CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Dalila Aldana Aranda, investigadora del Departamento de Recursos del Mar, del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav), fue condecorada con la Orden de la Legión de Honor que otorga la República de Francia.

Esta presea, que se entrega a quien tiene méritos extraordinarios en los ámbitos civil o militar, la han recibido el Premio Nobel de Química 1995, el mexicano Mario Molina (1943-2020); el escritor argentino Adolfo Bioy Casares (1914-1999); el exprimer ministro de Reino Unido, Winston Churchill (1874-1965); el empresario estadunidense Walt Disney (1901-1966), y el novelista y dramaturgo francés Alejandro Dumas (1802-1870), entre otros. 
    
El nombramiento fue emitido por decreto por el presidente de Francia, Emmanuel Macron, y se le entregó a Aldana Aranda a través de una carta firmada por el embajador de ese país en México, Jean-Pierre Asvazadourian, el 2 de diciembre pasado.

La República Francesa reconoció a la investigadora con la condecoración en grado de Caballero “por su compromiso en la lucha contra el cambio climático y a favor de la protección de los mares y su biodiversidad, en particular del Mar Caribe, que Francia y México tienen en común”, indicó en un comunicado el Cinvestav, del Instituto Politécnico Nacional.

¿Qué hizo la premiada?

Aldana Aranda, científica de la Unidad Mérida, fue premiada por sus estudios de biodiversidad en el mar Caribe, que alberga el Sistema Arrecifal Mesoamericano, la segunda barrera de este tipo más grande del mundo; investigaciones sobre el cambio climático, y la presencia de microplásticos en la fauna marina.
    
Ella participó en estudios sobre los efectos del cambio climático en la abundancia de larvas del caracol rosado, presente en las aguas de 37 países del Caribe, así como en el proceso de calcificación de su concha, junto con otros investigadores mexicanos, centroamericanos y franceses.
    
Para Aldana Aranda, esta distinción es un honor y representa un impulso para seguir generando conocimiento que se traduzca en el uso sostenible de la diversidad del Mar Caribe, que es fuente de alimento y economía para los habitantes de la región.
    
La investigadora de la Unidad Mérida también colabora con la Academia Mexicana de Ciencias, El Colegio de la Frontera Sur, el Centro de Investigación Científica de Yucatán, el Museo de Ciencias de Ensenada, el Planetario de Cancún, la Universidad Nacional Autónoma de México y el Cinvestav.
    
“La actividad de comunicar la ciencia a la población que requiere creatividad, una mente estructurada y saber contar historias, contribuye a que el trabajo de los investigadores sea visto como la base de la solución a los problemas que enfrenta la sociedad”, indicó.