Beisbol
"Ella miente": el beisbolista Sergio Mitre sostiene que no hay pruebas de que cometió feminicidio
Acusado de la muerte de una menor de edad llamada Inés, el ex jugador de Yanquis, Marlines, Cachorros y Saraperos denuncia que hay una estrategia de la madre de la niña y de la Fiscalía de Coahuila para fabricar el caso en su contra e incriminarlo.CIUDAD DE MÉXICO (Proceso).- Expelotero de los Saraperos de Saltillo, Sergio Mitre asegura que es inocente y confía en que el tribunal que lo juzgará por feminicidio se dará cuenta de que no existen las pruebas que demuestren que él asesinó a la menor de edad de nombre Inés.
El jugador de 41 años se queja de que, ante la falta de evidencias, la Fiscalía General del Estado de Coahuila ha cometido una serie de irregularidades para incriminarlo, desde que fue detenido acusado de posesión de mariguana, mientras fabricaban un caso en su contra.
En entrevista con Proceso, el exjugador de los Yanquis de Nueva York, Marlines de Florida y Cachorros de Chicago dice que él no era pareja de Liliana, la madre de Inés, sino simplemente “un amigo” que la estaba ayudando a ella y a su hija con un lugar donde quedarse, porque el padre de la primera la corrió de su casa tras propinarle una golpiza.
Mitre, un mexicoestadunidense nacido en Los Ángeles, se dice decepcionado, aunque “no le guardo rencor”, porque en su juicio por filicidio Liliana declaró que ella y su hija fueron víctimas de violencia por parte del deportista y que fue él quien golpeó a Inés causándole la muerte.
–¿Por qué cree que ella lo responsabiliza de la muerte de Inés?
–Ella miente por lo obvio. Mientras el proceso ha ido desenvolviéndose, ella está mirando, incluyendo su abogada, que el peso de la ley estaba apuntando en su dirección. Ella quiere ser libre. Pienso que la estrategia que le sugirió la abogada era echarme la culpa de todos los hechos. Mis abogados tienen videos, con su papá y su mamá presentes, donde ella dice que yo fui una ayuda para ella y su hija, incluyendo el día de los hechos. Ella sostenía que yo era inocente.
–¿Usted diría que es mentira la versión de Liliana acerca de cómo murió su hija?
–Es mentira. Ella dice que yo soy culpable de la muerte de su hija. Hay otra cosa que está diciendo también: que supuestamente –y digo supuestamente porque no tengo pruebas de esto, ellos tampoco y ella tampoco– estaba embarazada; que la razón por la que yo la maltraba (a ella), no nada más a su hija, era porque yo quería que tuviera un aborto.
–¿Usted vio en algún momento que Liliana maltratara a su hija?
–Nunca miré a Liliana que maltratara a Inés, pero sí puedo decir que, en distintas ocasiones, miré a Inés con golpes, moretones o raspones, y le preguntaba qué le había sucedido y la respuesta de Liliana era muy simple: que se había golpeado jugando, o cosas por el estilo. Nunca vi que ella maltrató a Inés o la golpeara, pero eso era enfrente de mí. No estoy muy seguro de lo que pasaba cuando no estaba.
“No sé si pueda haber sido ella o cualquier otra persona. Lo que me comentan mis abogados que ahora ven a Liliana, porque ella está libre después de haber dicho que yo tengo la culpa, es que la han visto actuar como si nunca hubiera pasado nada. Entonces, da a pensar que no le importaba mucho su hija, que a lo mejor era una carga para ella. Ya pasaron varias cosas por mi mente, pero pues yo no puedo juzgarla.”
–¿Existe el ofrecimiento de Saraperos de que si supera este proceso legal, pueda volver a jugar con ellos?
–Me estoy tomando una cosa a la vez. No estoy seguro de qué vaya a pasar o si yo todavía decida jugar. Sí me gustaría terminar con el pie derecho y tener una o dos temporadas más. Estaba teniendo muy buenas temporadas en México. Pienso que sí, siendo absuelto de esto y que todo el mundo se dé cuenta de que esto es una injusticia.
