Claudia Sheinbaum
Sheinbaum celebra “primer paso” de España por reconocer agravios a pueblos originarios
"Hubo injusticia, justo es reconocerlo hoy y justo es lamentarlo, porque esa es también parte de nuestra historia compartida y no podemos ni negarla ni olvidarla”, dijo el canciller español José Manuel Albares.CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La presidenta Claudia Sheinbaum celebró el discurso del ministro de exteriores de España, José Manuel Albares, quien reconoció que hubo “dolor e injusticia hacia los pueblos originarios” mexicanos.
La mandataria mexicana respondió: “Enhorabuena por este primer paso”, y resaltó que nunca antes un funcionario español lamentó la injusticia que se cometió.
Sobre la brutalidad que fue el proceso llamado históricamente de “conquista”, previo a la sesión de preguntas y respuestas, Sheinbaum afirmó que “hoy empieza a saldarse (el agravio) con este inicio de este discurso al hablar de lamentar esta violencia del pasado (…) Es un asunto vivo, no es retórico”.
Durante la exposición “La mitad del mundo. La mujer en el México” en el país europeo, el funcionario español reconoció que México ha sido refugio de miles de españoles a quienes no se les dio la espalda, por lo que admitió lazos “profundamente humanos que se convirtieron en puentes, cuando más necesidad hubo de ellos. España nunca olvidará y nunca dejaremos de agradecer la acogida del pueblo mexicano y del gobierno de Lázaro Cárdenas a los exiliados españoles que encontraron en aquella otra orilla del océano que nos une, la libertad que aquí les negaba la dictadura.
“Y a los mexicanos que nunca nos dieron la espalda, aquellos españoles libres, como los españoles libres de hoy en día, damos las gracias. Esos españoles enriquecieron con su arte, con su cultura y con su ciencia, nuestro patrimonio compartido. cultura, lengua, arte, ciencia, vínculos económicos, sociales, personales, familiares, todo eso de grande y positivo”.
Albares admitió que “ha habido en nuestra relación, en nuestra historia, una historia muy humana y, como toda historia humana, de claroscuros, y también ha habido dolor, dolor e injusticia hacia los pueblos originarios a los que se dedica esta exposición. Hubo injusticia, justo es reconocerlo hoy y justo es lamentarlo, porque esa es también parte de nuestra historia compartida y no podemos ni negarla ni olvidarla”.
En conferencia, la presidenta aseguró que los pueblos originarios tienen que ser reconocidos como la grandeza cultural de México.
“No es algo del pasado, es presente y representa la dignidad del pueblo y su fuerza y la vamos a seguir dignificando”, dijo.
Recordó la carta “muy diplomática” que Andrés Manuel López Obrador envió, en 2019, al rey Felipe VI de España, la cual no tuvo respuesta y desencadenó en una campaña contra el entonces presidente mexicano.
México envío una exposición de mujeres de maíz, mediante del INAH, la Secretaría de Cultura y la embajada de México en España.
Esta mañana, la jefa del Ejecutivo federal leyó el prólogo del libro de esa exposición que se envío a España porque, afirmó, es indispensable el reconocimiento de España de lo que sucedió con la llamada “conquista”, que al contrario dijo fue un proceso “muy violento, de invasión violeta” y por eso pedían al gobierno español que ofrecieran disculpas a los pueblos originarios, como México lo ofreció a la comunidad China y a los pueblos Yaquis.
En el prólogo destaca la grandeza de las mujeres tejedoras de la historia de lo que hoy es México. “Pero esta historia también tiene heridas. La conquista no fue un encuentro entre iguales. Fue un proceso brutal, de violencia, imposición y despojo. Se intentó destruir no solo territorios, sino culturas enteras, saberes milenarios, lenguas, modos de vida”.
Agregó: “Las mujeres indígenas sufrieron especialmente ese embate: fueron silenciadas, desplazadas, violentadas. Sin embargo, resistieron. En silencio y en acción. En lo individual y en lo colectivo. En el telar y en la palabra. En el rito y en la comunidad. Hoy, esas voces resurgen con fuerza. Las mujeres indígenas de México siguen creando, sanando, luchando y -corriendo diría yo- enseñando”.
 
             
						
							           
							         
						
							           
							        