Narcotráfico
“El gobierno de Sheinbaum va en la dirección adecuada comparado con el gobierno de AMLO": expertos
Sobre la posibilidad de intervenciones militares de Estados Unidos en México, el investigador Eduardo Guerrero consideró posible “los ataques aéreos a los laboratorios de fentanilo en algunos estados y, de hecho, lo veo muy probable, pero con la participación y acuerdo de ambos gobiernos”.CIUDAD DE MÉXICO (apro) .- Expertos internacionales en materia de seguridad advirtieron que la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo ha marcado su distancia con su antecesor, Andrés Manuel López Obrador, al mostrar voluntad y capacidad de su gobierno para combatir a los cárteles del narcotráfico.
Durante el seminario titulado “¿Debe México prepararse para ataques militares?”, organizado por el Consejo Mexicano de Asuntos Exteriores (Comexi) y el Centro de Estudios México-Estados Unidos de la Escuela de Política y Estrategia Global de la Universidad de California en San Diego, los especialistas abordaron la política de seguridad que está llegando el actual gobierno mexicano frente a las amenazas comerciales el presidente Donald Trump, así como las posibilidades de que se incluya a los cárteles mexicanos en la lista de las organizaciones terroristas consideradas por el gobierno estadunidense.
Moderados por Rafael Fernández de Castro, director del Centro de estudios México-Estados Unidos, y por Héctor Cárdenas, director de Comexi, los expertos discreparon sobre la viabilidad de que se materialice la inclusión de los cárteles mexicanos en la lista de Organizaciones Terroristas Extranjeras (FTO, por sus siglas en inglés), ante las implicaciones para los propios estadunidenses.
Eduardo Medina Mora, exministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (2015-2019), exembajador en Reino Unido (2009-2012) y en Estados Unidos (2013-2015); extitular de la Procuraduría General de la República (2006-2009); exSecretario de Seguridad Pública (2005-2006) y exdirector del Centro de Información y Seguridad Nacional ( 2000-2005), destacó el cambio de la política pública en materia de seguridad con el gobierno de Claudia Sheinbaum, al igual que las organizaciones criminales “no solamente en el gráfico sino los crímenes predatorios en las comunidades han aumentado en los últimos años”.
Al señalar que carece de información sobre lo señalado por Trump de qué narcotráfico estaría incrustado en el gobierno de México, Medina Mora alentó a que de existir “un caso sólido, espero que sigan adelante, para mejorar la cooperación para el futuro” con Estados Unidos.
“Es lo que esperamos que este gobierno actual cambie lo que hemos tenido en el pasado”, apuntó Medina Mora, quien colaboró en áreas de seguridad con los gobiernos de Vicente Fox y Felipe Calderón.
Vanda Felbab Brown es investigadora en efe del Centro Strobe Talbott para la Seguridad, la Estrategia y la Tecnología, consideró que “el gobierno de Sheinbaum va en la dirección adecuada comparado con el gobierno de (Andrés Manuel) López Obrador”.
Para la investigadora, es deseable que los resultados por Sheinbaum “sea lo que Washington espera y que sea un mecanismo de la no designación” de los cárteles mexicanos como organizaciones terroristas, y que haya una colaboración encaminada “a una presencia más fuerte de los agentes del orden público de México, que podrían ser militares y el desmantelamiento de estos grupos que han causado tanto daño y violencia en México”.
Para la investigadora, la colaboración entre México y Estados Unidos, deber incluir “no solamente la destrucción de los laboratorios, porque los laboratorios se pueden crear rápidamente, sino hacer investigaciones conjuntas contra las estructuras y operaciones de estos cárteles”.
El investigador Eduardo Guerrero consideró que, con la detención del Mayo Zambada durante el gobierno de Joe Biden, “las autoridades estadunidenses causaron un gran conflicto en México”, lo que derivó en “una gran división en el cártel y que ha producido una guerra masiva en la ciudad de Culiacán y en otras ciudades alrededor, con un gran potencial de ampliarse a otros estados”.
Guerrero consideró que las autoridades mexicanas “han hecho un gran trabajo de tratar de parar la ampliación, la extensión de este conflicto hacia otros estados (…) por supuesto no han podido reducir la violencia para retomar el control de varios territorios que están bajo el control de estos delincuentes o de organizaciones criminales”.
Apuntó que a cuatro meses de iniciado el gobierno de Sheinbaum “hay un gran contraste” con su antecesor, demostrado en “los números de arrestos que han hecho de personas con alto perfil y un gran número de incautaciones de drogas”, así como “el reforzamiento de nuestra frontera norte”, amén de que cuenta con un “equipo mexicano que es muy profesional y tiene un gran contraste con el gobierno anterior”.