–¿Cómo se imagina que puede ser su vida si queda en libertad? ¿Cree que puede volver al beisbol y que la gente lo va a ver bien, o quedará con una marca imborrable?
–Estamos con todo el derecho de regresar a nuestras vidas normales, después de que se pueda comprobar que yo no tuve nada que ver en esto.
–¿Tiene algún antecedente de violencia reciente contra alguna mujer o en su pasado, que podría señalarlo como un hombre que es violento con otros seres indefensos, como niños, animales…? ¿O descarta definitivamente ser violento?
–Ah, no, no. No soy violento. Todos tenemos carácter, todos a veces nos molestamos, pero de que me levante con la idea de que voy a lastimar a alguien, o que mi única solución es la violencia, no, no es así. Sí tuve un problema con mi expareja (Tonya) y pienso que también fue la estrategia de su abogada; estamos hablando de casi seis años atrás.
“Estábamos peleando la custodia de mis hijos y cosas monetarias que ella pedía. La manera más fácil de obtener esto era diciendo que yo era violento hacia ella y mis hijos. Pero pues no, no es cierto.
“Aquí en Saltillo, hace dos años, tuve un problema, se me acusaba de violencia, pero eso fue algo que no debió haberse salido de control. Estábamos celebrando que habíamos pasado a playoffs, salimos, tomamos un poco y la verdad a mí se me salió la situación de las manos y también a ella (Jazmín), y fue algo que, como figura pública, desafortunadamente se hizo mucho más grande de lo que tenía que haber sido.
“No pasé ni una semana aquí en el Cereso por eso. Fue algo que la gente entendió. Y esas fueron las únicas dos veces que yo pienso que se podría pensar que tuve un problema de este tipo.”
–¿Entonces, dice que existen mujeres que mienten, que, con tal de tener un beneficio económico o de alguna otra índole, acusan falsamente de violencia de género para ganar en los tribunales?
–Oh no, no necesariamente; estoy diciendo nada más, en mi caso, en mi propia experiencia, lo que pasó. Sí creo que ocho de cada 10 mujeres son violentadas en el mundo y hay pruebas de eso. También pienso que, a veces, nos ponen más atención a los hombres. Además, como figura pública es una cosa que se hace noticia.
–¿Por qué cree que hay muchos peloteros que, sin importar su nacionalidad, tienden a ser violentos contra las mujeres?
–No tiene que ver nada más con peloteros o en el deporte.
–¿Qué opina de que la Liga Mexicana de Beisbol contrate a jugadores que han sido violentos con las mujeres? Ya no los quieren en Grandes Ligas y vienen a jugar acá, como Danry Vásquez, Luke Heimlich; incluso, el manager Mickey Calloway, quien fue acusado de acoso sexual.
–Conozco a Luke personalmente, es un compañero de trabajo y también un amigo. A Danry Vásquez y Calloway no los conozco, pero creo que, igual que Luke, ellos están buscando una segunda oportunidad y se las está dando la Liga Mexicana.
“Los equipos los están contratando por darles una segunda oportunidad porque son buenos beisbolistas y tienen habilidades todavía para jugar, y pues (estoy) muy agradecido con la Liga Mexicana por darnos esta oportunidad a los peloteros o a los managers o coaches, por darnos la oportunidad de seguir haciendo lo que nos gusta.”
–¿Cómo debe ser una segunda oportunidad para un hombre sobre quien se ha comprobado que ha sido violento con las mujeres?
–Si se comprobó que el pelotero ha sido violento, si ha abusado de una mujer u otra persona, es más difícil porque tienes ese parche negro colgando sobre tu cabeza. Si ya pagaron su condena o ya pagaron por su delito y son libres, no veo por qué no se les pueda dar esa segunda oportunidad.
También creo que si hay personas, como en mi caso, que se nos está acusando de algo que no tenemos nada que ver y salimos absueltos, no tiene que ser complicado darnos trabajo otra vez. l