TUXTLA GUTIÉRREZ, Chis. (Proceso).- La crisis chiapaneca no termina, sólo se transforma, dice la gente en esta entidad. A pesar de que las encuestas prevén el triunfo del candidato de Morena, que retendrá con Eduardo Ramírez Aguilar la gubernatura que hoy está a cargo de Rutilio Escandón Cadenas, la violencia que vive Chiapas ha contaminado y tiene repercusiones en el proceso electoral actual y en el desgaste del partido y el gobierno de la 4T.

Por las condiciones de inseguridad que prevalecen en la entidad, y que se refleja en las renuncias de los candidatos por amenazas e inseguridad, por falta de funcionarios en casillas, los partidos PRI, PAN y PRD, que integran la coalición Fuerza y Corazón por Chiapas, pidieron al Instituto Nacional Electoral (INE) que atraiga la elección en las etapas de la jornada electoral de escrutinio y cómputo.

A sólo cuatro días de la jornada electoral, los partidos de la coalición consideran que el Instituto de Elecciones y Participación Ciudadana (IEPC) no ha abordado con la debida diligencia las acciones para mantener la paz y la seguridad dentro del proceso electoral.

En su denuncia, el PRI, PAN y PRD señalan que el órgano electoral estatal no acató el protocolo para prevenir factores de riesgos en los procesos electorales, aprobado por el INE.

El IEPC en Chiapas mantiene una presidencia interina desde hace más de un año; Magdalena Vila fue nombrada luego que el INE declarara desierto el proceso de selección del Organismo Público Local Electoral (OPLE).

En respuesta a la declaración de la coalición Fuerza y Corazón por Chiapas, el IEPC se declaró listo para llevar a cabo las elecciones en las que contenderán 14 mil 550 candidaturas por mil 582 cargos de elección popular, que son la gubernatura del estado, diputaciones locales y miembros de ayuntamientos.

Aseguró el IEPC que las boletas y el material electoral ya se encuentran en los Consejos Distritales y Municipales desde hace más de 10 días; respecto a las condiciones para la instalación de casillas y la designación de funcionarios evitaron pronunciarse: “Éste es un tema que, por ley, es de la competencia absoluta del Instituto Nacional Electoral”, indicó.

De los hechos violentos que se han registrado en torno a personas participantes en la contienda electoral, dijo que en reiteradas ocasiones ha llamado a las autoridades correspondientes para que ofrezcan garantías para el ejercicio de los derechos políticos, pero también ha llamado a las distintas fuerzas políticas “a privilegiar el interés común por la paz y la no violencia”.

Pero la violencia provocada por el crimen organizado en varias regiones de la entidad ha recibido diversos calificativos por parte de las organizaciones civiles que han recabado testimonios y documentado fenómenos e impactos como la desaparición de personas y el desplazamiento forzado de familias: es una “guerra silenciosa”, es un “conflicto no reconocido”, y también dicen que “es una guerra olvidada”. La propia Diócesis de San Cristóbal de las Casas señala que se trata de una “guerra sin fin”.

Renuncias

En este entorno, 515 candidatas y candidatos han renunciado a sus postulaciones, aunque sólo 29 de manera explícita han expuesto que la violencia es la causa.

En una declaración reciente, la candidata a la gubernatura de la coalición Fuerza y Corazón por Chiapas, Olga Luz Espinosa Morales, recordaba que, aunque las elecciones generales de 1994 se dieron en el contexto del levantamiento armado del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), y con el temor de una violencia generalizada, en realidad fueron unas elecciones pacíficas.

Treinta años después de la rebelión neozapatista, varias cosas en el estado se han transformado.

Evidentemente, los niveles de pobreza siguen siendo los más altos del país, señala el economista Gerardo Coutiño.

Cita, por ejemplo: “Chiapas fue rápidamente parte del proceso de alternancia política que experimentó el país, pero que no vino acompañado de un crecimiento económico. Los históricos cacicazgos chiapanecos ya no son económicos; son del orden político. Esos cacicazgos han aprovechado la posibilidad de reelección para sostenerse y la alternancia política para involucrar en la política a la familia”.

En los hechos, en Chiapas los grupos fácticos de las diversas regiones del estado se repartieron las candidaturas locales. Esto fue posible debido a que en el estado hay presencia de los siete partidos políticos nacionales, a los cuales se suman siete partidos locales.

