PACHUCA, Hgo. (apro).- La distribución de candidaturas para diputados locales y federales, senadores y presidencias municipales generó una fractura entre corrientes al interior del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) en Hidalgo, que acusaron imposiciones, irregularidades y falta de transparencia en los procesos para seleccionar a los contendientes.

Esta fisura ocurre a menos de dos años de que el morenismo llegara a la gubernatura estatal, con un expriista, el actual mandatario Julio Menchaca Salazar. Previamente, el partido fundado por el presidente Andrés Manuel López Obrador había ganado la mayoría legislativa desde 2018.

La confrontación entre grupos internos incluye al del gobernador; el diputado federal y aspirante al Senado Cuauhtémoc Ochoa Fernández –cuya carrera política creció al amparo del exsecretario de Gobernación durante la presidencia de Enrique Peña Nieto, Miguel Osorio Chong–; al que controla la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH), a cargo de los hermanos Gerardo y Damián Sosa Castelán, también conocido con el denominativo de La Sosa Nostra, y otro que agrupa a personajes que reclaman haber sido los fundadores de Morena y ser relegados por el priismo que, por el pragmatismo electoral de los dirigentes, se ha sumado al partido y acaparado las posiciones.

Desde que se dio a conocer el primer bloque de candidaturas, la militancia ha protestado por las designaciones, al acusar oportunismo y selección de cuadros no completamente identificados con las motivaciones originales para crear el partido, por su pasado en un PRI que, refieren, estuvo anquilosado por 93 años, hasta el relevo en la gubernatura en septiembre de 2022.

Estas inconformidades fueron exhibidas en eventos de Claudia Sheinbaum en Tulancingo y Mineral de la Reforma el 14 de enero, cuando hubo abucheos hacia Cuauhtémoc Ochoa, integrante de la fórmula al Senado, y La Sosa Nostra, organización que mantiene un cacicazgo en la UAEH desde la década de 1970 y que cuando el secretario de Gobernación Adán Augusto López Hernández, a quien apoyaban, no obtuvo la nominación a la presidencia, se sumaron a la candidatura de Sheinbaum.

Posteriormente, la selección, sin parámetros claros, a decir de exparticipantes en las internas, de los contendientes para el resto de cargos dejó manifestaciones en la sede estatal del partido y acusaciones de posibles prácticas corruptas por parte del dirigente estatal, el experredista Marco Antonio Rico Mercado, y el enlace de Sheinbaum en Hidalgo, el senador César Cravioto.

“Han engañado prometiendo procesos que no se cumplieron. Faltaron al estatuto y a las bases de la convocatoria”, expuso, en un pronunciamiento crítico, el exsubsecretario de Fomento y Normatividad Ambiental de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) Tonatiuh Herrera Gutiérrez, quien buscaba la candidatura morenista a la presidencia de Pachuca.

Además de exigir que se transparenten los procedimientos, reclamó: “No hemos transitado por esta vía para terminar nuevamente como en el PRD y con los mismos actores. Ya destruyeron ese proyecto, ahora vienen por éste”. Después, sentenció: “Debemos derrotar dos veces al PRI: una afuera y otra adentro”, en alusión a las formas en las que las anteriores prácticas del poder fueron incorporadas a Morena.

El reclamo no es exclusivo, se hizo extensivo en municipios y distritos de toda la geografía, desde San Agustín Tlaxiaca, Mineral de la Reforma y Pachuca, en la zona metropolitana, hasta Pisaflores y Jacala, en la Sierra Gorda; Tezontepec y Tula, en el Valle del Mezquital, y Huautla, Yahualica, Huehuetla y Huejutla, en la Huasteca, por mencionar algunos.

Entre los reclamos recurrentes está la anterior filia priista de los favorecidos con las candidaturas, entre ellos Ricardo Crespo Arroyo, expresidente del Comité Directivo Estatal del PRI, quien fue postulado para la diputación federal por Pachuca; Julián Nochebuena Hernández, exsubsecretario de Política Social y descendiente de una familia que ha mantenido control sobre Atlapexco desde la segunda mitad del siglo pasado, como aspirante a legislador local por el distrito 3, y el mencionado Cuauhtémoc Ochoa, a quien el Instituto Nacional Electoral le fijó como medida cautelar, mientras realiza una investigación, no hacer mención alguna de programas sociales durante su proselitismo, ante una acusación de su expartido de usar esto indebidamente.

Igualmente, reprochan que la elección de perfiles que han rotado en el poder municipal por otros partidos y nuevamente son promovidos.

Entre esta última categoría están ejemplos como José Alfredo San Román Duval, registrado para la alcaldía de Huejutla, quien ya ha ocupado el cargo en dos ocasiones previas, postulado por el PAN y Movimiento Ciudadano, y quien en 2004 fue expulsado de su primer partido porque, en conjunto con su cabildo, modificó su sueldo de 38 mil 406 pesos a 186 mil pesos, más del doble de lo que entonces ganaba el gobernador Manuel Ángel Núñez Soto (78 mil pesos).

Al gobernador Menchaca, a su vez, le han reclamado la supuesta imposición de perfiles afines como Jorge Alberto Reyes Hernández, Eduardo Medécigo Rubio y Zorayda Robles, exintegrantes de su gabinete que buscan las alcaldías de Pachuca, Mineral de la Reforma y Apan.

La Sosa Nostra, al PT

Adheridos al morenismo en Hidalgo desde la elección presidencial de 2018, el Grupo Universidad o La Sosa Nostra –antes corriente priista, a la par panista y luego a cargo de la administración estatal de Movimiento Ciudadano– acaparó las candidaturas del Partido del Trabajo, que también controla.

Su campaña se centra en la imagen de Claudia Sheinbaum y el eslogan nacional que “el PT también es 4T”, tras el relego en el partido oficial, del que habían obtenido candidaturas desde su alianza con la dirigencia nacional, a cargo de Mario Delgado Carrillo.  

Los cuadros de la Sosa Nostra están diseminados en las candidaturas a todos los puestos de elección para este proceso: Damián Sosa Castelán, al Senado; Adolfo Pontigo Loyola –exrector de la UAEH–, Salvador Sosa Arroyo –hijo de Damián– y Marisol Ortega López (alcaldesa de Tepeapulco con licencia), por las diputaciones locales, mientras que en alcaldías como la de Mineral de la Reforma y Pachuca registró a Jesús Osiris Leines Medécigo (actual legislador en Hidalgo) y Humberto Veras Godoy, también exrector.

El Grupo Universidad, que inició como grupo de choque del priismo a través de la organización porril Federación de Estudiantes Universitarios de Hidalgo (FEUH), aspira a capitalizar la inconformidad con las designaciones en Morena y obtener los votos de la izquierda, con la promoción de campaña de ser continuidad del proyecto del presidente López Obrador.