T-MEC
Estos son los argumentos de EU en la disputa con México sobre maíz transgénico y uso de glifosato
Ante la negativa del gobierno mexicano de retirar la prohibición de importar maíz transgénico para el consumo humano, la representante comercial Katherine Tai convocó a un panel para obligar a México a aceptar las condiciones de Washington.CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El gobierno estadunidense de Joe Biden decidió elevar su diferendo con la administración de Andrés Manuel López Obrador en torno al maíz transgénico y al uso de glifosato, y llevarlo a consulta para arreglo de disputas, un procedimiento del Tratado de Libre Comercio México Estados Unidos Canadá (TMEC).
Ante la negativa del gobierno mexicano de retirar la prohibición de importar maíz transgénico para el consumo humano, contemplada en un decreto publicado el pasado 14 de febrero, la Representante de Comercio de Estados Unidos, Katherine Tai, convocó a un panel para obligar a México a aceptar las condiciones de Washington.
“Estados Unidos ha expresado de manera reiterada sus preocupaciones de que las políticas de México en materia de biotecnologías no están basadas en la ciencia y ponen en riesgo las exportaciones de Estados Unidos a México, en detrimento de los productores agrícolas”, sostuvo Tai, mientras anunciaba la convocatoria al panel.
El decreto del 14 de febrero modificó un primer decreto, más estricto en el control de transgénicos, publicado en diciembre de 2020. En el nuevo texto, el presidente López Obrador prohibió la importación de maíz transgénico destinado al consumo humano –pensando sobre todo en la tortilla, elemento central en la dieta de los mexicanos--, y ordenó la “sustitución gradual” del uso de glifosato. En este decreto, el mandatario se comprometió a que el gobierno presentará evidencias científicas para respaldar su decisión, adelantándose a un nuevo reclamo del gobierno de Estados Unidos.
Aunque el diferendo se está llevando a cabo entre Estados Unidos y México, los sectores de la agroindustria y de la biotecnología en el país, como el Consejo Nacional Agropecuario (CNA) apoyan la iniciativa de Washington para obligar el gobierno de López Obrador a dar marcha atrás.
Los opositores al maíz transgénico, como la alianza Sin Maíz No Hay País, han apoyado el decreto, y reclamado que los tratados comerciales como el T-MEC amenazan la soberanía nacional en temas importantes para el país.
De hecho, desde el decreto de diciembre de 2020, el gobierno de Biden no ha dejado de expresar a México su inconformidad por la regulación de las biotecnologías. Lo ha hecho durante pláticas con Raquel Buenrostro, la secretaria de Economía, y de manera formal, mediante cartas –como una del 30 de enero pasado, en el marco del T-MEC-- y consultas en el marco del TMEC.
“Estados Unidos ha dejado claro que consideraría todas las opciones, incluyendo pasos adelante para garantizar los derechos de Estados Unidos bajo el T-MEC, si México no regresa a políticas de biotecnologías basadas en la ciencia y en riesgos, y acordes a sus compromisos bajo del TMEC”, planteó la oficina de Tai.
Y agregó: “A través de la acción anunciada hoy, buscaremos que el gobierno de México resuelva por completo las preocupaciones de Estados Unidos”.