Por  Marcelo Berenstein

Así como el año se renueva, también lo hacen nuestros objetivos y metas financieras, por lo que es momento de planificar cómo serán nuestros próximos movimientos con el fin de obtener los mejores rendimientos posibles. Para ello, y aprovechando el creciente boom de las inversiones en línea, hemos pensado una serie de recomendaciones que creemos que serán de gran ayuda a la hora de encarar este 2023.

Así como resulta imposible no realizar balances en el cierre de año, también es muy difícil no sentirse renovado y cargado de energía para encarar este nuevo comienzo en el calendario. Sin ir más lejos, muchos inversores aprovechan estas fechas para cambiar sus estrategias y realizar sus planes a largo plazo. Después de todo, el contexto económico lo amerita: las fluctuaciones en los valores de las divisas, la inflación o los números de crecimiento económico se encuentran alterando a los mercados.

Frente a ese panorama, los inversores se han sentido en la necesidad de explorar nuevos horizontes y, al mismo tiempo, correr nuevos riesgos. Las inversiones en línea han facilitado ese proceso, ya que han acercado a muchos mercados a un círculo mucho más amplio de operadores.

De cara a este 2023, el boom de las operaciones financieras online no solo se mantendrá en niveles altos, sino que se espera que se fortalezca aún más su tendencia de crecimiento. Es por ello que creemos oportuno brindar una serie de consejos y recomendaciones para encarar este nuevo año y obtener buenos resultados.

1) Seguir las nuevas corrientes: como hemos señalado, el panorama económico pospandemia –profundizado aún más con el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania- ha llevado a que sea necesario actualizar nuestros conocimientos y, en consecuencia, también nuestras estrategias financieras de cara a obtener mejores rendimientos.

Un claro ejemplo de ello es todo lo relacionado a lo que es trading, uno de los métodos de inversión más importantes dentro del mundo online. En él, los operadores se encargan de abrir y cerrar posiciones, que es lo mismo que decir vender y comprar de acuerdo al mercado, con el fin de obtener ganancias en los diferenciales.

Lo mismo ocurre con otros mercados en donde es posible realizar acciones como el copy trading, una de las ramas más interesantes del trading social: la posibilidad de seguir y aprender los movimientos de un trader con más experiencia para aprender de estrategias financieras y respuestas financieras.

2) Tener una estrategia definida: de la mano con lo anterior, debemos señalar que el mejor comienzo para todo un inversor es planificar cuál es la meta soñada. Esto nos permitirá tomar siempre las decisiones acordes a nuestro objetivo, lo que reduce los riesgos de dejarnos guiar por los sentimientos del momento y luego arrepentirnos.

Mientras más claras sean nuestras metas, las cuales se consiguen luego de conocernos a fondo como inversores y cómo ahorristas, más fácil serán tomas las demás decisiones. Un ejemplo muy claro: saber qué tipo de inversor somos en torno al riesgo sirve de guía para elegir entre los diversos mercados.

3) Diversificar: incluso las personas con menos experiencia en el mundo financiero saben que diversificar es una regla de oro que no se debe olvidar nunca. En este contexto de gran volatilidad, tener una cartera diversa nos ayudará a cubrirnos de diferentes riesgos que se puedan presentar.

Un caso práctico puede ayudar a entender mejor este punto: los inversores que solo contaban con criptomonedas en su cartera, han sufrido de gran manera los cambios de tendencias en ese mercado. En cambio, quienes diversificaron con otros activos como acciones, divisas y bonos, pudieron cubrir las pérdidas con otros rendimientos.

4) Revisar siempre los costos: por último, y acorde al boom de las finanzas en línea, es importante leer siempre la letra chica de las plataformas con las que decidamos operar. Cada movimiento suele tener un costo, que muchas veces es tan bajo que no lo consideramos.

Sin embargo, la sumatoria de esos montos puede terminar no solo afectando nuestras ganancias, sino que también ampliará nuestras pérdidas, generándonos dolores de cabeza inesperados. Tener siempre en cuenta los números finales nos ayudará a que nuestras metas sean más claras y más accesibles.