Desaparecidos en México
AMLO “se va sin resolver, sin atender y sin escucharnos”, reclaman en marcha por los desaparecidos
Cientos de familiares de personas desaparecidas marcharon al Zócalo capitalino, donde criticaron al presidente López Obrador por ignorarlos y desmantelar las instituciones que ellos ayudaron a crear.CIUDAD DE MÉXICO (apro).– Las campanadas de mediodía de la Catedral Metropolitana anunciaron el ingreso de cientos de familiares de personas desaparecidas al Zócalo capitalino, para concluir la marcha por el Día de la Madre, en su edición número 13, y la última que le ocurre durante el mandato de Andrés Manuel López Obrador.
Sin un plan preconcebido, en cuanto llegaron las madres al Zócalo, colocaron mantas en las vallas metálicas que protegen Palacio Nacional y, las que no cupieron, tapizaron las baldosas de la explanada, algunas de las mantas se pusieron cerca del asta bandera, de la que ondeaba el lábaro patrio.
Bajo un sol abrasador, las madres de víctimas y sus familiares, provenientes de distintas partes del país, iniciaron la caminata desde el Monumento a la Madre, recorrido en el que estuvieron acompañados por grupos de jóvenes, como la Brigada de Acción Mitotera “La Comparsa”, que animaron con música la larga ruta hacia el Zócalo, plaza cargada de un enorme simbolismo político y social.
En el camino, decenas de familias que desde hace años se han desplazado de distintas geografías para visibilizar en el centro de los poderes de México la tragedia humanitaria que viven miles de madres que no pueden conmemorar el día de manera tradicional, ante la ausencia de sus hijos.
Cantos nuevos y palas muy usadas conviven con lienzos bordados con nombres de personas víctimas de desaparición, cuyos familiares acusan que no han recibido la atención adecuada por parte de las autoridades.
A la lista de madres que se han movilizado se han sumado cientos más, con casos de desapariciones recientes, de meses, semanas e incluso días, reveló Jorge Verástegui, hermano y tío de Antonio y Toñito, desaparecidos en 2009 en Parras, Coahuila.
“No es que la manifestación se haya alimentado de personas solidarias, sino que cada día son más las familias de víctimas de desaparición, esa es la triste realidad, hemos crecido como grupo social, no por el respaldo de otros con nosotros, sino porque la violencia y la impunidad siguen imparables”, dice Verástegui, uno de los organizadores de la movilización.
Entre los rostros de víctimas, los del abogado y defensor Ricardo Lagunes y el activista Antonio Díaz Valencia, desaparecidos en enero de 2023 en los límites de Colima y Michoacán, alertan por tener poco tiempo visibilizados.
“Este es el segundo año en que marchamos, y hasta ahora no tentemos ninguna respuesta, nos hemos enfrentado al desmantelamiento de las instituciones, de la Comisión Nacional de Búsqueda, no hay búsqueda de mi hermano y del activista, hay dos personas detenidas, pero no proporcionan información sobre qué pasó con Ricardo y Antonio”, contó Ana Luisa Lagunes.
“¡Faltan 43 y nuestros hijos también!” “¿Dónde están los desaparecidos? Los queremos de vuelta y vivos”, y las tradicionales consignas llamando a la población en general a no ser indiferente ante la tragedia, que puede alcanzar a más personas, alternaron con adaptaciones de canciones populares a odas para las madres buscadoras, durante el recorrido hacia el Zócalo.
La movilización dio paso a la consolidación de la creación de un frente único de familiares de desaparecidos, señaló Juan Carlos Trujillo Herrera, de la Brigada Nacional de Búsqueda María Herrera.
Hermano de cuatro desaparecidos, de Raúl, Salvador, Gustavo y Luis Armando, desaparecidos entre 2008 y 2010, Trujillo Herrera alertó que “confiamos en que la unión con la sociedad civil es la que nos va a permitir alcanzar nuestros objetivos para encontrar a los nuestros, ya vimos que en los gobernantes no podemos confiar, creímos en este gobierno y no tuvimos más que el desmantelamiento de las instituciones que nosotros ayudamos a crear”.
Del encuentro entre las familias de personas desaparecidas, surgió un manifiesto por el que exigieron la renuncia de la titular de la Comisión Nacional de Búsqueda (CNB), Teresa Guadalupe Reyes; detener el desmantelamiento de las instituciones; que la Fiscalía General de la Republica deje de obstaculizar los procesos de investigación; que se retomen las búsquedas; que las fiscalías locales y las comisiones estatales cumplan con sus deberes de búsqueda y procuración de justicia; y que se proteja a los colectivos de buscadoras.
AMLO y Gertz Manero, los otros “desaparecidos”
Al pie del balcón presidencial, Yolanda Morán culminó la marcha en silla de ruedas, con dos nuevas fichas de búsqueda, la del presidente Andrés Manuel López Obrador y la del fiscal Alejandro Gertz Manero.
“Están desaparecidos, han estado cobrando sin ejercer sus funciones, no se reúnen con nosotras, no nos ven ni nos escuchan, no atienden el problema de los desaparecidos; al presidente le asustan las víctimas.
“El presidente nos quiere desaparecer con su censo ofensivo, y al fiscal Gertz, que no sale de su bunker, lo hacemos responsable por no haber hecho nada para parar esta tragedia”, expuso Morán, quien busca a su hijo Dan Jeremeel Fernández.
A la gran plaza de México llegó también Tita Radilla, no importó que hacía dos semanas había sufrido un micro infarto, pero “el doctor dijo que sólo se había dañado un pedacito, por eso vine a marchar”, confió.
Frente a Palacio Nacional, Tita Radilla, cuyo padre Rosendo cumplirá 50 años de haber sido desaparecido por el Ejército Mexicano en Guerrero, recriminó al presidente López Obrador la falta de resultados para atender las desapariciones ocurridas durante la llamada Guerra Sucia.
“Confiamos en él (López Obrador), creímos que iba a hacer justicia cuando firmó el decreto para crear la Comisión de la Verdad, y ni verdad ni reparaciones, porque muchas personas estaban esperando la reparación del daño, que merecen por el dolor sufrido, las afectaciones de vivir sin un ser querido son muchísimas.
“Estamos muy preocupados porque no sabemos si se le va a dar continuidad al decreto, un decreto que el Ejército se ha dedicado a desobedecer, porque ha continuado obstaculizando el acceso a la verdad y a la justicia, tenemos muchas dudas de quién es más fuerte, el presidente o los militares; lo único que va a concluirse de la Comisión es el informe, que confirma que los militares nunca colaboraron para esclarecer lo que ocurrió hace más de 50 años”, dijo Tita.
María Herrera Magdaleno, reconocida por la revista Time como una de las personas más influyentes en México, llamó al presidente a voltear a ver “los otros datos” que las personas que marcharon hasta el Zócalo le fueron a llevar.
“Desde aquí al señor presidente le venimos a traer otros datos, los del dolor, el que sufrimos miles de mexicanos con hijos desaparecidos; reconozca que falló, usted se va sin resolver este grave problema, sin atendernos y sin escucharnos, basta de simulación”, urgió Herrera Magdaleno, quien busca a sus cuatro hijos, Raúl, Salvador, Gustavo y Luis Armando, desaparecidos entre 2008 y 2010.