TUXTLA GUTIÉRREZ, Chis. (apro).- Desde hace cuatro días, grupos de sicarios armados presuntamente del Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG) y del Cártel de Sinaloa (CDS) que se disputan el control del territorio en la frontera sur de Chiapas, han provocado reclutamiento forzado para sus filas, desplazamiento masivo de familias,  terror y pánico en diversas comunidades y municipios fronterizos.

La disputa que empezó en junio del 2021, tras la muerte del líder del Cártel de Sinaloa en esta región de la frontera sur mexicana, Ramon Gilberto Rivera Beltrán, ha dejado estos dos años una estela de cientos de ejecutados, desaparecidos y familiares enteras desplazadas de sus comunidades en los municipios de Frontera Comalapa, Amatenango de la Frontera, Maza de Madero, Motozintla y Chicomuselo, principalmente.

Esta semana fue la más intensa que hayan vivido pobladores de esta región de la frontera pues el reclutamiento forzado llegó hasta diversas comunidades de Frontera Comalapa, donde los hombres que no pudieron huir fueron llevados a la fuerza. Cientos más que escaparon llevan ya dos o hasta tres noches durmiendo en la montaña, reportaron sus familiares.

Videos y fotografías de los narcobloqueos, narcomantas, vehículos quemados a orilla de las carreteras, personas ejecutadas que llevan hasta dos días sin poder ser levantados sus cuerpos, son imágenes que algunos logran tomar con sus celulares.

Convoyes de vehículos artillados y vehículos monstruos, patrullas carreteras son vistos en caminos rurales y calles de comunidades como El Lajerío, Nueva Libertad, Nueva Independencia, La Candelaria, 24 de febrero, así como la cabecera municipal de Frontera Comalapa.

Los habitantes de esta región piden por redes sociales vía anónima, la intervención de la Guardia Nacional y de los elementos de la Sedena, pues a cuatro días de las balaceras, denuncian que no hay respuesta.

De hecho, cerca de El Jocote hay un destacamento del Ejército Mexicano; entre Paso Hondo y Frontera Comalapa hay un destacamento de la Guardia Nacional y, en Chicomuselo, está un cuartel del Ejército, pero no salen de su encierro. De hecho la gente denuncia que frente a ellos pasan los convoyes de los grupos que se disputan el territorio, mientras en las comunidades levantan y asesinan a personas inocentes.

Reclamo de atención

Ante esta situación, activistas de la Red Nacional de Organismos Civiles de Derechos Humanos “Todos los Derechos para Todas y Todos” (Red TDT), de la Mesa de Coordinación Transfronteriza Migraciones y Género Guatemala – México (MTMG) y el Colectivo de Monitoreo – Frontera Sur, exigieron al gobierno estatal y federal intervenir de inmediato.

Las organizaciones que integran estas redes y colectivos de articulación denunciaron “con preocupación e indignación el recrudecimiento de la violencia que se está viviendo en diferentes territorios de Chiapas, el cual se ha venido denunciando, sin tener hasta ahora una respuesta por parte del Estado mexicano para atender y tomar responsabilidad de la situación”.

Señalaron que los conflictos por el control territorial entre diferentes grupos del crimen organizado en la Región Frontera de Chiapas han traído consecuencias devastadoras para sus habitantes como: robos, extorsiones, levantamiento de puestos de comercio y despojo de otros medios de vida, secuestros, desapariciones forzadas, reclutamiento forzado, amenazas de muerte, desplazamiento forzado, feminicidios y asesinatos.

Agresiones que se han convertido ahora en parte de su cotidianidad, viviendo el terror como mecanismo de control de la población y de sus territorios, por parte de estos grupos delictivos.

Indicaron que en medio de este contexto que lleva azotando a la población de esta región por casi dos años, parecen particularmente graves los hechos sucedidos los días 24 y 25 de mayo en los municipios de Frontera Comalapa, Chicomuselo, La Trinitaria y Amatenango de la Frontera.

Expusieron que hay comunidades enteras incomunicadas por bloqueos de carreteras y caminos, suspensión de clases en las escuelas, cortes de luz eléctrica que incomunican a la población, quema de vehículos, instalación de una narcomanta, enfrentamientos armados, amenazas de allanamiento para revisión de teléfonos celulares, secuestros, reclutamiento forzado de los hombres de las comunidades para integrarlos a sus filas, y muerte a quienes oponen alguna resistencia.

Asimismo, denunciaron la agresión física y el secuestro del defensor Milton Morales Zunun el día de ayer en el municipio de Chicomuselo, quien fue encontrado con vida varias horas después de haber sido privado de su libertad.

Las organizaciones que forman parte de estas redes y colectivos exigieron que se garantice la seguridad e integridad física, psicológica y emocional de las y los habitantes de los municipios de Frontera Comalapa, Chicomuselo, La Trinitaria y Amatenango de la Frontera, que están viviendo este terror en sus territorios.

Demandan protección, justicia y resarcimiento para todas y todos los defensores del territorio de la Región Frontera de Chiapas.

“Nos sumamos al llamado urgente hecho por el Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático, y la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, exigiendo la protección de defensores y defensoras de derechos humanos de Chiapas y del país”, pidieron.

También solicitaron que el Estado mexicano y las autoridades correspondientes intervengan de manera urgente para frenar la violencia y el terror que se viven en la Región Frontera de Chiapas. Hacemos responsable al Estado mexicano de las consecuencias que se están presentando por su omisión.

Milton había sido presionado y amenazado a mediados del año 2022 por este grupo delincuencial para que dejara de oponerse a la operación de las mineras en la región, y su privación de la libertad se suma a la agresión a Isabel Recinos Trigueros a quien secuestraron, torturaron y dejaron gravemente lesionado el pasado 30 de diciembre.