Cine
Ovación de pie: “Perdidos en la noche”, de Amat Escalante
La proyección del thriller social de 120 minutos, ocurrida en la Riviera francesa el pasado 18 de mayo en la Sala Debussy, fue ovacionada de pie durante ocho minutos, con enorme acogida por la crítica internacional.Así resume a su personaje el actor principal de la cinta, Juan Daniel García: “Mi personaje busca justicia. Se me hizo interesante que no se va a rendir nunca. Es una persona muy fuerte a pesar de que desaparecieron a su mamá”. El filme participa por invitación en la nueva sección de la fiesta cinematográfica del país galo, Première. A su vez, el director aborda la minería en su estado natal, Guanajuato, donde los extranjeros “vienen a sacar cosas de la tierra mexicana”. Igual trata la fama y el poder, temas que se mezclan con la injusticia y la desaparición forzada. También hablan aquí otros dos actores, Bárbara Mori y Fernando Bonilla.
CIUDAD DE MÉXICO (Proceso).- El cineasta mexicano Amat Escalante presentó mundialmente su nueva película de ficción Perdidos en la noche (México/Alemania/Holanda/ Dinamarca, 2023) en la nueva sección Première. del 76 Festival de Cine de Cannes.
La proyección del thriller social de 120 minutos, ocurrida en la Riviera francesa el pasado 18 de mayo en la Sala Debussy, fue ovacionada de pie durante ocho minutos, con enorme acogida por la crítica internacional (https://www.youtube.com/watch?v=hFR6DcfVMxE). Por zoom, el realizador cuenta a Proceso desde el país galo:
“Tenía muchas ganas de volver a Cannes. Este espacio fílmico es un escaparate muy importante para que se estrenara la película. Era significativo para mí. El hecho de que aquí vieran Perdidos en la noche y crean en lo que estoy haciendo, además de que ellos también apostaron, es extraordinario.
“Première es una sección oficial fuera de competencia, integrada en total por siete filmes de directores con trayectoria. Me dio mucho gusto que me considerarán en esta sección. No fue decisión mía, sino del festival. Y yo feliz por haber sido parte de esto y representar a México en el encuentro fílmico más glamoroso, más prestigioso, del momento”.
Tranquilo, resalta:
“Fue muy particular vivirlo y estar aquí. El recibimiento del público fue muy gratificante y poderoso al final de la película. ¡Fue una muy buena recepción! Compartir eso con los actores que no habían visto la película, estuvo divino. La celebración de la película fue especial y muy importante para nosotros como equipo, pero también para el largometraje, y me gustaría pensar que para México igual, estando aquí como la única película mexicana este año. ¡Estoy feliz!”.
Las otras cintas que integraron la sección Première fueron Bonnard Pierre y Marthe (Francia, 2023) de Martín Provost, Cerrar los ojos (España/Argentina, 2023) de Víctor Erice, Eureka (Francia/Alemania/Portugal/México/Argentina) de Lisandro Alonso, Kubi (Japón, 2023) de Takeshi Kitano, Apenas el dos de nosotros (Francia, 2023) de Valérie Donzelli y Llegó el amor (Francia/Bélgica, 2023) de Katell Quillevere.
La trama de Perdidos en la noche se centra en Emiliano, quien vive en un pequeño pueblo minero en México. Motivado por un profundo sentido de la justicia, busca a los responsables de la desaparición de su madre, Paloma Flores, activista que defendía empleos locales contra una empresa minera internacional. Al no recibir ayuda de la policía ni del sistema judicial, encuentra una pista que lo lleva a la acaudalada familia Aldama, donde conoce a un famoso artista, a su célebre esposa y a su hermosa hija. No pasa mucho tiempo antes de que tenga un trabajo en la casa de esa familia y se determine a descubrir los secretos debajo de la superficie.
Los actores son Juan Daniel García Treviño, Bárbara Mori, Fernando Bonilla, Ester Expósito, Jero Medina, Vicky Araico y Mayra Hermosillo, en orden de importancia.
Escalante (Barcelona, 1979), quien escribió el guion junto con su hermano Martín, cuenta que después de la película La región salvaje (2016) empezó a leer a Fiódor Dostoyevsky y en la pandemia desarrolló con su hermano Perdidos en la noche:
“Vivo en Guanajuato y siempre he retratado mi entorno. Lo que pasa ahí. Me inspiro en las situaciones que aquejan a México. Y me interesan varios temas que se mezclan, como la injusticia y la desaparición forzada, problemáticas muy presentes y recurrentes en Guanajuato, más últimamente, desde que hice Heli (2013) hace diez años (cinta estrenada en Cannes donde ganó Mejor Director). Fue inevitable hablar de esos temas. Me interesaba retratar y cuestionar la inspiración artística qué viene de la tragedia de alguien”.
