CIUDAD DE MÉXICO (apro).- En la Asamblea General de la ONU, los Estados miembros aprobaron de manera casi unánime una resolución que pide el cese del bloqueo económico y financiero de Estados Unidos contra Cuba: 185 gobiernos votaron a favor, solamente dos en contra –Estados Unidos e Israel--, mientras los gobiernos de Brasil y de Ucrania se abstuvieron.

Desde ayer, los representantes de los Estados se sucedieron en la tribuna de la asamblea, con sede en Nueva York, para condenar el bloqueo impuesto por el gobierno de Estados Unidos contra la isla hace seis décadas, y contra el reciente endurecimiento de las medidas coercitivas contra La Habana, como su reintegración a la lista de países patrocinadores del terrorismo.

Como es recurrente en este tema, el gobierno de Estados Unidos apareció aislado en el escenario internacional, donde solo contó con el apoyo de su aliado histórico, Israel, y apenas consiguió la abstención del gobierno brasileño de Jair Bolsonaro –quien profesa un odio a Cuba-- y del de Ucrania, al que entrega recursos multimillonarios en su guerra para repelar la invasión de Rusia.

La resolución aprobada hoy tomó nota de un informe publicado en enero pasado por la oficina de Antonio Guterres, el secretario general de la ONU, que documentó los estragos provocados por el bloqueo comercial y subrayó que “es incompatible con un sistema internacional basado en el Estado de derecho”, ya que responde al poder “político y económico” y representa una “negación injusta al derecho de Cuba al desarrollo y a la autodeterminación”.

El gobierno mexicano dejó clara su condena “en los términos más enérgicos” contra el bloqueo, que representa una medida unilateral y una violación a la soberanía de Cuba, más en la crisis económica derivada de la pandemia de Covid-19 y el paso del huracán Ian.

Ayer, el embajador Juan Ramón de la Fuente deploró que “hacer padecer de hambre a una sociedad civil es otra conducta prohibida por el Derecho internacional humanitario”, y agregó: “Estados Unidos debe cesar estas medidas, reparar daños y ofrecer garantías de no repetición tal y como lo establece el Derecho internacional. La Asamblea General debería exigir que Estados Unidos ponga fin de inmediato al bloqueo económico y financiero que mantiene en contra de Cuba”.