TUXTLA GUTIÉRREZ, Chis. (proceso.com.mx).– Sabina Ross Pérez, originaria de Guatemala, busca a su hermano. Era un adolescente aún, tenía 14 años, cuando salió de su casa para migrar al lado mexicano.  

Pero lo que supo es que Elías Ross Pérez no fue más allá de Chiapas, se quedó a trabajar en un rancho de Chiapas. Salió en el año 2007 de Nentón, Huehuetenango, Guatemala.  

Venía con su tío, quien regresó pocos meses después a Guatemala y avisó que Elías no había querida regresar, que se había quedado a trabajar en un rancho de Tapachula.  

Dice desde hace 15 años no saben nada de él; sus padres y sus hermanos han llorado su ausencia, su desaparición, pues temen que algo trágico pudo haberle ocurrido.

Sabina, hermana de Elías, dice que desde que su tío regresó, su madre empezó a enfermarse y decayó su salud ante la desaparición de su hijo.

Aunque muchas veces le pidieron a su tío darle una pista para ir a buscar a Elías, éste terminó por hartarse y los amenazó con que ya dejaran de acosarlo y que fueran a buscarlo a Tapachula.

Sabina participa ahora en la 16 Caravana de Madres de Migrantes Desaparecidos y Desaparecidas. Es la primera vez que ella participa, pero su hermana ya participó antes en dos caravanas sin haber podido encontrar a Elías.  

Isabela desapareció un 10 de mayo

Marcela Melchor Ramos, originaria de Ixcan, Playa Grande, muy cerca de la frontera con México, es otra de las mujeres que participa en esta caravana.

Marcela busca a su hermana Isabela Melchor Ramos, quien desaprecio hace 15 años en Chiapas.

Su hermana trabajó muchos años en Cancún, pero el último mensaje que ella envió a su casa fue el día 10 de mayo, Día de las Madres; le dijo a su progenitora que ya estaba en Chiapas y que pronto estaría con ellos, pero nunca les dijo en que parte de estos 74 mil kilómetros cuadrados estaba.

Marcela dice que su hermana Isabel dejó a tres pequeñas que ahora ya están grandes y que siempre lloran la desaparición de su madre.

“Perder un ser querido no es tan fácil superarlo. Pedimos a las autoridades que nos ayuden. Ella desapareció en Chiapas. Lo que sabemos es que en Chiapas desaparecen muchos migrantes, hombres y mujeres. Cada madre que estamos acá una es tragedia diferente que hemos vivido y sufrido”, dice Marcela.

Al igual que refiere Sabina, la hermana de Elías, Marcela dice que su hermana Isabela no tenía la intención de llegar a Estados Unidos. En ambos casos, señalan que el objetivo era trabajar en esta región del sur del país.

Eva Ramírez, originaria de Honduras y líder del comité de madres que buscan a sus hijos migrantes desaparecidos y desaparecidas, dice que las mujeres empiezan a desaparecer desde que inicia la ruta migratoria del otro lado de la frontera sur mexicana.

Señala Eva Ramírez que la frontera sur mexicana es una imagen dolorosa para todas las madres, padres, hermanos, hermanas, o hijos e hijas que vienen en esta 16 Caravana de Madres.

Dice que es en la frontera sur mexicana donde empieza la pesadilla por buscar el sueño americano. Que los migrantes se enfrentan una fronteriza militarizada, lo que los hace buscar rutas de alto riesgo, donde sufren asaltos, violaciones, asesinatos y desapariciones forzadas.

Menciona la activista hondureña que muchas mujeres migrantes tienen miedo a revelar su dolor y su sufrimiento. No dicen que están siendo explotadas sexualmente. Pues están amenazadas por los tratantes de mujeres.

Que las mujeres, dice Eva, están atrapadas en una red de trata. Las mujeres son engañadas con ofertas laborales, pero terminan siendo víctimas de estas redes de explotación sexual.