Café Tacvba
Café Tacvba, fiestón de 35 años con invitados especiales y consignas (Video)
La banda reunió a 65 mil almas cantando sus históricas rolas, incluyendo consignas contra la guerra en Palestina, pronunciándose en pro de los animales, el planeta, y sorprendiendo con los invitados especiales Gustavo Santaolalla y Álvaro Henríquez.CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Tremenda fiesta por sus 35 años de trayectoria musical celebró Café Tacvba en el Estadio GNP.
La banda reunió a 65 mil almas cantando sus históricas rolas, incluyendo consignas contra la guerra en Palestina, pronunciándose en pro de los animales, el planeta tierra, a su vez de sorprender con los invitados especiales Gustavo Santaolalla y Álvaro Henríquez.
Las casi tres horas de pachanga hicieron temblar incesantemente al inmueble de Iztacalco, sintiéndose desde los primeros pasos de Enrique y Joselo Rangel, Rubén Albarrán y Emmanuel del Real “Meme”. Coloridos bailes folclóricos diseñaron la apertura para sobrevolar un remolino de emociones a los acordes de “María”, “Las batallas” y “Rarotonga”.
Visiblemente contento, Albarrán saludó a su gente:
“¡Muchachas, muchachos! ¿Cómo están todos ustedes? ¡Qué inmensa alegría, esta noche para nosotros es algo muy significativo, 35 años de estar tocando! Mientras estamos tocando se vienen las imágenes, los recuerdos, los pensamientos y las reflexiones. Jamás pensamos que íbamos a tocar aquí frente a tantas personas, durante tanto tiempo. Por todo esto estamos tan agradecidos. Nos sentimos muy agradecidos muchachos”.
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— Proceso Cultura (@ProcesoCultura) December 6, 2024
Marejadas de aplausos y griteríos cobijaron al cuarteto surgido hacia 1989, siendo oriundos de Ciudad Satélite, en el Estado de México. La reunión de aniversario congregó a generaciones diversas, desde los fieles coetáneos, hasta familias con sus pequeños hijos y oleadas adolescentes. Todos corearon el extenso repertorio incluyendo “Cómo te extraño mi amor”, “El metro” y “El ciclón”.
A nivel producción el espectáculo fue destacable por sus luminarias, trazando lienzos multicolores surcando el horizonte del inmueble en localidades agotadas. Una pantalla colosal proyectó el viaje conceptual de la banda, incluyendo plasmas laterales, dando visibilidad a los tacvbos en acción. Se integró una pasarela para los afortunados al frente estando cercanos a sus artistas.
Un ambiente de buena vibra imperó en el espectáculo sumando en el set “53100” y “Esta vez”. Siempre de buen humor, el sonriente vocalista exclamó:
“¡Abran los brazos y suéltense! ¡De Satélite para el mundo!”
Resonó “Aprovéchate”, emergiendo una banda oaxaqueña aderezando “La muerte chiquita”. Sorprendió el primer invitado especial, el célebre compositor y productor argentino Gustavo Santaolalla rasgando el ukelele para “Olita del altamar” y “Futuro”.
Un ensamble orquestal en chelos y violines ataviaron en estilística unplugged “El aparato” y “Mediodía”, este último corte con la participación de un organillero. Se voló hacia “El espacio”, dando avance “La locomotora” y “Volver a comenzar” en un océano cósmico de lucecillas de celular.
A Rubén Albarrán se le observó en constantes cambios de vestuarios a lo largo del festín, en un robusto ramillete sonoro considerando “Las flores” y honrando a Jaime López con la memorable “Chilanga banda”. Retumbó el zapateado en “El fin de la infancia”. Enalteciendo la música chilena convidaron al líder de la agrupación de Los Tres, Álvaro Henríquez, dando nota a emotiva “Déjate caer”.
La celebración se fue volando en el tiempo sin faltar “La chica banda”, “El puñal y el corazón”, “No controles”, “¿Qué pasará?” y “La pinta”. Círculos de alegre slam en la plancha detonó “Pinche Juan” y “El borrego”. Previo a “La ingrata” el buen Rubén explicó el sentido original del tema:
“Tenía mucho tiempo que no la tocábamos. Decirles muchachos que la dejamos de tocar para provocar el diálogo, para decir que la violencia nunca es la solución. A ser conscientes que es una canción lúdica, es para pasarla bien, no para perpetuar fuertes deseos y acciones. Desando así que la diversión, del baile y la música nos de fuerzas para comprender al otro, para tener entendimiento sobre sus formas y respetarlo.”
El ocaso se dibujaba guiando “Encantamiento inútil”. Los corazones románticos latían vía la clásica “Eres”, enrolando “Quiero ver”. Previamente a despedirse rindió consigna especial el líder portando una bandera de Palestina:
“Con esta última canción los queremos invitar a que mandemos un buen pensamiento para todas aquellas personas que están sufriendo alguna enfermedad, que están sufriendo algo físico, algo mental, algo emocional. También a las personas que están sufriendo los horrores de la guerra, a todos los niños en Palestina, Líbano, en todas partes, en el Congo, donde haya conflictos. A todas las personas que tienen que salir de su tierra por miedo, porque sufren persecución. La energía que se genera esta noche la podemos enviar a todas esas personas que lo estén necesitando. También para nuestros hermanos los animalitos, que sufren nuestra convivencia, nuestra persecución. Para todos aquellos que estén sufriendo. Bailemos, porque al planeta le gusta que bailemos, se siente contento.”
El inexorablemente adiós enroló “El baile y el salón”. En reverencias gratitudes a los filos del escenario se encaminó Enrique, Joselo, Rubén y “Meme”. El fervor generalizado delineó una velada cumpleañera inolvidable para seguidores y los Café Tacvba.