CIUDAD DE MÉXICO (proceso.com.mx).- La ruta ribereña, entre Reynosa y Río Bravo, Tamaulipas, vivió una noche de balaceras que activó las alertas de seguridad en el aeropuerto más importante de la zona y dejó una panorámica al amanecer de vehículos y autobuses perforados, así como tres personas abatidas a tiros.

Las refriegas iniciaron frente al fraccionamiento El Campanario, en las proximidades del puente internacional de Reynosa a Pharr, Texas, que, con los protocolos activados, obligó a la cancelación del último vuelo del viernes y el cierre del aeropuerto.

El vuelo cancelado es el nocturno que va de Reynosa a Ciudad de México, se anunció al rededor de las 22:00 horas, sin que durante la noche fuera autorizada la realización de vuelos.

La carretera Reynosa-Matamoros quedó bloqueada cuando los tripulantes del convoy compuesto por unas 30 camionetas modificadas, de las conocidas como monstruos, detuvieron tráileres y camiones de carga para atrincherarse.

De acuerdo con los informes oficiales, proporcionados por la Fiscalía General de Justicia en la entidad, el saldo preliminar es de tres muertos, uno de ellos sería uno de los atacantes y dos más, civiles que transitaban por el lugar al momento de los enfrentamientos.

La actuación informativa de las autoridades ha provocado numerosas críticas en redes sociales, debido a que fue hasta la mañana de este sábado cuando la vocería de seguridad alertó del enfrentamiento, cuando este llevaba horas de haber cesado.

Minutos después del aviso tardío, la misma vocería dio a conocer que la carretera estaba liberada.