PRI
Escoltas de Alejandro Moreno, líder del PRI, amenazan a miembros de la Guardia Nacional
Escoltas de Alejandro Moreno, líder del PRI, y personal de la Guardia Nacional asignados a la custodia del abogado Enrique Carpizo Aguilar protagonizaron un incidente vial en el que salieron a relucir armas de grueso calibre.CAMPECHE, Cam. (proceso.com.mx).- Escoltas del dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, y personal de la Guardia Nacional asignados a la custodia del abogado Enrique Carpizo Aguilar protagonizaron un incidente vial en el que, por ambos bandos, salieron a relucir armas de grueso calibre, aunque no fueron accionadas.
Carpizo Aguilar es el abogado que asesoró jurídicamente a los policías federales que renuentes a incorporarse a la Guardia Nacional se sublevaron al inicio del gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
El incidente entre sus escoltas y los de Moreno Cárdenas se suscitó la tarde del sábado 9 de enero en la avenida Resurgimiento, uno de los vecindarios más lujosos de la ciudad, a menos de medio kilómetro de la sede estatal de la Guardia Nacional.
En ese mismo sector, pero en una colina, se erige la misteriosa mansión de Moreno Cárdenas.
El conflicto estalló cuando la camioneta Ford Lobo de color negro, en la que los guaruras de Moreno Cárdenas se desplazaban a exceso de velocidad, golpeó la Mercedes Benz blanca en la que los agentes de la Guardia Nacional escoltaban a Carpizo Aguilar, quien a su vez transitaba en un Lamborghini naranja.
Tras el percance, los escoltas de “Alito” cerraron el paso a la Mercedes Benz y amagaron a sus ocupantes con un rifle de asalto R-15. Los escoltas del abogado respondieron desenfundando sus armas de cargo.
Según una serie de videos del momento que exhibió a través de su cuenta de Twitter -en los que además explicó que el gobierno federal le asignó escoltas de la Guardia Nacional porque comenzó a recibir amenazas de muerte a partir de que ganó el litigio a favor los policías federales inconformes-, Carpizo Aguilar bajó de su lujoso auto e intervino en el conflicto exigiendo a los escoltas de Moreno Cárdenas identificarse.
La Mercedes Benz y el Lambourghini son propiedad del abogado, quien además preside el Instituto para la Protección de los Derechos Humanos, una asociación civil.
También denunció que sus escoltas de la Guardia Nacional solicitaron apoyo de su corporación, pero los agentes tardaron en llegar 40 minutos a pesar de que la sede está a no más de 600 metros del lugar donde ocurrió el percance.
Finalmente fue una patrulla de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) que hacía su rondín por la zona la que se hizo cargo de la situación. Los guaruras de Moreno Cárdenas fueron detenidos y junto con los vehículos involucrados fueron trasladados a las instalaciones de la corporación estatal.
Una hora más tarde se les liberó.
A pesar de que los permisos de los escoltas de Moreno Cárdenas para portar armas vencieron hace dos meses, no se les puso a disposición del ministerio público, y el caso se registró como un simple accidente de tránsito, ante la inconformidad del afectado.