Autos de alta gama como la Crossover SUV Audi Q8, así como dos departamentos y dos casas residenciales conforman el patrimonio declarado por el diputado federal Marco Antonio Mendoza Bustamante, recién designado presidente del Comité Directivo Estatal (CDE) del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en Hidalgo, después de la dimisión de la dirigencia priista ocasionada tras la renuncia del exgobernador Omar Fayad Meneses.

De acuerdo con dos informes anuales de bienes e ingresos que entregó a la Cámara de Diputados, el ahora dirigente también posee terrenos que, aunque en un caso supera los 2 mil metros cuadrados, dijo, consiguió en menos de 70 mil pesos, además dice que su única remuneración es por su cargo público.

El legislador es dueño de una casa que en enero de 2016 recibió como donación. La propiedad tiene 140 m2 de construcción, sobre una superficie de 90 m2. El costo que reportó es de 2 millones de pesos.

Indicó que es dueño de tres terrenos, dos adquiridos de contado y otro recibido por cesión. Los valores incluidos, aseguró, son los que corresponden a las escrituras públicas: uno de 2 mil 535 m2 por el que, asentó, pagó 67 mil 500 pesos el 9 de marzo de 2015; otro de 285 m2, obtenido por dación el 28 de diciembre de 2013 y que valúa en 28 mil 569 pesos, y otro de 413 m2, pagado en una sola emisión en sólo 29 mil 500 pesos el 14 de octubre de 2017.

También reportó otra casa de la que, apuntó, se hizo a través de un crédito hipotecario en diciembre de 2014. El valor de la operación lo tasó en 917 mil 112 pesos, el cual realizó a través de la inmobiliaria Promotora de Viviendas Integrales.

En este caso, la superficie del terreno es de 142 metros cuadrados, sobre los que hay una construcción de 140 m2.

Un departamento de 60 m2, que tasa en 1 millón 500 mil pesos y que consiguió mediante un crédito en julio de 2018, también es parte de los inmuebles que posee el nuevo presidente del CDE priista.

Este último lo adquirió con la firma Residencial Mezquital, a la que 18 meses después, en noviembre de 2019, le compró, con otro crédito, un nuevo departamento, pero de 70 m2, al mismo precio, 1 millón y medio de pesos. En ninguno de los casos se establece el sitio en el que se ubican los bienes inmuebles.

En cuanto a vehículos, posee dos de gama alta: un deportivo Audi Q8, modelo 2019, por el que pagó 1 millón de pesos al contado en septiembre de aquel año, y una Suburban 2021, comprada también último modelo en junio de ese entonces, a crédito por 1 millón 551 mil 900 pesos.

En el último año que informó sobre su patrimonio, sus percepciones como legislador ascendieron a 994 mil 445 pesos.  

Mendoza Bustamante aseguró no tener otro ingreso, más que el de su posición en el Poder Legislativo, además de referir que antes de asumir la posición en el PRI Hidalgo fungía sin remuneración como secretario adjunto de la presidencia del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) priista.

Igualmente, cuenta con 50% de acciones en la Fundación Juan Viggiano, en la que, acotó, participa de manera honorífica.

El recién designado dirigente también mencionó su formación profesional que obtuvo en diciembre de 2017, cuyo título de licenciado en periodismo obtuvo a través del acuerdo 286 de la Secretaría de Educación Pública (SEP) y que culminó el programa de maestría en docencia basada en competencias por el colegio Anáhuac en noviembre de 2021.

La carrera de Mendoza Bustamante se ha desarrollado a la par de las posiciones públicas que ha ocupado su jefa política Carolina Viggiano Austria, secretaria general del PRI nacional.  Fue director de Comunicación y Cultura del Consejo Nacional de Fomento Educativo (Conafe) de diciembre de 2012 a enero de 2015, durante el periodo en que Viggiano estuvo al frente, en el sexenio de Enrique Peña Nieto.

Antes, cuando la hidalguense fue diputada federal de 2009 a 2012, fue asesor parlamentario. De igual manera, fue comisionado para la instrumentación del Sistema de Justicia Penal de Coahuila durante la gubernatura de Rubén Moreira.