CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Familias buscadoras denunciaron que los gobiernos de la Ciudad y el Estado de México son omisos ante sus solicitudes de realizar una búsqueda metropolitana de personas desaparecidas en la zona de Xalatlaco-Ajusto, por lo que advierten: “Con o sin las autoridades, la llevaremos a cabo en las fechas establecidas, del 28 de febrero al 6 de marzo”.  

El miércoles 26 de febrero, las familias buscadoras se dirigieron a la jefa de gobierno y a la gobernadora del Estado de México, Clara Brugada y Delfina Gómez, para recriminarles su falta de profesionalismo y compromiso en la ejecución de una búsqueda generalizada en la zona metropolitana del país.  

Según declararon, en ambos territorios las autoridades argumentaron que se tiene un análisis de riesgos que imposibilita las condiciones de búsqueda en el lugar: “Mismo que sabemos, se generó con información de una zona diferente a la que se quiere explorar, demostrando con tantos errores que no conocen la región, que no les interesa realizar sus funciones fundamentales”.  

Los familiares consideran que esa negativa es alarmante, ya que habla de una falta de operatividad y control en territorios que se ubican a tan solo dos horas de la Ciudad de México.   

Por lo anterior, responsabilizan a las autoridades por cualquier agresión que puedan sufrir durante la jornada de búsqueda, ya que desde hace meses enviaron oficios y escritos para realizar búsquedas generalizadas desde un enfoque metropolitano; sin embargo, la Comisión de Búsqueda de Personas en la capital, el Estado de México y nivel nacional demostraron nulo interés en acompañar a las 81 familias que promueven esta iniciativa.  

Recordaron que el pasado 31 de enero Brugada instaló el Gabinete de Búsqueda de Personas Desaparecidas, acto que calificaron como una respuesta que busca simular una atención a la crisis de desapariciones que en la realidad no se está materializando.  

“Aquí sí lo denunciamos, la primera brigada metropolitana la hacemos desde las familias y desde los solidarios”, fueron las palabras que usó María del Carmen Volante, quien busca a su hija, Guadalupe Pamela Gallardo Volante, desaparecida el 5 de noviembre de 2017, en el kilómetro 13.5 de la carretera Picacho-Ajusco, en Tlalpan.  

Para ella y el resto las familias buscadoras, la omisión de las autoridades minimiza su necesidad ante una problemática que persiste, pues descartan los esfuerzos que realizan como víctimas indirectas para sistematizar información de hallazgos y desapariciones, demostrando que la coordinación entre las instituciones de ambos estados es “deficiente y al parecer nula”.  

Frente a la falta de respuesta y atención a sus necesidades, las familias buscadoras realizarán la jornada de búsqueda sin la presencia de las instituciones y con el objetivo de abarcar 14 puntos en la CDMX y 13 en el Estado de México, todos situados en la zona de Xalatlaco-Ajusto, donde han recibido el reporte de hallazgos de restos pertenecientes a 12 personas. 

En las labores, contarán con el apoyo de ciudadanos solidarios, entre quienes hay antropólogos, criminólogos y criminalistas, aunque reconocen que en la localización de sus seres queridos siguen haciendo falta manos dispuestas a escarbar la tierra, así como materiales y herramientas, en particular guantes de carnaza.  

Con determinación, los familiares hacen un último llamado a los gobiernos de Brugada y Gómez: Que, en caso de existir un hallazgo durante la jornada de búsqueda, no obstaculicen la identificación de restos y el avance de carpetas de investigación bajo el argumento de que las autoridades no estuvieron presentes.