WASHINGTON (apro).- “Retornos asistidos” llamó la canciller mexicana Alicia Bárcena a las deportaciones de migrantes que efectúa el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, en el marco de un creciente flujo de personas que buscan llegar a Estados Unidos.

“México está llevando adelante retornos asistidos hacia Guatemala, Honduras, El Salvador, y estamos explorando Ecuador, Venezuela y Colombia”, dijo Bárcena en conferencia de prensa en el Departamento de Estado en la capital estadunidense.

La semana pasada, varios medios de comunicación de Estados Unidos reportaron que los gobiernos de Joe Biden y de López Obrador habían logrado un nuevo acuerdo en materia migratoria para “despresurizar” de migrantes la frontera sur estadunidense.

De acuerdo con los medios estadunidenses, en ese acuerdo de 15 puntos, el gobierno de México aceptó llevar a cabo “deportaciones inmediatas de migrantes a terceros países” para aminorar el número de personas que por distantes razones piden asilo en la Unión Americana.

Desmiente la SRE

“No hay ningún acuerdo nuevo”, declaró a Proceso un funcionario de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) tras concluir la conferencia de prensa de su titular, Bárcena, al lado de Antony Blinken, secretario de Estado de la presidencia de Biden.

“Estamos realizando seis vuelos semanales en el caso de Guatemala, Honduras y El Salvador”, agregó la canciller mexicana respecto a los “retornos asistidos”, al ser cuestionada en el marco de la reunión del Diálogo Económico de Alto Nivel, celebrado en Washington.

A su vez, el encargado de la política exterior estadunidense indicó que el objetivo de los gobiernos de México y de su país es abordar las causas de la migración para regularizar los cruces transfronterizos, apoyando sobre todo a las naciones de América Central.

Blinken puntualizó que el propósito es que “la migración sea legal y se atienda y apoye a las familias que emigran, para ayudarlos a que tengan comida en sus mesas, pero bajo el marco legal y en cooperación con el gobierno mexicano y los de otras naciones de la región”.

Bárcena insistió en que la problemática del flujo migratorio debe abordarse con “una mirada hemisférica y regional”, atendiendo las razones por las cuales las personas deciden dejar sus países, a sus familiares y sus bienes para buscar el bienestar en otras naciones (Estados Unidos).