Sandra Cuevas
Remodelación de la Plaza Giordano Bruno provoca nueva polémica entre Sheinbaum y Cuevas
Trabajadores del gobierno de la Ciudad de México quitaron los tapiales que, en días pasados, colocaron empleados de la alcaldía Cuauhtémoc alrededor de la plaza, donde hasta hace poco acampaban personas migrantes.CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Una nueva polémica surgió entre la jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum, y la alcaldesa de Cuauhtémoc, Sandra Cuevas, ahora por los trabajos de remodelación de la Plaza Giordano Bruno, en la colonia Juárez, donde hasta hace poco acampaban personas migrantes y que la tarde de este miércoles terminó rodeada de policías de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC).
Alrededor de las 13 horas, trabajadores del gobierno de la Ciudad de México llegaron a quitar los tapiales que, en días pasados, colocaron empleados de la alcaldía alrededor de la plaza. Con el argumento de que éstos agredieron físicamente a los primeros, llegaron decenas de uniformados con escudos y cascos protectores.
La Plaza Giordano Bruno se ubica a pocos metros de la sede de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) -en Versalles 49- y era usada por las personas migrantes, principalmente de Venezuela y Haití, que instalaron casas de campaña en espera de recibir documentos de dicho organismo para continuar su camino hacia Estados Unidos.
Una hora y media antes del retiro de los tapiales, Sheinbaum Pardo aseguró que ponerlos “no es legal, no tiene ningún permiso”. Y reiteró que esas acciones son un tema de “discriminación” de la alcaldía Cuauhtémoc.
Lo que se quiere, acusó en conferencia, “es como decir ‘no, no queremos ver a los migrantes’. Esa no es una solución, eso es que no se mezclen con nadie”.
Luego, recordó que su gobierno, en coordinación con la Comar y el Instituto Nacional de Migración, ofreció a las personas migrantes un albergue en la alcaldía Tláhuac –a más de 40 kilómetros de distancia de la Comisión-, además de la oferta de agilizar los trámites para que adquieran los documentos que los identifiquen como refugiados y puedan seguir su camino a Estados Unidos. “Esencialmente eso es lo que hay que hacer, esa es la visión; no tapar para no verlos”.
“De todos modos voy a remodelar”: Cuevas
Tras la acción de la policía y los trabajadores del gobierno de Sheinbaum, la alcaldesa Sandra Cuevas llegó al lugar y acusó que “de manera ilegal”, la mandataria local “envía granaderos a impedir que recuperemos y remodelemos la Plaza Giordano Bruno… violentando mis facultades constitucionales como alcaldesa de Cuauhtémoc”.
Agregó que eran “más de 100 granaderos” contra su gobierno, para que retiraran las vallas. Y adelantó que, pese a ello, las obras continuarán no solo en esa plaza, sino en otras “que están olvidadas” como Garibaldi.
“No nos interesa, no nos perjudica en nada que haya quitado esas vallas. La remodelación de todos modos la voy a hacer y vamos a beneficiar a los vecinos y a las vecinas de la colonia Juárez, así como del resto de nuestra demarcación para que puedan gozar de espacios públicos de buena calidad y de buen gusto”, dijo la alcaldesa de oposición.
Seduvi e Inbal, autorizados para remodelar
Cuatro horas después de los hechos, las secretarías de Gobierno (SecGob) y de Desarrollo Urbano y Vivienda (Seduvi) informaron que la Plaza Giordano Bruno es un bien público considerado patrimonio cultural de la CDMX y de la nación, ubicada en un Área de Conservación Patrimonial. Por ello, aclararon que “la autoridades facultadas para autorizar o no intervenciones en el sitio son exclusivamente de SEDUVI y del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL)”.
En una tarjeta informativa, añadieron que en días pasados, la alcaldía Cuauhtémoc presentó un proyecto a ambas instancias en el que se describían distintas acciones de modificación del sitio, pero aún estaba en análisis.
Agregaron que ayer informaron a Cuevas “sobre los diversos defectos técnicos del proyecto y que por ningún motivo podrían iniciarse obras, preparativos o instalaciones logísticas en la Plaza, ya que no contaban con las autorizaciones requeridas”.
Y recalcaron que, al omitir la información e instalar los tapiales se violaron las Leyes de Desarrollo Urbano y de Accesibilidad de la CDMX; así como la Ley Federal sobre Monumentos y Zonas Arqueológicos, Históricos y Artísticos. Por ello, se hizo el operativo para retirarlas y “garantizar, tanto la conservación del patrimonio cultural como el derecho al espacio público de vecinos y visitantes”.
Por último, argumentaron que durante el retiro de tapiales, trabajadores del gobierno “sufrieron agresiones físicas por parte de personal de la alcaldía Cuauhtémoc. Lo que requirió la intervención de personal de la SSC que acordonó el espacio”.