AGUASCALIENTES, Ags. (apro).- Autoridades estatales y federales anunciaron investigaciones sobre el accidente ocurrido la mañana del 17 de noviembre, cuando el helicóptero Águila 1, en donde viajaba Porfirio Sánchez Mendoza, titular de la Secretaría de Seguridad Pública de Aguascalientes, cayó estrepitosamente hasta quedar destrozado. En la aeronave viajaban otros cuatro hombres que también fallecieron.

Dos horas después de lo ocurrido, la gobernadora, Teresa Jiménez, declaró en una rueda de prensa que “todo parecía indicar que se trataba de un accidente”, sin detallar evidencias para sostener dicha afirmación.

Alrededor del desplome se conocieron otras versiones de hechos hasta ahora no constatados, como la posible participación de un grupo de hombres armados que, montados en motocicletas, persiguieron a la aeronave, dispararon e hicieron blanco en una de las hélices.

A diferencia de ayer, cuando ocurrió el desastre, el gobierno de Aguascalientes ha moderado su postura y se ha referido al hecho como un caso cuya investigación podría tardar meses y hasta entonces se conocerá la causa del desplome, aunque han dicho que “suponen” se trata de un accidente, sin afirmarlo.

El recién nombrado encargado de despacho de la Secretaría de Seguridad Pública estatal, Manuel Alonso García –originario de Puebla– explicó que será la Agencia Federal de Aviación Civil, a través de la Comisión Investigadora y Dictaminadora de Accidentes, la encargada de realizar las investigaciones.

Hasta ahora la Fiscalía del estado no se ha posicionado sobre el hecho; pero esta mañana, durante su conferencia matutina, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que el caso será atraído por la Fiscalía General de la República (FGR), a la que se le entregarán los indicios recopilados por la Fiscalía estatal.

El mandatario incluso afirmó que está por integrarse una comisión de expertos que trabajarán sobre el caso; y pidió no adelantar juicios.

Sobre la versión del ataque armado contra el helicóptero, dada a conocer por medios locales a través del testimonio de un presunto testigo, Alonso García aseguró que no existen pruebas suficientes –como cartuchos percutidos o llamadas de emergencia– para determinar que la aeronave fue atacada.

Tampoco está descartado que se trate de un atentado.

A las 15:00 y 16:00 horas de este viernes, el gobierno estatal celebró una misa y un homenaje póstumo para Porfirio Sánchez Mendoza, Olegario Andrade Zamorano, Víctor Manuel Valdez Sánchez, Juan Humberto Rincón Martínez y Alejandro Serafín Guerrero.