CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Con dos órdenes de aprehensión en la mano, agentes de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX) se dieron a la tarea de buscar este viernes al exdiputado Benjamín Saúl Huerta Corona en tres domicilios en donde se presumía podía ocultarse, pero los aparatosos operativos desplegados resultaron infructuosos al no encontrar a su objetivo.

Lo único que se llevaron los uniformados fue un rosario de acusaciones por los destrozos causados en sus fallidas incursiones en las viviendas, por lo que la FGJCDMX tuvo que salir a decir que la dependencia asumirá los gastos por “los posibles daños que hayan resultado en el cumplimiento legal de esta diligencia”.

La fiscalía capitalina sólo reconoce un cateo y no tres como denunció la defensa del exlegislador de Morena.

En entrevista con Milenio, Rafael Castillo, otro de los abogados de Saúl Huerta, confirmó el cateo a su casa.

“Los agentes llegaron a mi casa en búsqueda del diputado Saúl Benjamín Huerta Corona. Reventaron mi puerta a pesar de que en la entrada del condominio hay un timbre donde está mi número. Rompieron la puerta e ingresaron sin darme el derecho de designar a mis testigos, como lo establece la ley, y sin ninguna formalidad ni de iniciar el acta correspondiente”, denunció.

En efecto, la FGJCDMX emitió un comunicado en el que informó que agentes de la Policía de Investigación (PDI), acompañados de ministerios públicos y peritos, ejecutaron una orden de cateo en un inmueble ubicado en calle Palenque, colonia Piedad Narvarte, alcaldía Benito Juárez, a fin de localizar y cumplimentar la orden de aprehensión que existe contra el diputado Benjamín Saúl “N”, quien es buscado por su probable participación en los delitos de abuso sexual agravado y violación en agravio de menores de edad.

El operativo, dijo, luego de que el agente del Ministerio Público de la Fiscalía de Investigación de Delitos Sexuales tuviera conocimiento de que en dicho domicilio podría encontrarse Huerta.

Con esta información, prosiguió, se realizaron las diligencias correspondientes y se acudió ante un juez de control, quien consideró los datos de prueba aportados por el representante social y otorgó la Técnica de Investigación de Control Judicial Diligencia de Cateo.

Agentes de la PDI y del Ministerio Público se constituyeron en dicho domicilio; tras tocar la puerta de acceso al edificio y del departamento y obtener respuesta negativa para ingresar, el representante social, bajo el amparo que le da la autoridad judicial para realizar dicha diligencia, ordenó a los elementos de la PDI utilizar las herramientas con que contaban para entrar.

Al realizar la inspección del inmueble, no se localizó a dicha persona, requerida por la autoridad judicial.

En un video que circula en redes sociales, se ve al conserje del edificio limpiando el piso e intrigado por la numerosa presencia de uniformados y civiles en la entrada del inmueble. Temeroso, se acerca y algo dialoga con los policías, pero luego se retira.

Entonces, los uniformados rompen un cristal e ingresan al edificio en tropel, mientras el conserje se ve agazapado en un rincón.

Los otros dos inmuebles cateados fueron de familiares del ahora prófugo de la justicia.