Kraftwerk
Kraftwerk, gala de synth pop en el Pepsi Center
Frenéticos aplausos ensordecedores de pasiones saciadas colmaron el recinto en casi dos horas de magistral show bajo los ensueños electrónicos de Kraftwerk.CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La legendaria banda alemana Kraftwerk hizo vibrar en una gala de música electrónica a 7 mil 700 fans reunidos en el Pepsi Center del WTC de esta ciudad.
En el show --casi íntimo que se puede gozar en el Pepsi-- emergió Ralf Hütter, Fritz Hilpert, Henning Schmitz y Falk Grieffenhagen, comandando plataformas astrales para electrizar a sus fieles seguidores velozmente hipnotizados.
La producción edificó, de principio a fin, el viaje conceptual que caracteriza a la agrupación de estilo electrónico y Synth Pop surgida en 1970 en Düsseldorf, Alemania. Una gigantesca pantalla a telón de fondo ilustraba cada uno de los cortes, haciendo alucinar a los respetables en una travesía de arte digital, ensueños tecnológicos, computadoras y robots.
Los intensos sintetizadores calaron en los corazones del público, congregando a una diversidad generacional, viéndose desde la vieja guardia hasta una nueva oleada adoradora de la mítica agrupación germana. A los respetables se les observaba bailando, brincando, aullando, aplaudiendo cada tema, arrancando en apertura “Numbers” y “Computer World”.
El delirante recital avanzó en “Home Computer”, viéndose en la plasma céntrica a la nave cósmica tripulada por Kraftwerk aterrizando en México al ritmo de “Spacelab”. Los integrantes al igual que la pantalla fungieron como un lienzo colorido de lumínicas visiones futuristas oscilando en “Airwaves”, “The Man-Machine” y “Electric Café”.
“Autobahn” hizo revivir la memoria del histórico “vocho” de la marca automotriz teutona VW siendo delineado en gráficos alusivos computarizados en el manto escénico. Caló la sensibilidad de “Computer Love” y la aclamada “The Model”.
El espectáculo brindó un recorrido ágil, sin pausas, resonando “Neon Lights”, “Geiger Counter” y “Radioactivity”. Sin faltar, movió las emociones “Tour de France” incluyendo su “Étape 2”.
Las resonancias encaminaron en “Trans-Europe Express” y la clásica “The Robots”, en aparente culminación enloquecedora. El ensamble retornó obsequiando “Planet of Visions”, “Boing Boom Tschak” y en finiquito inexorable “Music Non-Stop”.
Uno a uno los artistas descendieron de sus estilizados estrados en reverencias y alzando las manos en señal de satisfactorio adiós. Frenéticos aplausos ensordecedores de pasiones saciadas colmaron el recinto en casi dos horas de magistral show bajo los ensueños electrónicos de Kraftwerk.