GUADALAJARA, Jal. (apro).- Luego de tres hechos violentos que se registraron ayer en igual número de municipios de Jalisco que limitan con Michoacán, el gobernador Enrique Alfaro justificó que se debe a la difícil situación que se vive en el país en el tema de inseguridad, generada por la delincuencia organizada.

“Se trata de un momento complejo para el país, y particularmente para los municipios que colindan con estados donde hay problemas delicados y complejos en materia de violencia, particularmente los estados de Michoacán, Zacatecas y Colima, por lo que en esos municipios se mantendrán los operativos especiales que han funcionado bien”, dijo.

Además, anunció que se va a reforzar la presencia de la policía del estado con operativos especiales en los tres municipios donde se registraron los hechos violentos: Jocotepec, Tamazula de Gordiano y Manzanilla de La Paz.

En Jocotepec, asesinaron a dos policías municipales, dispararon contra paramédicos y bomberos mientras atendían un choque. Unos sujetos a bordo de un vehículo, los balearon y se dirigieron a Michoacán.

En Tamazula, incendiaron dos tráileres a la altura de La Garita, sobre la carretera que va a Jiquilpan, Michoacán.

En tanto, en el municipio de La Manzanilla de La Paz quemaron un auto con armas.

Enrique Alfaro aclaró que no hubo ataques contra la población civil, por lo que no es necesario suspender actividades. 

Su comentario se origina después que el gobierno de Tamazula pidió a los ciudadanos no salir a la calle.

“No hay autoridad municipal que tenga la facultad de convocar a suspender actividades, no podemos caer en el pánico y el miedo, con información que no siempre es precisa”, señaló Alfaro.