TOLUCA, Edomex. (apro).- El Tribunal Electoral del Estado de México (TEEM) sancionó, por segunda ocasión, a Alejandra del Moral, candidata de la coalición “Va por el Estado de México”, por la difusión de imágenes de menores en su campaña.

Aunque se trata de una reincidencia, pues el pasado 15 de marzo ya se había sancionado a la priista con una amonestación pública por la misma razón, el pleno determinó que la nueva falta es “leve”, debido a que Morena, el partido denunciante, no presentó pruebas suficientes para acreditar que se vulneró el derecho superior de la niñez. Por tanto, de nueva cuenta ordenó sancionar a la abanderada con una amonestación pública.

Por otra parte, los magistrados confirmaron los actos anticipados de campaña de Delfina Gómez, candidata común de “Juntos Hacemos Historia”, con la colocación de un espectacular antes del inicio formal de la campaña, pero aclararon que la responsabilidad fue de la empresa Publicidad en Plásticos Maquinados y Transportes SA de CV que se adelantó, a quien se impuso amonestación pública.

En otro sentido, determinaron que Adolfo Cerqueda, alcalde de Nezahualcóyotl, incurrió en desvío de recursos públicos al acudir a un evento de precampaña de Delfina Gómez, celebrado el jueves 19 de enero.

El pleno consideró que con su asistencia a un evento proselitista en día hábil violó los principios de equidad y neutralidad; pese a que solicitó licencia, los magistrados acreditaron uso indebido de recursos públicos, ejercicio indebido del cargo, desatención de sus responsabilidades públicas, y la posibilidad de influir en la ciudadanía por su claro apoyo a la candidatura morenista.

En sentido similar se sancionó al alcalde de Tepetlaoxtoc, Ismael Olivares Vázquez, quien a decir del TEEM incurrió en uso indebido de recursos públicos por su asistencia a un evento proselitista de Alejandra del Moral el 26 de enero pasado, también un día hábil.

Para los magistrados, al ostentar la titularidad de la alcaldía, Olivares Vázquez no se puede despojar de ese carácter y actuar como un ciudadano más en actos proselitistas, ni puede desconocer o ignorar la autoridad de su investidura o percepción que la ciudadanía le reconoce, pues su cargo adquiere una connotación que trasciende a la sociedad y, en ese sentido, puede incidir en la intención del voto.

En ambos casos, el Tribunal no sanciona ni a los partidos políticos ni a las candidatas, al considerar que no son responsables de las acciones de terceros.