Cultura
Las micro-violencias, en el Foro Lucerna, con la obra “Hilos”, desde Londres
Tras su estreno en el emblemático teatro El Globo de Londres, la adaptación para la puesta mexicana en este espacio atravesó por un minucioso proceso, detallado por la actriz Alejandra Ambrosi.CIUDAD de México (Proceso).– Es directa, dura, pero también conmovedora y reflexiva: Se trata de Hilos, que parte de esas al parecer pequeñas agresiones sociales que todos hemos vivido en alguna ocasión, a estrenarse este 1 de octubre en el Foro Lucerna.
Es un monólogo original de la británica Abi Zakarian, joven dramaturga de origen armenio que ha llevado sus obras al icónico teatro The Globe -el mismísimo donde la compañía de William Shakespeare montó sus obras-, y el National Theater inglés.
Hilos -en inglés llamada Fabric- se estrenó en 2016 en Inglaterra y tuvo una gira por Gran Bretaña que abarcó a Gales y Escocia, obteniendo en la ciudad de Edimburgo de este último país el prestigioso galardón Scotsman Fringe First Award, que premia la excelencia en la escritura y el impacto emocional de las piezas teatrales.
Este factor se fortaleció durante el proceso de adaptación y traducción para su montaje en México, según se detalla más adelante.
La narrativa de Hilos, que tras su estreno estará cada martes en el Lucerna hasta el 17 de diciembre, inicia con el personaje de Ema en una habitación en medio de una mudanza y un recuerdo con el que curiosamente todos podemos empatizar: los nervios de la primera vez al conocer a la madre o padre de un novio (a). El querer agradar y dejar pasar ciertas acciones asociadas al menosprecio, micro-violencias provenientes de todos los sectores de la sociedad y que, al no ponerles un hasta aquí, llegan a escalar.
Para su estreno en México, la obra cuenta con Alejandra Ambrosi como productora, actriz (Ema) y codirectora junto a Gabriel Mata-Cervantes, director mexicano que a su vez realizó la traducción y adaptación de la puesta bajo el visto bueno de la misma Abi Zakarian.
Se lee sobre Hilos en el programa de mano:
La relevancia de Hilos no radica únicamente en su galardón, sino en el poderoso mensaje que lleva consigo. A través de un monólogo íntimo y profundamente emotivo, la obra explora las complejas realidades de la violencia de género, un tema que sigue siendo dolorosamente actual en nuestra sociedad...
En entrevista, Ambrosi relató cómo fue llegar a Hilos luego de una mancuerna actriz-director al lado de Mata-Cervantes en la obra 2:22. Una historia paranormal, montada el año pasado:
“Le dije que sólo dirigiría si lo hacia con él, me dijo que sí, y aunque tomó su tiempo le tomé la palabra. Así inició la búsqueda de textos. Yo quería un monólogo, no tanto por reto personal sino para desarrollar una historia lo más que pudiera en escena. Así encontramos Hilos y nos enamoramos del texto, tenía toda la relevancia porque te habla desde un lugar poético y sensible, hermoso y a la vez monstruoso. Y desde mi trinchera de actriz quise darle voz a quienes no la tienen o han sido calladas”.
Sobre el triángulo de dirección-producción-actuación, explicó que se dio por necesidad, pues la dirección la tenía clara, no así la producción y la actuación, y aconsejada por una colega productora decidió emprender con esos procesos. Al preguntarle sobre el “sello” de la obra, tomando en cuenta que hay distintas puestas que han abordado y aún abordan las violencias en escena, detalló:
“Fue justo una pregunta que nos hicimos Gabriel y yo, porque se ha hablado del tema desde la narrativa escrita, cinematográfica, y por supuesto teatral, pero creo que mientras siga siendo un problema nacional y a nivel mundial, va a seguir siendo relevante. Lo particular de esta obra es que va a la esencia, señala cómo estamos tejidos tanto en lo individual como en lo social, la violencia no es sólo de hombres contra mujeres, está en el tejido social, es un entramado de nudos que toca fibras muy sensibles en el tejido de nuestra propia identidad”.
Ambrosi también puso énfasis en el equipo de trabajo de Hilos, unas diez personas que se apoderaron del Foro Lucerna para dar vida a la puesta (según se apreció en ensayos), ya que parece una escenografía simple, pero al tocar Ema ciertos elementos les imprime a través de recuerdos.
La escenografía es de Emilio Zutia, la iluminación de Damián Martínez, vestuario de Giselle Sandiel, diseño de audio de Juan Pablo Villa, producción ejecutiva de Omar Flores López, y Mata-Cervantes como codirector de la puesta.
La puesta
Este último, entrevistado vía zoom -radica en Inglaterra desde hace varios años-, relató los detalles para la selección de la obra y su acercamiento con la dramaturga Abi Zakarian, dando pistas sobre el particular sello que le imprimió a Hilos para su montaje en México.
“Buscamos un texto que resonara para ambos hasta que di con Hilos a través de un video en donde se mencionaban ‘los diez mejores monólogos para actrices’, que además tenía una descripción como ‘una joya escondida’. Compré el libreto, lo leí y me pareció fuerte… debo decir que no fue nuestra primera opción, justamente por lo dura que puede ser, es como una declaración de víctimas. Fue hasta una segunda lectura que nos decidimos por el texto.
“Es una obra muy descriptiva sobre sensaciones, lo que ve Ema, lo que siente, lo que huele, ese es el texto. La anécdota del inicio en relación a los celos filiales es el nivel más bajo de micro-agresión, va subiendo hasta que hay un detonante”.
También detalló que con Zakarian pudo ajustar el proceso de adaptación y traducción, al tiempo que reveló para la puesta mexicana un detalle surgido de su condición de médico orientado al impacto emocional de las palabras en el sector salud. Así, Mata-Cervantes imprimió ese sello:
“Me apoyé en ese conocimiento para la traducción, seleccionando ciertas palabras que sé que tienen una carga emocional mucho mayor en la gente. La primera parte fue tener la traducción y adaptación, luego por zoom me reuní con Alejandra infinidad de veces para hacer lectura, porque algunas palabras se leían bien en el texto pero en voz alta no tenían el mismo impacto.
“También trabajamos el personaje, identificar las emociones en cada momento, y ya que tuvimos toda esa construcción con la definición del personaje y lo que nos gustaba, me fui a Ciudad de México y trabajé con Alejandra. Trasladamos todo lo emocional a lo físico, y al final hicimos un gran trabajo en equipo”.
Mata-Cervantes enfatizó su labor como codirector, buscando que se entendiera la historia, que la actuación de Ambrosi se viera y fuera bien contada, creíble, debido a la historia misma, para finalizar:
“La belleza de la obra radica, primero, en que es teatro, y el teatro es un espejo para que la sociedad se vea… en Grecia el teatro tenía la función de educar, y creo que esta obra tiene algo de eso sin pretenderlo. Hilos es un espejo enorme que hay que ver para ‘des hilar’, se narra esta historia para que la gente reflexione como individuo y colectivo”.
Hilos se estrena este martes 1 de octubre en Lucerna #64, esquina Milán, colonia Juárez, con apoyo de Fiesta Americana y Grupo Posadas, y con funciones cada martes hasta el 17 de diciembre.