Morena encabeza la coalición Sigamos Haciendo Historia, en la que es apoyado por el PVEM y el Partido del Trabajo, pero también por los partidos políticos locales: Partido Encuentro Solidario Chiapas (PES), Partido Chiapas Unido (PCHU), Podemos Mover a Chiapas, Redes Sociales Progresistas (RSP), Fuerza por México Chiapas y Partido Popular Chiapaneco.

Morena, el PT y el Verde sólo van en coalición para la Presidencia con Claudia Sheinbaum, para la gubernatura con Eduardo Ramírez y por la alcaldía de Tuxtla Gutiérrez con Ángel Torres Culebro; en el resto de los municipios van solos, pues creyeron que así evitarían la violencia política en los procesos por las alcaldías.

Sin embargo, las disputas se ubicaron a nivel municipal, ya que muchos presidentes municipales buscan la reelección, pero los grupos que le disputan el poder municipal se ubicaron en otro partido de la coalición.

En Tuxtla Gutiérrez, la lucha por la alcaldía entre el candidato de la alianza Sigamos Haciendo Historia, Ángel Torres --del grupo del exsecretario de Gobernación, Adán Augusto López-- y de la coalición Fuerza y Corazón por México, el panista Francisco Rojas Toledo, está generando expectativas entre los ciudadanos y va cerrada.

Violencia electoral

En cualquier caso, los cacicazgos políticos y la violencia provocada por la pugna en el estado entre organizaciones del crimen han tenido un trágico impacto ya en el proceso electoral 2024.

A pocos días de la jornada electoral, el Instituto de Elecciones y Participación Ciudadana (IEPC) informó que han renunciado 515 candidatos en el estado. En entrevista, la presidenta consejera María Magdalena Vila dijo que esas renuncias se deben a “diversas cuestiones, desde familiares, personales, de salud, que no tendríamos por qué cuestionar”. Declaró que, incluso, “algunas personas no sabían que estaban postuladas”.

Pero también precisó que las renuncias por motivos de inseguridad se incrementaron a 29: 12 de candidatos y 17 de candidatas.

Ha sido documentada la violencia contra los candidatos, incluso contra la candidata presidencial Claudia Sheinbaum en su gira por la sierra de Chiapas, a fines de abril, cuando fue interceptada por encapuchados en retenes, lo mismo que reporteros que la acompañaban en la cobertura de su visita.

A los pocos días de ese recorrido, en otro hecho, hombres encapuchados retuvieron a la presidenta concejal del municipio de Altamirano, María García López, quien días después grabaría videos diciendo que estaba bien, pero que hasta hace poco, después de comprometerse a la construcción de obras en una comunidad, fue liberada junto con su esposo y el resto de los integrantes del cabildo.

Después, el 28 de abril, se reportó el secuestro del candidato del PT a la alcaldía de Frontera Comalapa, Rey David Gutiérrez Vázquez, quien fue sacado de su domicilio por hombres armados, pero que también luego reapareció cuatro días después diciendo que continuaba en la lucha.

El 5 de mayo se reportó el primer atentado con consecuencias fatales. Fue contra Juan Gómez Morales, conocido como “Juan Changarro”, candidato por el partido local Chiapas Unido a la alcaldía del municipio de Benemérito de las Américas, ubicado en la Selva Lacandona, en los límites con Guatemala.

La Fiscalía General del Estado informó en un comunicado que se trató de un enfrentamiento en el que fallecieron el hijo del candidato y el quinto candidato a regidor.

En esa ocasión el presidente el partido, Conrado Cifuentes Astudillo, dijo que los hechos en Benemérito de las Américas no fueron aislados, sino que sus candidatas y candidatos habían sido amenazados para que se retiraran de la contienda.

Cifuentes Astudillo señaló el caso de los candidatos del municipio de El Porvenir, Ariel Díaz, y del municipio de Emiliano Zapata, Carlos Cesarín Ortega, a quienes sujetos los amenazaron y les pidieron que cerraran su casa de campaña. Una situación parecida enfrentó la candidata a la alcaldía por el municipio de Venustiano Carranza, Karen Carbajal, cuando llegaron hasta su domicilio para exigirle que se retirara de la contienda.

Todos dejaron de hacer campaña.

Cinco días después del atentado y de las declaraciones del presidente de Chiapas Unido, Conrado Cifuentes, en las redes sociales se informó que el candidato a la alcaldía de La Concordia por el partido Redes Sociales Progresistas, Emmanuel de Jesús Córdova García, que ya fue presidente municipal de ese lugar en 2015, hace campaña proselitista pero no presencial, sino utilizando una imagen suya tamaño natural que sus colaboradores exhiben en mítines y eventos que se llevan a cabo en ese municipio, que desde hace más de dos años está sumido en la disputa del territorio por miembros de organizaciones criminales.

