CIUDAD DE MÉXICO (proceso.com.mx).- Eulalio Cervantes Galarza, mejor conocido como "Sax" e integrante de la agrupación mexicana "La Maldita Vecindad y los hijos del quinto patio", murió este domingo víctima de covid-19.

A través de un comunicado publicado por la Maldita Vecindad y firmado por la esposa del músico se dio a conocer el deceso del músico de 52 años.

Su muerte conmocionó la mañana de este domingo al gremio artístico y musical, especialmente al del rock, que ha dado muestras de afecto a quien fuera esposa del saxofonista, Jessica Lanfranco Landero, y a los miembros de la Maldita Vecindad.

Agrupaciones como Panteón Rococó, Molotov y Café Tacvba, y el periodista y crítico musical Chava Rock fueron de los primeros en lamentar el deceso, a los que le siguieron otros mensajes de usuarios como el @megabuma donde se afirmó que “con la muerte de Sax, también muere La Maldita Vecindad”.

Hace dos semanas, el mismo Sax confirmó en redes sociales que había dado positivo a Covid-19 y que seguiría un tratamiento en su casa siguiendo las órdenes de médicos, pero el pasado lunes 8 de marzo se dio a conocer que, al bajar su niveles de oxigenación, tuvo que ser internado en un hospital de Cuautitlán Izcalli, Estado de México.

Dada la escasez de trabajo derivada de la pandemia, se emitió un comunicado difundido por varios músicos para que colegas, amigos y fanáticos apoyaran a los gastos hospitalarios.

Incluso Alex Lora grabó un mensaje que se subió a la cuenta oficial de Sax en YouTube donde el músico le mandó un mensaje solidario para que pronto “puedas rocanrolear con la banda”, y que sabía que tenía el proyecto de una nueva canción.

Lora se refería al tema “Otros nosotros”, tema que se lanzó el pasado 5 de marzo (en la cuenta del fotógrafo Daniel Aguilar). La canción sería, muy probablemente, producto de un próximo disco.

Uno de los últimos conciertos de La Maldita Vecindad y Los Hijos del Quinto Patio se realizó en noviembre de 2019, en la Arena Ciudad de México, en donde se rindió tributo a los estudiantes del movimiento estudiantil de 1968 y a los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa. “¡Nunca los olvidamos!”, gritó la banda ante 14 mil 839 asistentes.