GUADALAJARA, Jal. (apro).- El Juez Décimo Sexto de Control, Gildardo Joel Landeros Parra, vinculó a proceso y dictó prisión preventiva oficiosa durante dos años a los únicos dos detenidos que habrían participado en el atentado con explosivos contra elementos de la fiscalía y de Tlajomulco; familiares señalan que son chivos expiatorios.

Los hombres identificados como Sergio Julián “N” y Samuel “M”, de acuerdo con la carpeta de investigación 51844/2023, son señalados por los delitos de homicidio calificado,  homicidio calificado en grado de tentativa contra representantes de la autoridad, daño en las cosas y asociación delictuosa.

Blanca, hermana de Samuel, aseguró que los dos señalados son inocentes y fueron detenidos sin pruebas.

Indicó que se encontraban en el lugar, "y solo porque no les pasó nada a ellos, los detienen".

Detalló que su hermano -quien construía un centro de rehabilitación en la zona- y Sergio acudieron al sito porque Óscar, dueño del predio, quien falleció por la explosión, les avisó que ahí estaba la autoridad y que debía abrirles el paso.

Samuel le dijo que el vehículo no podía “darse la vuelta”, por lo que les recomendó que ingresaran a su predio por estar más ancho y largo.

“Él se retira a abrirle el paso para que la patrulla diera vuelta, al momento en que da vuelta y él se encamina sucede lo de la explosión por eso a él no le pasa nada", relató Blanca.

Recuerda que cuando Samuel y Sergio eran atendidos en la Cruz Verde Tlajomulco, elementos de la Fiscalía Estatal los detuvieron sin decirles porqué.

Hasta después se enteraron que a ambos los acusan de colocar los explosivos.

Por ello, el 19 de julio, acudieron a la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Jalisco (CEDHJ) a presentar una queja, la cual quedó registrada con el número 1760/23.

De acuerdo con el visitador del organismo, Javier Perlasca, los familiares señalan que cuando Samuel y Sergio eran atendidos en la Cruz Verde Tlajomulco,  elementos de la Fiscalía Estatal los detuvieron sin informarles el motivo.

La CEDHJ  ya solicitó la información a las autoridades involucradas, y pide a los detenidos ratificar la queja.

El atentado que dejó seis fallecidos y 15 lesionados ocurrió el pasado 11 de julio, en la colonia Larios a 2.5 kilómetros de la cabecera municipal de Tlajomulco, cuando los elementos acudieron presuntamente tras una denuncia anónima que recibió un colectivo de desaparecidos que afirmaba que en ese punto había una fosa clandestina.