TOLUCA, Edomex. (apro).- Un séptimo presunto implicado en la muerte de Iñigo Arenas fue detenido. Se trata de Manuel Alejandro “N”, quien se desempeñaba como mesero del bar “Black Royce” de Naucalpan y atendió al empresario desde su arribo al local, poco después de las 3:00 horas del 6 de agosto pasado.

Las entrevistas en sede ministerial y evidencias recabadas hasta el momento llevaron a la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) a establecer que Manuel Alejandro “N” persuadió, en conjunto con los seis empleados previamente detenidos, a la víctima de seguir ingiriendo bebidas de contenido alcohólico, a pesar del horario y de que ya se encontraba en evidente estado de ebriedad.

A las 04:59 horas de ese domingo, junto con Eduardo “N”, capitán de meseros, y las cuatro mujeres detenidas, convenció a Arenas Saiz de trasladarse al área identificada como “VIP” que se encuentra en la planta alta del establecimiento, lugar donde finalmente habría perdido la vida.

La relatoría de la dependencia refiere que tras su deceso el empresario fue trasladado y colocado en diverso sitio de la planta baja del inmueble, “sin que exista evidencia de que los imputados hubieran alertado de manera oportuna a los servicios de emergencia para su atención”.

Manuel Alejandro “N” fue aprehendido el 17 de agosto en la colonia El Corralito de Naucalpan, mediante una acción operativa realizada por agentes de la Policía de Investigación.

Con esta detención ya son siete las personas investigadas por su presunta intervención en el homicidio del hombre de 41 años de edad, además de Aritzi Abril “N”, Ana Karen “N”, Cecilia “N”, Ana Karen “N N”, Eduardo “N” y Carlos Daniel “N”, actualmente vinculados a proceso.

La dependencia confía en que contar con la totalidad de las órdenes de aprehensión otorgadas, permitirá a la autoridad judicial establecer el “modus operandi” que el Ministerio Público (MP) plantea como teoría fáctica.