SALTILLO, Coahuila (apro).- Integrantes del colectivo Fuerzas Unidas por Nuestros Desaparecidos en Coahuila se manifestaron en la Catedral de Santiago, en Saltillo, para exigir que el edificio histórico permita la visibilización de los cientos de casos de personas desaparecidas.

En la víspera de Noche Buena, familiares de varias personas desaparecidas se instalaron a un costado de la Catedral donde en días pasados se colocaron monumentales lonas con publicidad del gobierno de Manolo Jiménez Salinas y diversas empresas, cuyos representantes participaron en un viaje a El Vaticano, al que acudieron la familia del mandatario estatal y amistades cercanas.

Rosa Angélica García Saucedo, madre de Jaime César Álvarez y quien se encuentra desaparecido desde enero del 2012, explicó que la manifestación de las familias tiene como finalidad que así como se promueve turísticamente en el Vaticano a la entidad, también se hable en el extranjero de los casos de desaparición que prevalecen y que en los de larga data, como el de su hijo, no hay avances para localizarlos.

“Nosotros estamos proyectando en la Catedral las imágenes de nuestros seres queridos desaparecidos y diciéndole al señor gobernador (Manolo Jiménez Salinas) y a las personas que estuvieron en el Vaticano, y que ahora tienen su publicidad en Catedral, que así como llevaron hasta ese lugar la Catedral también lleven hasta allá todos los datos de los desaparecidos y de todo lo que está pasando aquí en México y en especial en Coahuila’, señaló.

A principios del mes de diciembre el mandatario estatal realizó una gira por Italia, en la que aseguró, de acuerdo con sus comunicados, haber tenido una audiencia con el Papa Francisco aunque en un video se observa que solo lo saludó en una de las actividades públicas que realiza el representante de la iglesia católica.

El estado de Coahuila fue el invitado este año en la actividad “Navidad Mexicana en el Vaticano” que desde hace 16 años se realiza en la Santa Sede. En el altar Gregorio Magno de la Basílica de San Pedro se colocó el pesebre junto con artículos como el sarape y una monumental lona con la imagen de la Catedral de Saltillo.

La gira ha causado críticas debido a que además de que, al igual que en el 2022, Jiménez Salinas viajó con su esposa Paola Rodríguez, y sus padres Liliana Salinas Valdés y Manuel Jiménez Flores, así como un grupo de amigos y entre la actividades figuró la participación de un grupo de mujeres matlachinas de la parroquia Medalla Milagrosa que se ubica en uno de los sectores exclusivos de Torreón, en lugar de llevar a uno de los grupos más representativos del sector Ojo de Agua de Saltillo.

Entre las actividades también se llevó a cabo una muestra gastronómica cuyos platillos fueron elaborados por la empresa restaurantera IL Mercatto Gentiloni, de origen italiano y cuyos dueños son muy cercanos al mandatario estatal. Los alimentos ofrecidos no fueron representativos de la entidad, ya que se trató de creaciones, de acuerdo con los mismos chef, como ceviche de carne seca con salsa de tuna roja.

En la comitiva también participó el obispo de la diócesis de Saltillo, Hilario González García, a quien también se le vio saludando al papá al término de la audiencia general realizada el 11 de diciembre.

Para las familias de las personas desaparecidas, el gobierno de Jiménez Salinas no realiza inversiones importantes para la búsqueda y localización de las personas desaparecidas, a diferencia de los gastos realizados en esta gira y ahora la publicidad instalada en la Catedral que se ubica en la capital del estado.

Por ello decidieron hacer la toma simbólica del inmueble que data desde 1795 de estilo barroco y churrigueresco.

“Queremos que así como hicieron eso, nos apoyen también con la publicidad y la visibilidad de la desaparición en Coahuila. Esperamos que eso toque sus corazones y deseamos que nunca jamás a nadie les toque pasar lo que nosotras estamos viviendo. En estas fechas nosotros no festejamos nada, pues tenemos una silla vacía en nuestra mesa. Es tiempo de que ya pongan atención a todo esto que ha pasado; queremos verdad, queremos justicia. Vivos se los llevaron y vivos los queremos”, dijo García Saucedo con un altavoz que sorprendía a los paseantes de la Villa Navideña que se instaló frente a Catedral.