Festival Internacional Cervantino
En medio de una velada mágica en el Cervantino, Teresa Salgueiro hace un llamado a la paz
La intérprete y autora cantó piezas de Portugal a Chile, de los poemas del Premio Nobel José Saramago a “El hijo del pueblo”, de José Alfredo Jiménez, así como algunas canciones antiguas de su país.GUANAJUATO, Gto. (apro).- Arreglos fuera de lo convencional y una voz prodigiosa hicieron la magia para una noche de recorrido musical por los continentes, a cargo de la cantante portuguesa Teresa Salgueiro, invitada por tercera ocasión al Festival Internacional Cervantino, desde donde hizo un llamado a la paz.
Palabras más o menos, “debemos ser conscientes de que hay que estar del lado de todas las víctimas de la violencia”, dijo desde el escenario del Teatro Juárez, en un momento tan convulso del mundo, un mundo que nunca ha estado en plena paz.
Salgueiro ha correspondido con creces a la hospitalidad cervantina y guanajuatense, que la ha llevado a sus principales escenarios: en la Alhóndiga de Granaditas, todavía como la voz del conjunto Madredeus, y posteriormente ya como solista en dos presentaciones en el Teatro Juárez, la primera para interpretar fado (género portugués de tono melancólico) y la segunda, la noche del martes 17.
En esta noche, la intérprete y autora cantó piezas de Portugal a Chile, de los poemas del Premio Nobel José Saramago a “El hijo del pueblo”, de José Alfredo Jiménez, así como algunas canciones antiguas de su país.
Al terminar el espectáculo, la cantante se tomó el tiempo para firmar sus discos y tomarse fotografías con una larga fila de admiradores que la han seguido tanto en este escenario como a través de su discografía, inicialmente con Madredeus y después como solista.
El recorrido fue armonioso e hipnotizante gracias a la voz de Teresa y el acompañamiento de sus músicos, apenas los necesarios: acordeón, percusiones, contrabajo y guitarra.
En uno de los momentos más cercanos con el público, Teresa Salgueiro habló de lo difícil que le resultó elegir una canción del dolorense José Alfredo Jiménez, a quien quiso interpretar esta noche con motivo del aniversario de su fallecimiento, del que se cumplen 50 años en este 2023.
También agradeció la presencia en el teatro de Paloma Jiménez, hija del cantautor, ante quien cantó “El hijo del pueblo”.
En esta parte de temas latinoamericanos (que ya ha llevado a grabación con el disco “La golondrina y el horizonte”) se hizo escuchar con los temas “Gracias a la vida”, de la chilena Violeta Parra; “Fina estampa”, de la peruana Chabuca Granda, y la “Canción mixteca”, del también mexicano (nacido en Oaxaca) José López Alavez.
Tras una primera parte de canciones antiguas y temas latinoamericanos, la vocalista pasó a interpretar canciones basadas en poemas del escritor nacido en Azinhaga, Portugal, José Saramago (1922-2010), Premio Nobel de Literatura en 1998 y autor de las novelas “Memorial del convento”, “El evangelio según Jesucristo” y “Ensayo sobre la ceguera”, entre otras obras.
Uno de estos poemas dice así en su traducción al español:
“Oigo gritos desde lejos
Dice la voz del amor;
La alegría del cuerpo
El olvido del dolor.
Los vientos se han reunido
El verano se nos ofrece
Cuántos frutos, cuántas fuentes
Además del sol que nos calienta…”.