Córdova García es hijo del actual alcalde de La Concordia por el PVEM, Miguel Ángel Córdova Ochoa (alias “El amigo Migue”). El 9 de junio de 2022, un grupo armado mató a dos guardaespaldas de Miguel Ángel, cuando fue a visitar a uno de sus hijos en una escuela primaria de Tuxtla Gutiérrez. Desde entonces despacha desde la ciudad capital.

Otro de los incidentes se registró en el municipio de Rayón. En pleno centro de la cabecera municipal fue atacado el candidato Domingo González, del partido Redes Sociales Progresistas, quien busca relevar en el cargo de presidente municipal a su hermano Guadalupe González Trejo. Domingo señaló a su contrincante, el candidato del partido Chiapas Unido, Luis Ángel Flores. Sin embargo, este último presentó un video en donde él es quien aparece lesionado y a su vez acusa a Domingo González del ataque.

El 16 de mayo, en La Concordia, Lucero López Maza, candidata del Partido Popular Chiapaneco a la alcaldía, de sólo 29 años, fue asesinada. En el ataque fallecieron también su hermana y otras tres personas más, y dos resultaron heridas.

Apenas el 31 de marzo, hombres armados irrumpieron en el rancho del padre de Lucero, Ataúlfo López Flores, ubicado en la colonia Nuevo Paraíso de La Concordia; le prendieron fuego a la propiedad y a varios vehículos que se encontraban en el lugar y asesinaron a varias personas. Las imágenes fueron difundidas por redes sociales.

Luego de ese ataque en La Concordia, Linda Higuera, candidata a la alcaldía de San Cristóbal de las Casas por el PVEM, denunció una agresión a una camioneta de su comitiva.

Ese fin de semana, el 19 de mayo, fue atacado a balazos, junto con su comitiva, el candidato de Morena en Villa Corzo, municipio de la región Frailesca, Robertony Orozco, quien busca la reelección. El ataque dejó cuatro muertos: el escolta Francisco Cruz Colmenares, el director de la policía municipal, Jorge Luis Ralda Corzo, y dos militantes de Morena. Nueve personas resultaron heridas, entre ellos el propio candidato.

El domingo 19 en la madrugada fue atacada la comitiva de Nicolás Noriega, candidato de morena en Mapastepec, municipio de la región la Costa, ruta de tráfico de personas sin documentos migratorios. El alcalde con licencia, junto con sus seguidores, regresaba de la colonia Ibarra, donde habían patrocinado un baile, cuando fueron atacados.

Nicolás Noriega iba en una camioneta adelante, por lo que salió librado; cinco de sus colaboradores fallecieron. Noriega busca la reelección por Morena.

Finalmente, ese domingo más tarde se reportó otro ataque armado, ahora en contra de la candidata indígena Chol de Morena a la alcaldía de Rincón Chamula San Pedro, María de la Luz Hernández Pérez. El ataque dejó un muerto y dos heridos, entre ellos a la abanderada morenista.

La madrugada del pasado sábado 25, una semana antes de la jornada comicial, fue asesinado un líder de Morena en el municipio de Simojovel, cuando un grupo armado entró a su casa y dejó heridos a otros cuatro integrantes de su familia.

Éste es el panorama que hasta el momento cimbra las elecciones locales en Chiapas, y al que se suman protestas magisteriales, desde el día 15 de este mes, Día del Maestro, cuando la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) marchó en la capital del estado y se instaló en un plantón permanente en el parque central de la capital, frente a la sede del Poder Ejecutivo.

Pronto comenzaron las acciones magisteriales de presión; la primera de ellas fue la vandalización de las sedes estatales de los partidos políticos. En otra acción, tomaron la caseta de cobro de la autopista San Cristóbal a Chiapa de Corzo; el miércoles 22 tomaron gasolineras en Tuxtla Gutiérrez y el jueves 23 bloquearon las instalaciones de Pemex también en la capital del estado.

De la violencia en las regiones, nada ha comentado el gobernador morenista Rutilio Escandón. De los ataques a los candidatos, solamente han surgido escuetos comunicados de la Fiscalía Estatal. Sobre los bloqueos magisteriales también hay un silencio absoluto.