SCJN
Misión de juzgadores no puede estar contaminada por ambiciones personales: Ríos Farjat
Durante la entrega de la presea Ignacio L. Vallarta al mérito judicial a jueces y magistrados federales, la ministra Margarita Ríos Farjat afirmó que la justicia es uno de los pilares de la República y la paz social.CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Para la ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Margarita Ríos Farjat, la misión de los juzgadores no puede estar contaminada por ambiciones personales.
Durante la entrega de la presea Ignacio L. Vallarta al mérito judicial a jueces y magistrados federales, Ríos Farjat afirmó que la justicia es uno de los pilares de la República y la paz social.
“Jamás debemos olvidar que la misión conferida no puede ser contaminada con ambiciones personales, desviaciones ni trampa alguna porque nuestra función y nuestra vocación necesitan permanecer luminosas e intactas por lo que representan”, indicó.
Las declaraciones de la ministra surgen un día después de que Arturo Zaldívar presentó su renuncia para incorporarse al equipo de trabajo de la aspirante presidencial por Morena, Claudia Sheinbaum, con lo que reconoció abiertamente su filiación e interés político.
Fuentes federales confirmaron a Proceso que el ministro Zaldívar avisó a la Presidencia de la Corte que para evitar incurrir en conflictos de interés, dejará de asistir a las sesiones, aun cuando el Senado de la República no le ha aceptado la renuncia y su salida del Máximo Tribunal no es formalmente un hecho.
El anuncio de su adhesión al equipo de Sheinbaum podría derivar en la necesidad de que se excuse de votar en todos los asuntos que se discuten en el Pleno y la Primera Sala.
En el evento, en el que también estuvo presente Norma Piña, ministra presidenta, Ríos Farjat indicó que la luminosidad de la justicia inspira a la sociedad, la mantiene serena y esperanzada.
“A todas las personas nos inspira la justicia y a todas nos amarga y nos enoja su ausencia o su desviación”, apuntó.
Reconoció que la carrera judicial requiere, además de preparación y pericia técnica, claridad de visión y temple de carácter de quienes imparten justicia.