Claudio X. González
Claudio X. González expresa confianza en Sheinbaum: “Cabeza fría es el camino” (Video)
“Se está generando la unidad que necesitamos”, asegura el empresario. “Va a haber turbulencia, sin duda, pero creo que vamos a sacar esto adelante bien”.CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El empresario Claudio X. González Laporte mostró su plena confianza en el gobierno de Claudia Sheinbaum para ejecutar el Plan México y resolver la relación con Estados Unidos, aunque espera que se presenten algunas turbulencias.
Actuar con la cabeza fría “es el camino”, dijo.
“Se está generando la unidad que necesitamos para poder lograr soluciones a todo esto que tenemos enfrente. Va a haber turbulencia, sin duda, porque así es la administración Trump, pero yo creo que vamos a sacar esto adelante bien, va a costar trabajo pero lo vamos a sacar bien”, dijo
En entrevista, al salir del encuentro de la presidenta Claudia Sheinbaum con el sector empresarial, en Palacio Nacional, dijo que, por ejemplo, se tendría que adelantar la revisión del T-MEC, para lo cual México está listo.
“Obvio que vamos a tener que hacerle mucho caso a lo de fentanilo y a lo de migración, pero creo que la presidenta está muy bien con la cabeza fría, es el camino”.
Dijo que los empresarios están dispuestos a invertir y confiar en México, además que se logrará la continuación del T-MEC, pero pese a las dificultades “no nos debemos de asustar porque tenemos con qué sacarlo adelante y lo vamos a sacar adelante”.
Afirmó que “es muy importante el Plan México, sobre todo, en el hecho de querer lograr ser la décima economía del mundo y de que se requiere de 25 a 28 por ciento del PIB en inversión es muy importante y hay que aterrizarlo precisamente para lograr esos objetivos”.
No será suficiente un mes sin la aplicación de aranceles para México porque eso “va a apretar los tiempos, pero vamos a ver, se va a hacer el esfuerzo. Vamos a ir buscándole, ya por lo menos se logró el primer paso, falta el segundo, el tercero y el cuarto”.
-¿Confianza en el gobierno de México? -se le preguntó.
-Sí, definitivamente, respondió el empresario y padre de Claudio X. González Guajardo, quien fue de los mayores opositores al gobierno de Andrés Manuel López Obrador y a su partido, a quien la presidenta Sheinbaum llamó “junior tóxico”.
Empresarios cierran filas
El resto de representantes empresariales también cerraron filas en torno a la presidenta Sheinbaum Pardo.
Francisco Cervantes, presidente del Consejo Coordinador Empresarial, reiteró “el apoyo absoluto a usted, estimada presidenta, respecto a la posición de diálogo con firmeza que ha planteado frente al gobierno de los Estados Unidos”.
Compartieron el llamado a la serenidad, pero anteponiendo los principios “y sentido de unidad como nación, para privilegiar el diálogo frente a los desafíos que nos presenta la relación bilateral con nuestro principal socio comercial, no solamente en este momento, sino durante los próximos meses”.
Durante el evento el empresario ratificó la absoluta disposición para asumir la tarea de acompañar al gobierno de México en el diálogo, negociación y cooperación en materia comercial con los socios Estados Unidos y Canadá. “Cuenta usted en estos momentos y siempre con el decidido apoyo del sector empresarial mexicano”.
Alejandro Malagón, presidente de Concamin, dijo al salir del encuentro: “Yo creo que este mes es suficiente como para que haya confianza, que es lo que quiero reconocer el trabajo de la presidenta, lo que hizo, lo que logró es muy importante porque lo que se pone en la mesa son mesas de diálogo para empezar a buscar opciones que le den la tranquilidad que quieren allá, pero sin dejar de recalcar que lo mejor que nos puede pasar es la unión que tenemos en el T-MEC porque nos volvemos realmente en la potencia mundial comercial”.
El evento en la sede presidencial fue para explicar lo que sucedió en la llamada que sostuvo la jefa del Ejecutivo Mexicano con su homólogo estadunidense, Donald Trump; y para comenzar a delinear las acciones a seguir, con paso apresurado, pues se tiene menos de un mes para volver a negociar.