Libros de texto gratuitos
Caniem se deslinda de discusión sobre libros de texto; “ninguna editorial agremiada participó”
La Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana (Caniem) se deslindó de errores y omisiones en los libros de texto gratuitos, y aclaró que ninguno de sus agremiados participó en su elaboración.CIUDAD DE MÉXICO (apro).– Ante el debate y discusión que se ha generado en torno a los libros de texto gratuitos, y cuestionamientos respecto a la participación y/o respuesta de la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana (Caniem), ésta se deslindó de errores y omisiones, y precisó que ninguna de las 32 editoriales agremiadas participó en esa edición.
Mediante un comunicado de seis puntos, la Caniem respondió que no tuvo papel en la criticada edición de los libros de texto, recordando en el primer y segundo punto la breve historia de la cámara con más de 60 años de existencia, y que agrupa –a la fecha– a 220 empresas dedicadas al desarrollo de contenidos, edición, producción, distribución de libros y revistas.
Se recordó que desde hace más de 25 años el estado mexicano ha contratado a diversas editoriales agremiadas (32 al día de hoy), para crear contenidos para los libros de texto gratuito, situación que sucedió hasta el año pasado, conforme a programas académicos desarrollados por la SEP y conforme a la exigencia de la ley, pero no en la edición criticada.
Se lee en el tercer punto:
“Este esquema garantizaba la bibliodiversidad y la libre selección de los libros por parte de más de 314 mil maestros en el país, con base en las particularidades de cada materia y de los entornos de alumnos y profesores. Los libros de texto creados por las editoriales afiliadas a la Caniem se distribuían en más de 30 mil escuelas secundarias y beneficiaban a más de 5.5 millones de alumnos en las escuelas secundarias públicas de todo el país, con ediciones reconocidas a nivel nacional e internacional por su rigor pedagógico y científico, así como por su actualización constante y alta calidad gráfica”.
En el cuarto y quinto apartado, la Caniem afirmó que la experiencia y conocimiento del oficio de las 32 editoriales que contrataba el gobierno, aunado a la “economía de escala” permitían ofrecer al Estado Mexicano libros a precios más bajos de su valor en el mercado, “hasta 10 veces mejores al precio de venta al público”; además de que todo ello representaba empleo para unos seis mil especialistas involucrados.
“Contrario a lo que algunos funcionarios públicos han expresado, ninguna editorial privada participa en la elaboración de los libros de texto gratuitos para los grados de primaria. Tampoco participa ninguna de nuestras empresas en los procesos de impresión y distribución de estos libros”.
Finalmente, buscaron recordar a la opinión pública que la industria editorial es un pilar en el desarrollo cultural y educativo del país, además de hacer un “guiño” al estado mexicano:
“Hoy, como hace 60 años, estamos en la mejor disposición de seguir trabajando con las autoridades educativas para impulsar la educación y el aprendizaje en México”.