CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) afirmó que Mario Aburto Martínez, sentenciado a 42 años de prisión por asesinar al candidato presidencial del PRI, Luis Donaldo Colosio, se encuentra “en buen estado de salud” y en comunicación con su familia.

El un pronunciamiento, el organismo informó que el lunes 25 de octubre personal del organismo se presentó en las instalaciones del Centro Federal de Readaptación Social No 12 CPS Guanajuato, para notificarle que fue emitida la recomendación por violaciones graves 48VG/2021, relacionada con su caso, dirigida a la Fiscalía General de la República y al Órgano Administrativo Desconcentrado de Prevención y Readaptación Social (OADPRS) por actos de tortura en su contra.

El organismo indicó que en el encuentro, sus visitadores constataron que Aburto “se encuentra en buen estado de salud” y que la víctimas les refirió que “tiene comunicación con su familia, precisando que justamente ese día realizaría una llamada telefónica con su hermano, y que ellos no lo visitan debido a la lejanía del lugar en donde radican”.

Aburto reiteró su petición de ser traslado a un penal estatal de Tijuana, y que “se encuentra analizando junto con su abogado de oficio la posibilidad de promover los medios de defensa para impugnar la sentencia condenatoria que se le impuso”, de acuerdo al comunicado.

La CNDH refiere que, Aburto quedó conforme con la recomendación, que lo considera como víctima de tortura, al igual que a sus familiares, y que requiere a la FGR a reabrir las investigaciones sobre el homicidio de Luis Donaldo Colosio, así como la denuncia presentada en 1994 en esa instancia por Aburto en contra de sus aprehensores por tortura.

El organismo afirmó que Aburto reconoció la labor del organismo que “esta ocasión se le haya brindado la atención adecuada a su queja”, que consideró también los agravios cometidos en contra de su familia, “y que con ello siente que se está avanzando para dar a conocer al pueblo de México la verdad de los hechos y poder limpiar su nombre y el de su familia, criminalizados y perseguidos por 27 años”.

Al señalar que está en espera de la respuesta de las autoridades recomendadas, el organismo calificó como el “principal agraviado” del asesinato de Colosio fue “el pueblo mexicano”, no sólo por la muerte del candidato sino por “la consecuente investigación desde hace años cuestionada pero hoy plenamente acreditadas sus omisiones, fallas, ocultamientos y acciones deliberadas”.

La CNDH llamó a los medios de comunicación, “abordar el caso con la responsabilidad que merece”, en el que se acreditó la calidad de víctimas de Aburto y su familia, “evitando la difusión de informaciones alarmistas o tendenciosas, sin verificación alguna, que además pueden poner en peligro la integridad de todos ellos”, situación que podría ameritar medidas de protección adicionales.