Sobre la posibilidad de intervenciones militares de Estados Unidos en México, Guerrero consideró que no lo puede descartar sobre todo “los ataques aéreos a los laboratorios de fentanilo en algunos estados y, de hecho, lo veo muy probable, pero con la participación y acuerdo de ambos gobiernos”.
Sobre la posibilidad de que estén en la relación de la FTO de Estados Unidos, los mexicanos Medina Mora y Guerrero coincidieron en que habría obstáculos para el gobierno estadunidense para aplicar medidas para combatir a los grupos criminales dentro del territorio mexicano.
El exprocurador y exsecretario de Seguridad Pública con Felipe Calderón, sostuvo que la pretensión de incluir a los cárteles mexicanos en FTO no es nueva, pero que la decisión se ha detenido por el propio gobierno estadunidense ante los impactos a nivel interno.
“El obstáculo más importante para esto son las consecuencias internas de esto, más del 50% del valor agregado del valor agregado (del narcotráfico) tiene las consecuencias dentro de los Estados Unidos, no solamente económicas”.
Abundó que los impactos que vería el gobierno estadunidense serían para las armerías, “las armas que se les da a los cárteles son vendidas por compañía de Estados Unidos”, de igual manera afectaría a los bonos “por el lavado de dinero y a las importaciones de las compañías de Estados Unidos”.
Medina Mora recordó que la inclusión en la lista FTO deriva en sanciones para todas las entidades que llegan a financiar a esas organizaciones terroristas, lo que ha llevado a compañías estadunidenses a ser sancionadas cuando se ven obligadas a pagar protección, como ocurrió con la compañía Chiquita Banana que pagaba extorsiones a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Al destacar que hay estadunidenses que están involucrados con los cárteles de la droga no sólo como consumidores, Medina Mona consideró que en el pasado “el Departamento de Justicia llegó a la conclusión de que designar a los cárteles de la droga como organizaciones terroristas, va a imponer una gran presión para perseguir a estos delincuentes dentro de los Estados Unidos”.
Al señalar que en México es una realidad que empresas estadunidenses “pagan extorsiones” a organizaciones criminales para llevar mercancías a su país, el exministro de la Corte dijo que “en Estados Unidos no se autoriza automáticamente a involucrarse en acciones militares, dentro de México o en cualquier otro lado del mundo, esto es un proceso y no es fácil como suena”.
Eduardo Guerrero apuntó que si bien se ha mencionado al Cártel de Sinaloa como uno de las organizaciones que podrían entrar en la FTO, “en este momento podría dejar de existir y ser solamente un recuerdo”, pues en estos momentos “hay 60 organizaciones que están peleando, creando mucha violencia, hay mafias regionales, pequeñas pandillas y hay condiciones que están peleando por los territorios de Sinaloa, ese es el primer obstáculo para designar algo, como el Cártel de Sinaloa, como una organización terrorista”.
Advirtió que la decisión del gobierno de Trump de nombrar considerar terroristas a los cárteles mexicanos se deriva de la evaluación del combate que hizo el presidente López Obrador, “que lo consideraron ineficiente o inefectivo y no creo que tienen la manera de destruir o atacar estas organizaciones o estos cárteles criminales, ya que han crecido y se han ampliado en esta administración”.
Consideró que, por los resultados del gobierno de Sheinbaum, “las autoridades estadunidenses tienen un punto de vista diferente y una opinión diferente” en comparación con el gobierno anterior “de cómo México está desempeñándose con las políticas de seguridad y sus alcances y sus resultados”.
Vana Felbab coincidió en que en el pasado se desechó la idea de incluir a los cárteles mexicanos como organizaciones terroristas por las dificultades que implica, sin embargo “el gobierno de Trump no tiene miedo de esto, se siente muy bien haciendo todo esto a pesar de las consecuencias económicas”.
La investigadora resaltó que “la promesa de Canadá de que designar a los cárteles como organizaciones terroristas”, es otro elemento que será aprovechado por Trump para considerar que “tiene una fuerza de trabajo unida entre Estaos Unidos y Canadá”,
Agregó que “las posibilidades son bastantes grandes de que se haga esta designación y la perspectiva ciertamente de los Estados Unidos y el presidente Trump están pidiendo que se detenga totalmente el flujo de entrada del fentanilo, algo que es difícil de alcanzar”.