PACHUCA, Hgo. (apro).- La Procuraduría General de Justicia de Hidalgo confirmó que el cuerpo de Ana Karen García Díaz, desaparecida desde el domingo tras ser arrastrada por la corriente de las lluvias en Tlalnepantla, Estado de México, fue localizado en las aguas negras de la presa Endhó, en Tula.

El cadáver fue hallado semidesnudo, sólo con una blusa y un zapato tenis, tipo Converse, morado. Al momento del rescate, los peritos detectaron que los rasgos fisonómicos coinciden parcialmente con los de Ana Karen, por su complexión física y estatura. No obstante, esperaron hasta el reconocimiento por parte de la familia para confirmar que se trate de la menor.  

Tras acudir a la agencia del ministerio público en Tula esta noche para reconocer si correspondía al de la joven de 19 años, que había sido buscada en operativos conjuntos entre las dos entidades durante tres días, los familiares corroboraron la identidad e iniciaron los trámites para recuperar el cuerpo. 

De acuerdo con el reporte que recibió el número de emergencias 911, cerca de las 11 de la mañana pobladores de la comunidad de Santa Ana Ahuehuepan, en Tula, divisaron un posible cadáver que flotaba en las aguas negras del desagüe. 

Al arribar al lugar, los elementos de la procuraduría acordonaron el sitio y rescataron los restos de una joven, complexión robusta, de un metro 65 de estatura, que sólo portaba una blusa y un tenis. 

Ana Karen desapareció el domingo a la altura de la calle Club Alpino Arqueros, después de que la corriente del agua la arrastrara junto a su novio Denis, quien logró salvarse porque se agarró de un árbol y fue rescatado.  

Ambos quedaron a la deriva cuando intentaron cruzar la Primera Sección de la colonia Lázaro Cárdenas, que estaba inundada. La motocicleta en la que ambos viajaban fue localizada por elementos del Estado de México. También un equipo de buzos recorrió el drenaje de la avenida La Presa y el Río de los Remedios en busca de la joven.  

En redes sociales se difundió una grabación en la que se muestra a Denis, de 23 años, agarrado de un árbol. Él, desesperado, pregunta a gritos dónde está su novia. “¡Ahí está, ya la salvaron! Agárrate tú. ¡Agárrate con las dos manos!”, le contestan para tranquilizarlo.   

Después de la identificación, la procuraduría de Hidalgo lo entregará a la familia, tras las diligencias correspondientes.