CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Académicos del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE) alertaron que la viabilidad de la operación de dicho centro para el siguiente semestre “está en duda” por el adeudo de unos 17 millones de pesos en pagos y estímulos de investigación que, incluso, los podría orillar a un emplazamiento a huelga.

En conferencia en la sede Santa Fe, Javier Aparicio, profesor investigador y secretario general del Sindicato de Personal Académico del Centro (SIPACIDE), denunció que los pagos exigidos están pendientes desde hace un año y medio y dependen de la aprobación del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) y de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) para que se liberen los recursos necesarios.

No obstante, lamentó que ni la institución dirigida por María Elena Álvarez-Buylla ni la encabezada por Rogelio Ramírez de la O, respectivamente, han hecho lo necesario para destrabar el problema. “A todos los profesores se les deben estímulos, además de que a unos 120 que se les deben estímulos por trabajos ya hechos desde hace año y medio”, detalló. 

Agregó que el Conacyt “lleva año y medio” en la revisión de las reglas de operación para liberar los recursos que el propio CIDE ha generado con distintos programas; sin embargo, no ha terminado. “Ni nos pagan lo que ya trabajamos ni nos dejan hacer nuevos proyectos… Sin acceso a recursos propios, el CIDE no es viable. El futuro del CIDE está en manos del Conacyt y de la Secretaría de Hacienda”, sentenció.

Aparicio Castillo detalló que entre la tercera y cuarta parte de los ingresos “corrientes” de los maestros se han visto afectados por el problema de administración de recursos. Dijo que éste se generó desde antes de la llegada de José Antonio Romero Tellaeche a la dirección general, en noviembre del 2021, pero que en los últimos meses se agudizó.

Tal situación los llevó a pensar en un emplazamiento a huelga. Sin embargo, el 4 de mayo desistieron de ello en espera de que en la sesión programada para este miércoles 18, el Consejo Directivo del CIDE resolviera la liberación de los recursos para realizar los pagos; pero ésta se pospuso.

El investigador reconoció que los académicos están conscientes que irse a huelga afectaría principalmente a los estudiantes, por lo que es una medida que quieren evitar.

Entonces, hizo un llamado al Jurídico del Conacyt: “si no resuelven esto a la brevedad, habrá un conflicto laboral muy grande”.

Consecuencias en programas de investigación

Lorena Ruano, profesora y exsecretaria del SIPACIDE, denunció que la “asfixia burocrática y financiera” que aplica el Conacyt al CIDE, aunado a la toma de decisiones de Romero Tellaeche “a puerta cerrada” y sin consultar a los cuerpos colegiados ya generó consecuencias negativas en la oferta académica y los programas de investigación.

Entre las graves afectaciones, mencionó la cancelación de programas de educación continua, así como diplomados y cursos especializados, y maestrías como en Gerencia Pública y Economía Ambiental.

El pasado 14 de mayo Grisel Salazar fue removida de la Coordinación de la maestría en Periodismo y Políticas Públicas “sin explicación alguna, sin consultar a la junta de profesores, al Consejo Académico y sin avisar el curriculum de la persona nombrada”.

Por el contrario, dijo, al menos cinco personas han sido contratadas por la dirección “atropellando los estatutos y reglamentos”, pues no cumplieron con el perfil necesario y el trámite se hizo “con total opacidad”.

Las consecuencias alcanzan también a la Sede Región Centro, ubicada en Aguascalientes, “donde hace un par de semanas, sin consultar al Consejo Académico se decidió de manera vertical que no iba a ingresar esta generación de estudiantes a la Licenciatura de Políticas Públicas”. Ello, pese a que ya había estudiantes que concursaron y cumplieron con los requisitos para ingresar.

La internacionalista denunció que desde noviembre pasado “no existe el diálogo” de Romero Tellaeche ni de Álvarez-Buylla con estudiantes ni profesores. “Es urgente un proceso de diálogo para sanar el ambiente, la grave herida que sufrimos desde noviembre”, aseguró. 

También comentó que, a diferencia del movimiento que se generó contra la imposición de Romero Tellaeche, en la que participaron varios profesores, ahora muchos ya no quieren manifestarse, por temor a represalias. 

Por todo ello, los académicos demandaron el cumplimiento de nueve puntos: 

• 1. Hacer pública del acta del nombramiento del director del CIDE, José Antonio Romero Tellaeche, el 29 de noviembre del 2021.
• 2. Hacer público el informe del Comité de Evaluación Externa sobre dicho nombramiento.
• 3. Aprobar las reglas de operación que tienen asfixiado financieramente al CIDE.
• 4. Que se escuche a los estudiantes y que se les dé certeza sobre las becas de licenciatura y posgrado, así como las de manutención. Además de abrir un camino para que se atienda su pliego petitorio presentado desde noviembre pasado. 
• 5. Cese el acoso burocrático y financiero del CIDE a la comunidad.
• 6. Dar certeza de la Sede Región Centro sobre su oferta docente.
• 7. Respetar la legalidad y consultar a los órganos colegiados.
• 8. Detener el desmantelamiento de la oferta docente.
• 9. Asegurar que las contrataciones del personal cumplan con las condiciones de los estatutos.

Alumnos reanudarían marchas

La estudiante Ximena Millán adelantó que la comunidad estudiantil podría retomar las manifestaciones en las calles el próximo sábado 4 de junio. Entre sus demandas se contarían el apoyo a los profesores para que sean liberados los recursos que cubran los adeudos, además de que se garantice la certidumbre sobre si situación educativa para el próximo semestre. 

Denunció que continúa el hostigamiento de personal que depende directamente de Romero Tellaeche hacia los estudiantes que han expresado su inconformidad, al grado de que son fotografiados y perseguidos dentro del plantel Santa Fe.

“Hoy el CIDE padece la peor crisis de su historia por la irresponsabilidad del Conacyt” por distintos motivos, dijo, entre ellos, el que los profesores “están laborando sin fondos ni incentivos” y la suspensión de proyectos de investigación importantes. 

Millán acusó que hay un “atropello sistemático” de las autoridades. “Parece que están intentando desmantelar al CIDE y de atentar contra la libertad de expresión”, sentenció.