Al momento, enfatiza:
“Yo cuento historias y México es un país con mucho contraste y existe mucha violencia de todo tipo, incluso violencia invisible. Hay racismo y división, y es importante reflejar eso, y a la vez quise también cuestionar. Abordo la minería porque Guanajuato es un pueblo minero y por supuesto muestro la minería moderna, esta forma de los extranjeros que vienen a sacar cosas de la tierra mexicana, cosas muy valiosas a las cuales tal vez en México no es tan fácil acceder por cuestiones de recursos.
“Igual trato la fama y el poder. La fama en mi película está reflejada por el poder, que todos tenemos muy presente por las redes sociales en nuestro día a día, otra parte invisible, y estamos tan acostumbrados a ella que no se cuestiona”.
Escalante también rodó Los bastardos (2008).
Los actores, complacidos
Igual por zoom, Juan Daniel García (México, 2000), quien interpreta a Emiliano, expresa:
“Mi personaje busca justicia. Se me hizo interesante que no se va a rendir nunca. Es una persona muy fuerte a pasar de que desaparecieron a su mamá. Me tocó investigar, indagar bastante sobre esas historias reales, para completar a Emiliano. Gracias a Dios no tengo cercanía con la desaparición forzada, pero vengo de lugares donde esto es el pan de cada día.
“El personaje me llevó a tomar esa situación de manera personal. Es doloroso ver que nunca hay una respuesta a esas personas que buscan a sus familiares ausentes. No existe un final a feliz y eso me dolió mucho”.
García se dio a conocer con Ya no estoy aquí (2019), de Fernando Frías.
En tanto, Bárbara Mori (Uruguay, 1978), por el mismo medio digital, acentúa que Perdidos en la noche es “una película muy ambiciosa, muy valiente, por abordar problemáticas sociales que venimos arrastrando en nuestro sistema desde hace mucho tiempo”. Especifica:
“Hay tópicos dolorosos, como la desaparición de las mujeres. La cinta retrata también la injusticia social de clase que padecemos. La enfermedad del éxito y la fama, que dictaminan la sociedad. Amat resalta muchos tópicos y me parece que todos están conectados. Este largometraje posee una mirada distinta al Amat que conocemos. Es un filme que también propone preguntas y reflexiones muy necesarios para estos tiempos”.
Para Fernando Bonilla (México), Perdidos en la noche habla “fundamentalmente del capitalismo”. Y anexa:
“Estamos acostumbrados a ver muchas historias sobre la violencia en México, lo cual es lógico porque el cine muestra lo que sucede en una sociedad, y es el gran problema de este país. Amat en pocos minutos cuenta la historia de un grupo de activistas-ecologistas que están luchando para que no se instale una mina a cielo abierto de una empresa canadiense, y a estos activistas los desaparece la policía. Y dentro de todo este gran caleidoscopio de pronto aparece la familia Aldama, conformada por Carmen Aldama, (protagonizada por Bárbara Mori), una actriz de televisión y cantante de pop, y su hija Mónica, interpretada por Ester Expósito, quien es una influencer.
“Yo hago a Rigoberto, pareja de Carmen, un artista conceptual, muy famoso, muy exitoso, que aborda justamente temas políticos y sociales desde una estética muy cruda y muy escandalizante y muy confrontadora. Y como dice Bárbara, la cinta lanza muchas preguntas respecto a cuál es nuestro lugar. ¿Es ético utilizar el dolor ajeno para contar una historia, para crear una pieza y para ganar fama?”.
Entonces, Mori agrega:
“Vivimos en un país muy peligroso, pero soy de las personas que piensan que el cine, el arte, está ahí para expresar, reflexionar, cuestionar y tocarnos fibras. El largometraje está lleno de elementos de los cuales Amat siempre ha mostrado en relatos reales y crudos”.
A Mori el proyecto le cuestionó su forma de laborar desde cuando contaba con 18 años de edad:
“Ha sido un trabajo muy enriquecedor. Todos generamos vínculos fuertes. Ha sido hermoso y eso también transforma mucho el alma”.
Y así termina Bonilla:
“Ha sido un proceso invaluable. Ha valido muchísimo la pena. E igual, trabajar con gente maravillosa, fue un proceso que me llevó a pensar en mis limites actorales en cuanto a salirme de la metodología que había probado y comprobado en otros montajes. Exploré mi beta artística”.