CIUDAD DE MÉXICO (apro). – Han pasado casi 4 meses desde que desapareció Armando “N”, de 57 años de edad. Lo secuestraron personas que se identificaron como parte de “La Empresa”, organización criminal que opera en la zona de Ecatepec, Estado de México.

Desesperada, su esposa Graciela pide apoyo a los gobiernos federal, estatal y municipal a fin de esclarecer los hechos y lograr la pronta localización de su pareja.

En entrevista exclusiva con Apro, Graciela relató que su esposo fue secuestrado el 29 de enero pasado y, pese a haber cumplido con las condiciones de rescate, a la fecha no saben nada de él.

“Ahorita no sabemos qué ha pasado, qué le hicieron. Las investigaciones deberían ser más prontas, entre más pasa el tiempo las pistas y líneas de investigación se van debilitando”, dijo.

Las autoridades se encuentran rebasadas ante los miles de casos y generalmente quedan en la “impunidad”, expresó.

Indicó que el gobierno no les da la importancia debida a los casos de desaparición en México aún ante las recomendaciones que transmitió la ONU en la visita del Comité contra la Desaparición Forzada, en noviembre del 2021.

Entonces, los especialistas señalaron que es de vital importancia fortalecer instituciones, facilitar procesos de búsqueda, priorizar las investigaciones de campo, además de prestar apoyo y asesoría durante todo el proceso a las víctimas indirectas.

“Si el gobierno federal no voltea a ver a los municipios para indagar estos casos en los que frecuentemente los mismos miembros de las policías municipales se encuentran involucrados con las células delictivas y se les brinda el apoyo para dar solución y erradicar este problema, tampoco será de interés para los municipios”, destacó.

Pidió realizar una investigación a fondo y que se retomen todas las líneas de investigación con el “profesionalismo, la solidaridad y la empatía” que permitan la captura de los responsables y el regreso de su esposo a casa.

Regresando a su historia, Graciela contó que el 28 de enero de 2022, Armando desayunó con ella. Alrededor de las 13:30 horas fue a casa de sus papás. Después fue a una imprenta en la calzada Legaria y más tarde a la escuela “KENN WILBER”, donde cursaba la carrera de psicología, daba terapia de acupuntura y tomaba un taller de desarrollo humano.

La escuela, ubicada en Jardines de Morelos Ecatepec, Estado de México, fue el último lugar al que asistió Armando, de las 17:00 a las 21:00 horas, de acuerdo con lo corroborado por dos profesores y tres compañeras. Después no supo nada de él.

“El sábado 29 de enero le envíe mensaje de WhatsApp a las 6:34 horas para comentarle que íbamos a salir a desayunar con unos amigos, le pregunté si quería ir. Nunca contestó el mensaje”.

El lunes 31 a las 12:30 horas le llamó una persona diciendo que era de “La Empresa”, una organización que controla la plaza de Ecatepec de Morelos, y le dijo que tenían a Armando secuestrado.

Tras un tortuoso periodo de negociaciones, el 11 de febrero se realizó el pago del rescate exigido. Aún así, su esposo no ha vuelto.

“Nuestra vida se encuentra llena de dolor por no saber nada de mi esposo. Toda mi familia y yo vivimos con miedo, dolor e incertidumbre. No tenemos paz desde el día de su desaparición”, contó Graciela.