Pegasus
Gobierno de Pedro Sánchez destituye a Paz Esteban como directora de CNI por caso Pegasus
La nueva titular de los servicios de Inteligencia españoles en sustitución de Esteban es Esperanza CasteleiroMADRID.— El gobierno de Pedro Sánchez destituyó este martes a Paz Esteban como directora del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) por el creciente escándalo del espionaje con el software israelí Pegasus, al presidente Sánchez, y a sus ministros de Defensa de Interior, Margarita Robles y Fernando Grande Marlaska, respectivamente, quienes se suman a 65 líderes del movimiento independentista catalán.
El anuncio se hizo casi a la par de darse a conocer que el ministro Marlaska (bajo cuya oficina recaen las principales fuerzas de seguridad, la Policía Nacional y la Guardia Civil) también había sido espiado en junio pasado. Además, que el teléfono del ministro de Agricultura, Luis Planas, también sufrió un intento de ataque, pero resultó fallido.
La nueva titular de los servicios de Inteligencia españoles en sustitución de Esteban es Esperanza Casteleiro, hasta la fecha secretaria de Estado de Defensa y persona con una larga trayectoria en el CNI, institución del que llegó a ser secretaria general.
La destitución de Esteban tiene lugar cinco días después de su comparecencia en el Congreso en la Comisión de Secretos Oficiales, donde admitió que el organismo espió a 18 líderes del movimiento independentista catalán con autorización judicial, entre ellas el president de la Generalitat, Pere Aragonès, sin dar una explicación la razón específica de por qué se intervino su teléfono, tanto las comunicaciones como el contenido del aparato.
Eso sí, se deslindó del espionaje al resto de líderes independentistas catalanes y al menos dos políticos nacionalistas vascos, entre ellos Arnaldo Otegui, coordinador general del partido Bildu, descubierto por Citizen Lab, el laboratorio de ciberseguridad de la Universidad de Toronto.
Los dirigentes catalanes, encabezados por el president Aragonès, han exigido que en una primera etapa haya una investigación con observadores independientes y que haya transparencia, y luego que haya asunción de responsabilidades.
Aunque todavía no existe el resultado de ninguna investigación, el gobierno de Sánchez decidió destituir a Esteban Paz, sobre todo por la incomodidad que generó en los ministerios conocer el espionaje a Aragonès, un político con el que el gobierno ha mantenido una mesa de dialogo para buscar una salida negociada por la vía política al conflicto en Cataluña, abandonando así la vía judicial elegida por el ejecutivo anterior que encabezaba el conservador Mariano Rajoy.
La presión para la hoy destituida directora de los servicios de inteligencia se incrementó cuando se hizo público que el presidente Sánchez había sido espiado, lo que dejaba en evidencia la brecha de seguridad en el gobierno de España.
El propio informe del Centro Criptológico Nacional, adscrito al CNI, sobre la investigación del espionaje a los teléfonos del gobierno central, se convirtió finalmente en el principal argumento para la destitución de la funcionaria.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, la ministra de Defensa, Margarita Robles, se esforzó en su discurso para pretender mostrar la caída de Esteban Paz como una “sustitución”, más que por una destitución. Líderes de la oposición criticaron la decisión por considerar que Pedro Sánchez sacrificó a la titular del CNI para entregar su cabeza al independentismo catalán, como lo señaló Alberto Núñez Feijóo, dirigente del Partido Popular y líder de la oposición.