CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El rock pop de Maná hizo vibrar al Palacio de los Deportes en emotivo cierre de su gira “México Lindo y Querido Tour”, reuniendo 18 mil 600 seguidores unidos en comunión con la agrupación tapatía.

La velada de este viernes fue un recorrido por los éxitos musicales del ensamble integrado por el vocalista Fher Olvera, el bajista Juan Calleros, el baterista “Álex” González y el guitarrista Sergio Vallín.

“Manda una señal” y “De pies a cabeza”, edificaron el arranque de la banda fundada hacia 1986 en Guadalajara, Jalisco. Con los ánimos encendidos, así saludó Fher a su gente:

“¡Muy buenas noches Ciudad de México! Nosotros estamos más que contentos, más que felices los Manás aquí esta noche después de estar en muchos países, de arriba a abajo, de norte a sur, de este a oeste, del otro lado del Atlántico, en todos lados, hoy esta noche cerramos el tour ‘México Lindo y Querido’. ¡Después de 100 conciertos esta noche terminamos con toda la carne en el asador!”.

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— Proceso Cultura (@ProcesoCultura) December 7, 2024

El pletórico Domo de Cobre tembló en aplausos y griteríos ensordecedores. En un ambiente de buena vibra de principio a fin, el show congregó especialmente a una fanaticada coetánea a la agrupación, sin faltar seguidores de nueva oleada generacional, así como familias acompañadas de sus pequeños hijos.

La producción destacó por una pantalla gigantesca a telón de fondo, ilustrando cada rola en coloridas proyecciones conceptuales al estilo de Maná. Las luminarias generaron atmósferas festivas dando ritmo a “Corazón espinado”, tema original del legendario guitarrista jalisciense Carlos Santana en colaboración con los Maná.

La plasma al centro del tablado trazaba el mensaje “No a la violencia contra la mujer”, al tiempo de escucharse la rola “Ángel de amor”. Aplaudía el público apasionado y en constantes diálogos el líder expresó:

“¡Se me hace que se están llevando la noche en todo el tour mexicano! ¡El Palacio es el Palacio y la raza es la raza aquí!”.

El repertorio afinó “Labios compartidos” y “Cuando los ángeles lloran”, sobrevolando una enorme tortuga en escena. El artista de 64 años agradeció contar con fans jóvenes, y como lo ha declarado en distintas ocasiones, arremetió contra el estilo musical reguetón, haciendo alusión al cantante puertorriqueño Bad Bunny:

“Veo gente muy joven que sigue cantando y sigue viniendo a nuestros conciertos, para nosotros es un gran honor y una sorpresa, que las nuevas generaciones nos busquen tanto. Lo voy a decir con todas las palabras, con todos los acentos y comas. ¡Qué chingón que no solamente exista el reguetón! Chido, pero ya estuvo de ‘Bugs Bunny’ (Bad Bunny). Está chingón que haya de todo, pero qué chingón que todavía podamos escuchar y podamos hacer nuestra chamaba los Manás”.

Prosiguió “Vivir sin aire” y se brindó “Mariposa traicionera”. En tributo a Juan Gabriel (1950-2016) se dio nota a “Se me olvidó otra vez”. Incluyeron “Cómo Diablos”, “Oye mi amor” y “Get Up, Stand Up”, canción escrita por Bob Marley (1945-1981) y Peter Tosh (1944-1987), adicionando poderoso solo de batería a manos de “Álex”.

El cuarteto sorprendió emergiendo en un escenario alterno al centro de la plancha, entonando en sesión acústica “Te solté la rienda” en honor a José Alfredo Jiménez (1926-1973), siguiendo “Te lloré un río” y “El reloj cucú”, este último corte dedicándolo a quienes han perdido un ser querido “a todas las personas que se nos han ido al cielo, a las estrellas”. En ese espacio de halos bohemios tocaron “Bendita tu luz”, “Hechicera”, “Huele a tristeza”, “No ha parado de llover” y “Eres mi religión”, convidando a subir a una afortunada fan a la tarima.

Retornaron al escenario principal son su rock pop. Tomó voz el baterista “Álex” para “Me vale” y aprovechó discurso contra quienes critican en las redes sociales, pero a su vez enalteció a la “gente auténtica y verdadera”.

Continuó en los cantos Olvera, navegando hacia el ocaso “En el muelle de San Blas” y “Clavado en un bar”. Observándose al cantor cobijado en la bandera de México, dijo:

“A todos los lados que vamos decimos orgullosos que somos mexicanos. A los mexicanos nos quieren mucho en todo el mundo, nos quieren porque saben que somos gente cariñosa de corazón, somos gente que va para adelante, chingones. Estamos orgullosos de ser mexicanos”.

Un manto de lucecillas de celulares iluminó la clásica “Rayando el sol”. Un conmovido Fher enunció, “es una luz de esperanza para esta ciudad, para la gran de Ciudad de México. Aquí vamos a mandarle un rayo de luz a todo el país, de norte a sur, de este a oeste. Un concierto muy emotivo ha sido este, un concierto inolvidable para nosotros, que llevamos en el corazón. ¡Gracias por toda la luz y el amor!”

Flotaban papelillos multicolores y gigantescos globos blancos, en tanto Fher Olvera, Juan Calleros, “Álex” González y Sergio Vallín, se unieron acompañados de sus músicos rindiendo gratitudes. Las multitudes agasajaron a los Maná en estruendosos aplausos de satisfacción.