Teatro

“Matteo Ricchi”, las aventuras de un jesuita

Las aventuras del renacentista Matteo Ricchi y otros jesuitas, que son el cuerpo del espectáculo, se realizan con gran cantidad de recursos escénicos sorprendentes y complejos que Luis de Tavira desarrolló en sus búsquedas escénicas, filosóficas y existenciales, conformando un estilo propio.
martes, 6 de febrero de 2024 · 19:09

CIUDAD DE MÉXICO (apro).-  La obra “Matteo Ricchi” nos sumerge en un universo escénico espectacular y delicioso que reflexiona, muestra y divierte. Son las aventuras del jesuita italiano Matteo Ricchi (1552-1610), quien viaja a China para fundar una misión y enfrenta múltiples obstáculos que lo fortalecen y lo sumergen en el conocimiento universal del ser humano donde la ciencia es el principal punto de encuentro y entrada a otra cultura y a otra visión de la realidad.

En “Matteo Ricchi” se trasciende la idea evangelizadora de los jesuitas y se convierte en un reto para conocer a otros y aprender de ellos, teniendo como obstáculo inicial el idioma. El espectáculo es dirigido por Luis de Tavira y Jorge Vargas, la dramaturgia de José Ramón Enríquez, José María de Tavira y los directores de escena; y la multimedia, escenografía e iluminación de Philippe Amand.

Con máscaras, títeres, música, canto, proyecciones y danzas, emprendemos la travesía de este jesuita desde su formación en la astronomía, las matemáticas y la cartografía, hasta su muerte en China. La propuesta convierte el escenario en un espacio de creación y magia.

Las correrías de Matteo Ricchi y un grupo de jesuitas que viajan y se instalan en China en el siglo XVII van aparejadas a un acontecimiento brutal sucedido en 2022 en Cerocahui, Chihuahua, donde los jesuitas Joaquín Mora y Javier Campos, y un guía de turistas son asesinados al interior de la iglesia. Su anhelo de adentrarse y convivir con la comunidad rarámuri es un espejo del anhelo de integrarse, comprender y ser parte de los pueblos donde sus antecesores habitaron en China.

Escénicamente el presente es visto atinadamente a través del teatro documental que practica Jorge Vargas. Así conocemos los detalles de la investigación sobre este asesinato del crimen organizado. Los planos de realidad se desdoblan y los actores se convierten en investigadores y testigos de cómo sucedió aquel crimen y dónde se encontraron los cuerpos. Se indignan y siguen los hilos de los acontecimientos.

Las aventuras del renacentista Matteo Ricchi y otros jesuitas, que son el cuerpo del espectáculo, se realizan con gran cantidad de recursos escénicos sorprendentes y complejos que Luis de Tavira ha ido desarrollando a lo largo de sus búsquedas escénicas, filosóficas y existenciales, conformando un estilo propio.

Utiliza en este pasado una actuación expresionista, con máscaras, autómatas y guiñoles diseñados por José Pineda; con danzas orientales, como el Kathakali hindú y la ópera china Kunqu; con música y efectos de sonido en vivo ejecutados por Jesús Cuevas y una musicalización y diseño sonoro poliédrico de Joaquín López Chapman, Jesús Cuevas y Pedro de Tavira. Una composición coral de Juan Pablo Villa, donde la sonoridad del chino se asemeja al canto cardenche purépecha, y un vestuario texturizado y colorido de Jerildy Bosch y Carlo Demichelis.

Este poderoso dispositivo escénico, con variadas perspectivas de dirección y diseño escenográfico, es sustentado por los 11 actores, que son el alma del espectáculo, quienes hacen múltiples personajes con una actuación de primera, polifacética y sentida. Hablan chino, cantan, bailan e interpretan distintos personajes. Patricia Yáñez, Esther Orozco, Valentina Manzini, Adrián Aguirre, Héctor Holten y Andrés Weiss, entre otros.

“Matteo Ricchi”, la última obra de la trilogía sobre jesuitas viajeros y visionarios. La anteceden “La expulsión”, sobre Francisco Clavijero, y “El corazón de la materia”, acerca de Teilhard de Chardin. La trilogía ha sido producida por Enrique González Torres y la encabeza Luis de Tavira.

“Matteo Ricchi”, que se presenta en el teatro Julio Castillo, es una historia de aventuras en diferentes tiempos para adentrarnos en la búsqueda incansable del conocimiento, la espiritualidad y el encuentro humano.

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