataque, 13 empleados de la empresa resultaron lesionados; además, tres camionetas tuvieron daños por los impactos de bala.

Al lugar, que se ubica en un polígono identificado por la Sedena como de alto riesgo por el saqueo de hidrocarburo, llegaron militares para auxiliar al personal de Pemex, pero, según la información de gobierno, “fueron violentados por un grupo de 250 personas presuntamente relacionadas con el delito de extracción ilegal combustible, quienes portaban diversas armas de fuego que fueron detonadas en el lugar”.

En este segundo ataque se reportaron tres lesionados más.

En ninguno de los dos hechos, indicó la administración a cargo de Julio Menchaca Salazar, hubo detenidos. No obstante, cuatro vehículos fueron asegurados y ocho carpetas de investigación fueron iniciadas por parte de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo.

En su conferencia de esta mañana desde Palacio Nacional, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador aceptó el repunte de este delito –contra el cual centra su estrategia de seguridad federal– y alertó sobre el involucrado de la sociedad civil.

“Nos preocupa mucho porque se está involucrando a la población (...) Algo que no queremos que suceda por lo de Tlahuelilpan”, dijo en referencia a la explosión por una fuga de hidrocarburo el 18 de enero de 2019, que dejó 137 muertos, entre quienes perecieron calcinados en el lugar y los que lo hicieron entre las semanas siguientes en hospitales, donde fueron internados con quemaduras graves.

“Son delitos graves” y “grupos de la delincuencia mal encaminan a los pobladores”, aseguró el mandatario.

La Secretaría de la Defensa, en su radiografía sobre amenazas a la seguridad nacional y grupo delictivos, señala que el “huachicol” se ha convertido en uno de los delitos federales de mayor impacto en México, y que el mayor número de tomas clandestinas de concentra en tres entidades en el centro del país que colindan entre sí:  Hidalgo, Puebla y Estado de México.

Cuautepec de Hinojosa, donde ocurrió el último enfrentamiento, pero han sido asesinados agentes federales y locales, es punto geográfico con mayor incidencia en este delito.

Durante 2022, Hidalgo cerró con 4 mil 935 tomas clandestinas de grupos de huachicoleros a los ductos de Petróleos Mexicanos y refrendó, por quinto año consecutivo, el primer lugar nacional como el estado más ordeñado del país. De acuerdo con datos de la Décimo Octava Zona Militar proporcionados por Pemex, a través de estas perforaciones a las válvulas se hurtaron 632 mil 912.92 barriles de combustible.

Cuautepec, ubicado en el Valle de Tulancingo, que linda con la sierra norte poblana, fue el municipio que más tomas registró en el año, no sólo en el estado, sino en todo el país, con mil 133. Por medio de éstas, los huachicoleros sustrajeron 90 mil 154 barriles de combustible.