CIUDAD DE MÉXICO (apro).- “Es un antídoto contra el cártel inmobiliario”, dijo la jefa de Gobierno, Clara Brugada, al inaugurar la Ventanilla Única de Coordinación Inmobiliaria, la cual según explicó, es un instrumento de carácter resolutivo, orientado a agilizar los trámites de desarrollo inmobiliario en la Ciudad de México.

Este miércoles, frente a empresarios del sector inmobiliario, la morenista aclaró que la Ciudad de México debe tener un desarrollo sustentable: “Queremos que se haga respetando los derechos de las comunidades; que se respete la voluntad de la gente; que se logre potenciar el desarrollo de las colonias y que genere un impacto positivo en la ciudad. No queremos, en esta ciudad, gentrificación”. 

Brugada detalló que la nueva ventanilla estará a cargo de la Secretaría de Planeación, Ordenamiento Territorial y Coordinación Metropolitana, encabezada por Alejandro Encinas. Además, contará con la intervención de las siguientes dependencias: Secretaría de Gobierno, Secretaría de Medio Ambiente (Sedema), Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil (SGIRyPC), Secretaría de Movilidad (Semovi), la Secretaría de Agua y la Contraloría General. 

“Los empresarios podrán saber, a través de esta ventanilla, el estatus de su trámite. Podrán resolver los problemas de manera directa y tendrán acompañamiento en todos los pasos y certeza jurídica en cada uno de los trámites solicitados”, dijo la dirigente local.

En el evento estuvo presente Encinas, quien se encargó de precisar las características de este instrumento:

• En este espacio se discutirá y analizará de manera colegiada, con cada uno de los promotores y desarrolladores inmobiliarios, los distintos proyectos de inversión que se tienen para poder detonarlos en las mejores condiciones, a la brevedad posible. 
• Todos los particulares, los inversionistas, van a poder dar un seguimiento continuo a sus proyectos con las dependencias encargadas de otorgar la viabilidad, los permisos y autorizaciones correspondientes a cada una de las áreas.
• Va a buscar, en primer lugar, simplificar los tiempos de respuesta, facilitando y agilizando los trámites administrativos y las gestiones ante cada dependencia del Gobierno de la Ciudad. 
• Contará con un expediente único, donde se homologarán los requisitos para todos los proyectos inmobiliarios que sean viables.
• Promoverá una inversión responsable, garantizando procesos transparentes y eficientes, para promover el desarrollo de la ciudad, erradicando cualquier rasgo o signo de corrupción que pudiera presentarse en la cadena de seguimiento de aprobación de los proyectos. 
• Tendrá una coordinación interinstitucional que permita a todos los involucrados conocer las características normativas y especificaciones de cada proyecto. 

El funcionario consideró que las características mencionadas permitirán la creación de un espacio para coordinar la toma de decisiones con las autoridades competentes: “Estoy convencido de que, en muy corto plazo, empezaremos la semana que entra, para que a primera fecha podamos atender todos los proyectos”.

Y agregó que existirá una clasificación de proyectos:

• Aquellos de más de 10 mil metros cuadrados de construcción, particularmente los casos de vivienda.
• Proyectos que tengan más de 5 mil metros cuadrados de construcción, vinculados a oficinas, comercios, servicios, industrias, equipamiento en general.
• Proyectos de usos mixtos.

Para iniciar el proceso, las personas interesadas deberán ingresar su trámite ante la Secretaría de Planeación, Ordenamiento Territorial y Coordinación Metropolitana, después presentarán sus proyectos ante la Mesa de Trabajo interinstitucional, donde aquellos proyectos que reciban observaciones deberán hacer los ajustes, para darles viabilidad. Entonces, los proyectos aprobados continuarán con el procedimiento establecido para cada trámite.

El presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Francisco Alberto Cervantes, reconoció que el sector lleva más de 30 años esperando la Ventanilla Única de Coordinación: “Aquí nos acompañan más del 80 por ciento del Producto Interno Bruto de la Ciudad de México, con los desarrolladores”.