ZACATECAS, Zac. (apro).- El fiscal del Estado, Francisco Murillo Ruiseco, informó la detención de dos mujeres por su presunta participación en el caso de los cinco jóvenes privados de la libertad por criminales y hallados cuatro de ellos asesinados, mientras que una joven que sigue desaparecida.

La Fiscalía hizo públicos además los retratos hablados de dos hombres, presuntos responsables de la privación ilegal de la libertad y del asesinato de los cuatro jóvenes, tres de ellos estudiantes universitarios, y de la desaparición de Valeria.

Los jóvenes Irving Castor Reyes y Natalio Torres Balderas, ambos de 21 años,  Luis Ángel Manzanares Cortés y  Alexia Monserrat Abrego Esqueda, de 25, y  Valeria Landeros Calderón, de 24, fueron privados de la libertad por criminales la madrugada del sábado 12 de febrero cuando salían de un centro nocturno en la ciudad de Zacatecas, llevándolos a bordo de una camioneta propiedad de las víctimas.

Cuatro de los jóvenes, originarios del municipio norteño de Francisco Murguía, mejor conocido como Nieves, fueron hallados asesinados y sus cadáveres en la caja de una camioneta, misma en que se los llevaron, encontrada abandonada en la entrada al rancho privado El Marengo, a un costado de la carretera estatal número 181 en el municipio de Genaro Codina, ubicado a 34 kilómetros de la ciudad de Zacatecas.

A cinco días de ocurridos los hechos y tras la exigencia de justicia por parte de las familias, en un video mensaje difundido en las redes sociales, el fiscal de justicia Francisco Murillo dio a conocer, sin dar mayores detalles, que hay dos mujeres detenidas al cumplimentarse una orden de aprehensión en su contra tras acreditar su participación en este caso.

El fiscal detalló que la denuncia por la privación ilegal de la libertad de estos jóvenes se presentó a las 4:36 horas del sábado 12 por una de las víctimas-- una joven que logró escapar--, quien proporcionó los datos para iniciar la carpeta de investigación y a la que se le otorgaron medidas de protección.

A decir de Murillo Ruiseco, la Fiscalía Especializada en Atención a Desaparición Forzada y Desaparición Cometida por Particulares elaboró en un primer momento las fichas de búsqueda, con fotos y datos de los jóvenes, pero que no las difundieron presuntamente por la negativa de las familias.

Desde ese momento, relató, la Fiscalía Especializada recabó los datos de telefonía celular de las víctimas y policías de investigación se abocaron a la búsqueda de testigos, posibles rutas de escape y cámaras de videovigilancia en las inmediaciones de la comunidad la Escondida, ubicada al norte-poniente en la periferia de la ciudad de Zacatecas, donde se ubica el centro nocturno de donde plagiaron a las jóvenes.

El fiscal de Justicia informó que fue hasta a las 11:30 de la noche del sábado que se difundieron las fichas de búsqueda y se activó el protocolo Alba para la búsqueda de las dos jovencitas, además de boletinar el vehículo en fueron raptadas las víctimas.

Para la búsqueda inmediata de los jóvenes, dijo, se solicitó la colaboración de la Guardia Nacional, Secretaría de Seguridad Pública del estado y policías municipales, así como el apoyo del C5 para el seguimiento del vehículo en que fueron privados de la libertad.

Murillo Ruiseco detalló que en la comunidad La Escondida se realizó un operativo de búsqueda con la participación de 60 agentes de la Policía de Investigación y militares, e incluso se usaron drones para revisar la zona.

Las familias de las víctimas comenzaron el lunes 14 a recibir llamadas de extorsión, ofreciendo supuestos datos sobre el paradero de los jóvenes a cambio de dinero, por lo que se rastreó el número telefónico, pero no se obtuvieron resultados, dijo el fiscal.

Hasta el lunes 14 la Fiscalía de Zacatecas solicitó apoyo a la Fiscalía de Aguascalientes para elaborar los retratos hablados de dos hombres que presuntamente estarían ligados a los hechos. Las imágenes fueron digitalizadas hasta el martes 16 por la Fiscalía General de la República.  Ese mismo día se solicitó al C5 videograbación de la zona donde ocurrió la privación ilegal de la libertad de los muchachos.

Francisco Murillo afirmó que ese día solicitaron a las 32 fiscalías de justicia del país su colaboración para la búsqueda de Valeria, la quinta víctima que continúa desaparecida, y "no cesaremos en su búsqueda hasta su localización".

Transcurrido tres días de interpuesta la denuncia por este caso, informó el fiscal, se realizó el martes un cateo en un inmueble, probablemente relacionado con los hechos, en la comunidad La Escondida. En el cateo participaron cien agentes de la Comisión Nacional Antisecuestros, policía de investigación, peritos, ministerios públicos, militares y guardias nacionales.

En esta diligencia, agregó, se logró levantar y obtener  “cincuenta indicios” que pueden ser útiles a la investigación, los cuales están bajo estudio por Servicios Periciales.

El fiscal de Justicia sostuvo que los avances de investigación arrojan más de 70 actos de investigación, un operativo inicial de búsqueda, un cateo, dictámenes de retrato hablado de dos sujetos y dos mujeres detenidas por tras obtener órdenes de aprehensión.

La Fiscalía Especializada en Derechos Humanos ha dado acompañamiento legal y psicológico a la denunciante y a las familias de las víctimas mientras que la Comisión de Atención a Víctimas asignó tres asesores jurídicos y dos psicólogas a los familiares, además de brindarles apoyo económico para gastos funerarios.