PUEBLA, Pue., (apro).- Agentes Ministeriales de la Fiscalía General del Estado detuvieron esta noche a Francisco Romero Serrano, Auditor Superior de Puebla, quien ha denunciado ser un perseguido político del gobernador Miguel Barbosa Huerta. 

De acuerdo al Registro Nacional de Detenciones, Romero Serrano fue aprehendido a las 19:25 horas de este viernes en su domicilio de la calle Magnolia, en el fraccionamiento La Vista Country Club, en San Andrés Cholula. 

El aún auditor es acusado por el delito de violencia familiar en contra del hijo de su esposa, Joseline Zurita, aunque en la edición impresa de Proceso de esta semana, Romero Serrano aseguró que este proceso en su contra forma parte de una persecución emprendida por el gobierno de Barbosa Huerta, quien pretende sacarlo de la ASE de manera anticipada pues su período concluye hasta el 2026.

En esta campaña, estaría implicado el despacho del panista Roberto Gil Zuarth, pues uno de los empleados de éste, Fernando del Villar Treviño, fue identificado como operador de un boicot a las labores fiscalizadoras de la Auditoría, presuntamente para generar condiciones para la destitución de Romero Serrano.  

El 14 de febrero, el Congreso del Estado notificó la suspensión de Romero Serrano como titular de la Auditoría Superior del Estado debido a que un juez dictó como medida cautelar su separación del cargo luego de que fue acusado de maltratar al hijo de su esposa.

En la entrevista con Proceso, Joseline Zurita, esposa del auditor, denunció que policías ministeriales la persiguieron y acosaron para convencerla de que denunciara a su esposo y como no lo lograron, el caso se judicializó con las denuncias de policías municipales, mientras que el DIF del Estado se asumió como representante legal de su hijo, un niño de seis años diagnosticado con Asperger.    

Esto, aunque la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) había otorgado medidas cautelares a favor del auditor, de su esposa y del niño. Entre las medidas se había solicitado a la Fiscalía General de Puebla que se abstuviera de seguir por oficio la denuncia por violencia familiar contra Romero Serrano, ya que el niño estaba bajo la patria potestad de Zurita.    

 Según Romero Serrano contaba con dos amparos federales para impedir su detención.