CIUDAD DE MÉXICO (apro).-La reelección de Rosario Piedra al frente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) fue repudiada por organizaciones de la sociedad civil que habían alertado sobre la gestión deplorable de la hija de la fundadora de Eureka, Rosario Ibarra de Piedra.

La peor evaluada por los senadores de las comisiones unidas de Justicia y Derechos Humanos, encargadas del proceso de designación de la titularidad del organismo autónomo para el periodo 2024-2029, fue impuesta por la mayoría de Morena en el Senado la madrugada de este miércoles, generando de forma inmediata reacciones de organizaciones sociales.

Durante la maratónica sesión, organizaciones sociales agrupadas en el hashtag #LaCNDHqueQueremos denunciaron que elementos de seguridad de Senado expulsaron a representantes de colectivos y organizaciones que acudieron a la sesión.

En un comunicado difundido en redes sociales, denunciaron que activistas fueron sacados del Senado cuando “protestábamos pacíficamente en sus instalaciones, exigiendo la designación de una presidencia en la CNDH que cumpla con los perfiles mínimos para la defensa de los derechos humanos al frente del organismo autónomo”.

Luego de exigir el “respeto al derecho a la protesta y de libertad de expresión”, el Observatorio de Designaciones Públicas, en el que participan varias organizaciones civiles, reaccionó prácticamente de forma inmediata luego de que a la 01:30 horas de este miércoles, el Senado designó por 87 votos a Piedra Ibarra por un segundo periodo.

“¡Indignante!”, calificó el observatorio la reelección, con lo que “se manda un mensaje contundente contra las víctimas y la agenda de derechos humanos”.

El Centro de Derechos Humanos Agustín Pro Juárez (Centrp Prodh), que realizó un estudio pormenorizado de la deficiente gestión de Piedra Ibarra, sobre todo por su silencio ante graves violaciones a derechos humanos cometidas por las Fuerzas Armadas, lamentó que en el proceso “se ignoraron los estándares internacionales sobre no reelección de ombudsperson”.

En su cuenta de X, la organización reprobó que la mayoría de Morena “premia indebidamente una gestión caracterizada por el debilitamiento institucional, la inacción y la pérdida de autonomía”.

Para la organización, que desde su fundación hace más de 30 años ha representado a víctimas de violaciones graves de derechos humanos entre ellas a los padres y madres de los 43 estudiantes de Ayotzinapa desaparecidos en 2014, la reelección de Piedra Ibarra es “un mal mensaje sobre el lugar de los derechos humanos y la rendición de cuentas en el sexenio que inicia”.

El especialista en derechos humanos y director del Centro Cultural Tlatelolco de la UNAM y ex director el Museo de la Tolerancia, Jacobo Dayán, reaccionó después de la reelección de Piedra con una frase dirigida a los senadores del oficialismo: “Fuera máscaras. Eligieron al perfil peor evaluado para dirigir la CNDH. Los derechos humanos no les interesan. Podrán tener los votos, pero la autoridad moral la perdieron hace mucho”.

Para Dayán la votación de la mayoría en el Senado, compuesta por Morena, PVEM y PT, “les quita el velo (una vez más) y muestra lo que son (una vez más). Autoritarios, militaristas, corruptos, opacos y contrarios a los derechos humanos”.

Y emplazó: “Paren de decir que ‘Claudia es distinta’, ‘es científica’, ‘es más moderada”.

La presidenta de Causa en Común María Elena Morera, expuso en un breve mensaje que “fue reelegida la piedra de la CNDH, la cómplice de miles de violaciones a los derechos humanos que se cometieron en el sexenio de AMLO, Rosario Piedra Ibarra”.   

El empresario Claudio X. González, crítico acérrimo de los gobiernos de Morena, calificó la reelección de Piedra como “otra señal ominosa de quién manda y otro ejemplo e la mentira, la simulación y la perversión que caracterizan a Morena, al PVEM y al PT”.

En su cuenta de X, el empresario acusó que “los problemas en el país crecen, el desgobierno cunde y Claudia Sheinbaum se ve cada vez más chiquita”.